El documento describe el caso de un paciente de 52 años que se sometió a una prostatectomía radical por adenocarcinoma de próstata. Un mes después de la cirugía, presentó una fístula uretral post-prostatectomía. Se realizó una uretrografía retrógrada que mostró daño en la uretra glandelar y peniana. Finalmente, se decidió tratar quirúrgicamente la fístula mediante una intervención de reparación uretral por abordaje infrapubiano.