El método de Van Dijk se basa en seis etapas para desarrollar la comunicación en niños sordociegos, comenzando con crear un vínculo afectivo y luego progresando a la imitación de movimientos, la manipulación de objetos, la comprensión de su propio cuerpo y el desarrollo de gestos comunicativos únicos. El objetivo final es que los niños puedan expresarse y comprender su entorno.