Este documento analiza los posibles efectos negativos del uso excesivo de la televisión, videojuegos, ordenadores, internet y teléfonos móviles en los niños y adolescentes. Señala que un uso abusivo puede interrumpir la comunicación personal, limitar la libertad e instigar comportamientos como la violencia o el consumo de drogas. También ofrece pautas para un uso responsable de estas tecnologías, como limitar el tiempo de exposición, supervisar los contenidos y establecer normas claras en el hogar.