2. El expediente electrónico judicial es un conjunto de
documentos que componen un procedimiento
administrativo y que están totalmente en apoyo
electrónico.
El Estado ha incorporado las buenas prácticas
gubernamentales e instrumentos tecnológicos
importantes que sirven para un mejor manejo
administrativo a favor de la ciudadanía, bajo los
principios de “celeridad y transparencia”. Es por
ello de la incorporación del expediente electrónico
judicial. “Este documento pretende modernizar el
órgano jurisdiccional incorporando nuevas
herramientas tecnológicas para lograr mayor
confianza y seguridad en el servicio de justicia”.
3. La desmaterialización del expediente con el
proceso electrónico judicial, la incorporación en la
legislación del concepto de evidencia digital, el uso
de la agenda electrónica, la firma digital y de
instrumentos estadísticos y electrónicos que midan
los indicadores judiciales.
4. Cabe señalar que la Oficina Europea de
Cooperación Judicial (Eurojust) y el organismo de
Cooperación Jurídica y Judicial Internacional de los
países Iberoamericanos (IberRed) firmarán un
memorándum de entendimiento en busca de una
mayor cooperación transatlántica del cual Perú fue
parte.
5. Los procesos podrán desarrollarse en 26 días, lo
que usualmente duraba 151 días.
Este proyecto piloto se iniciara en la capital de
Lima, iniciándose en los juzgados comerciales y
luego se darán en los ámbitos jurisdiccionales
civiles y penales.
6. El proyecto se basa en los diferentes herramientas
tecnológicas y el uso del internet a través de un
servidor, los abogados de los litigantes podrán
iniciar un juicio sólo cargando el expediente en
línea. Otro de los objetivos que señala este
proyecto, ofrecerá una mayor transparencia en los
procesos y se evitará la corrupción en la
administración de justicia, este tendrá una duración
de seis meses de implementación toda vez que el
Presidente del poder judicial lo apruebe. Dicho
proyecto demandará 400, ooo mil destinados en
capacitación de los jueces y secretarios judiciales.
7. Las ventajas de la tramitación electrónica son
evidentes: ahorro de papel, que no desaparición; ahorro
de espacio de almacenaje, tanto de expedientes vivos
como cerrados; ahorro de costes; mayor celeridad en la
realización de trámites (baste pensar en toda la
información a la que ahora el Juzgado puede acceder a
través del punto neutro en tiempo real, cuando antes
había que oficiar, expedir el oficio, esperar respuesta);
mayor celeridad en el auxilio judicial; desaparición de
desplazamientos; el expediente siempre estará a
disposición de los profesionales que intervengan en el
mismo en cualquier momento (se acabó, desde el punto
de vista del profesional realidades como “lo lleva mi
compañero y no está”; “el expediente lo tiene el
Secretario”; “lo tiene Fiscalía”; “los expedientes del
juicio de mañana ya los tiene Su Señoría”); facilidad en
la presentación y traslado de documentos… y muchas
más, que todos los lectores podrán imaginar.