El documento define varios términos arquitectónicos y religiosos. Define un retrato como la representación de una persona, especialmente su cara. Luego procede a definir otros términos como chapitel, gárgolas, retablo, lonja, fraile, vidriera, sillería, arco apuntado, bulto redondo, contrafuerte, universidad y arbotantes, explicando brevemente sus significados en la arquitectura y religión.