La psicología política se define como la intersección de diversas disciplinas como la historia, economía, sociología, antropología y filosofía. Tiene como objetivo estudiar la adaptación de los ciudadanos a los cambios sociales y políticos. En Latinoamérica, la psicología política se desarrolló a partir de los años 1960, influenciada por eventos políticos y sociales como la Revolución Cubana, con un enfoque crítico.