Compartimos las reflexiones de Susana Gómez y Javier Laporta en torno a la participación en cultura. El texto forma parte de la introducción al Módulo IV ('Difusión: Comunicación, Públicos y Educación') del Máster de Gestión Cultural de la Universidad Carlos III de Madrid.

1. SUPERAR LA PARTICIPACIÓN
Este último otoño un colectivo de arquitectos llamado Assemble ganaba el
Turner Prize, un Señor Premio en el mundo del arte. Una Institución
insignia, la Tate, les otorgaba el Premio más importante del Reino Unido
por la labor que habían realizado en Granby 4 streets, en el área de
Toxteth (Liverpool).
Más allá de la sorpresa por la elección de los artistas (arquitectos,
diseñadores, activistas y bastante más jóvenes que los habituales en este
tipo de premios) lo interesante de esta decisión es que el arte
participativo (community art) entraba de lleno en el circuito institucional.
Granby 4 streets comenzó hace 5 años activando la comunidad de la zona,
escuchando y proponiendo un proyecto de rehabilitación en colaboración
con los vecinos que llevaban años peleando por retener la demolición.
Ronnie Hughes, uno de los ganadores del Premio, lo define así:
A story of a determined community, of multiple failed regeneration
initiatives and of the final coming together of a Community Land Trust
and a creative partnership, now not only on site at long, long last. But
also and bizarrely up for the Turner Prize. The deepest community led
learning of my life.
Participación en estado puro.
Hace 2 años, cuando los nominados para el Turner tenían también el perfil
transgresor que se les presupone para este Premio, ¿habría cabido entre
ellos un colectivo con un proyecto de community art?
¿Cómo hemos llegado hasta aquí? ¿Cómo ha ido tan rápido el asunto de la
participación en las artes? ¿Cómo en tan poco tiempo ha logrado hasta
colonizar los buques institucionales?
En España, durante este último año, han florecido las convocatorias
institucionales relacionadas con el tema en forma de debate, conferencia,
congreso, etc. Sería fácil concluir que esto de la participación es una moda

2. o, al menos, una tendencia. Necesitamos un poco más de tiempo para
estar seguros de la respuesta.
Que la visibilidad de los proyectos participativos en España haya
evolucionado tiene que ver con las claves políticas y sociales de cambio
que han sucedido en los últimos años y un ambiente artístico permeable y
colaborador. Que de repente la participación lo impregne todo
seguramente tiene que ver con llamar “participación” a muchas cosas que
no lo son y, también, con que el mundo del arte contemporáneo ha
desarrollado un creciente interés por involucrar a las personas en sus
trabajos. Francois Matarasso da buenos y numerosos ejemplos de ello
aquí.
En este contexto cambiante los agentes vinculados en un proyecto cultural
piden tener una mayor involucración. A lo largo del Módulo veremos cuál
es la relación con el público y cómo éste aspira a tener más protagonismo
tanto en la difusión como en el proceso creativo. Analizaremos el modelo
de comunicación multibanda y las maneras más eficaces de utilizarlo.
Estudiaremos la creciente importancia de las prácticas en educación y
mediación que reflexionan sobre el papel del visitante y le invitan a ser
más activo. Y debatiremos sobre las propuestas culturales participativas y
si éstas deben ser superadas hacia un nuevo modelo de cultura que sitúe a
la ciudadanía en el centro.
Susana Gómez / Javier Laporta
@susdina / @javierlaporta