El sector terciario se centra en la prestación de servicios y comprende diversas actividades como el transporte, turismo, comercio y servicios financieros. En España, este sector ha crecido significativamente desde los años 70, representando aproximadamente el 70% del PIB y ocupando al 67% de la población activa, aunque presenta desigualdades territoriales. Existen desafíos como la estacionalidad del turismo, el impacto ambiental y la adaptación del comercio a nuevas demandas y tecnologías.