Este documento describe los hidratos de carbono, incluyendo su clasificación, digestión y efectos en la salud tanto por deficiencia como por exceso. También explica los beneficios de la fibra dietética para el control de peso, la salud digestiva y cardiovascular, y la prevención de diabetes y cáncer. Se recomienda un consumo diario de 25-35 gramos de fibra a través de frutas, verduras y alimentos integrales.
2. Son un grupo de biomolèculas, también llamados glùcidos, que se pueden encontrar
de manera exclusiva en alimentos de origen vegetal.
Constituyen uno de los tres principales grupos funcionales que forman la materia
orgánica junto con los lípidos y las proteínas.
Una forma sencilla de clasificar los glúcidos, de acuerdo a la complejidad de
sus moléculas, es la siguiente:
3. Digestión de los glúcidos
Los únicos glúcidos directamente
absorbibles son los monosacáridos, los
disacáridos y polisacáridos presentes en
los alimentos, para poder ser utilizados
por el organismo deben ser previamente
desdoblados por hidrólisis. El proceso de
digestión de los Hidratos de Carbono
comprende un conjunto de acciones
mecánicas, físico-químicas y enzimáticos.
El estado en que se encuentran los
glúcidos en los alimentos es muy diverso,
algunos son insolubles en agua, como el
almidón y la celulosa, otros, en cambio
son muy solubles, como los mono y
disacáridos.
.
La masticación facilita también la
extracción de los Hidratos de Carbono
para luego ser “atacados” por los jugos
digestivos
4. DEFICIENCIA
Muchas enfermedades se producen por consumir
pocos carbohidratos, sobre todo en los niños
porque si no obtienen los nutrientes que estos
aportan, no obtienen lo necesario para el
correcto desarrollo del cerebro, el sistema
nervioso y todos los órganos vitales del cuerpo.
5. El cuerpo intenta conseguir esa energía quitándola a los órganos que considere
menos importantes, como los músculos, luego puede avanzar hasta los importantes
por lo que el niño y también el adulto, comienza a perder primero la energía, se
siente más cansado, no tiene ganas de correr y juguetear como es característico de
la niñez o de trabajar o estudiar. Luego comienza a perder masa corporal, se
vuelve casi esquelético y a partir de ahí por la falta de carbohidratos comenzarán
a fallar el resto de los órganos.
6. EXCESOS
Una de estas enfermedades es la obesidad: se produce, generalmente por el consumo
en exceso de los carbohidratos llamados refinados que son los azúcares, almidones y
sus combinaciones manufacturadas, por ejemplo: golosinas, productos de confitería,
panes y pastas. El organismo simplemente, recibe más energía de la que necesita y
comienza a acumularla en el cuerpo.
Además puede provocar o ayudar a que aparezcan enfermedades como la diabetes o
del tipo cardiovasculares porque el organismo recibe, en el primer caso demasiada
glucosa y en el segundo las arterias tapadas y el sobre peso exige a los órganos mayor
trabajo con el aporte de pocas energías.
7. La fibra es la parte de las plantas que no se puede digerir, como la cubierta exterior
(salvado) de los cereales, y la cáscara y partes fibrosas de las verduras y las frutas. Hay
dos tipos de fibra: soluble e insoluble en agua.
La fibra soluble forma un gel suave que permite el paso del alimento por las vías
intestinales y retrasa la absorción de nutrimentos como la glucosa y el colesterol; se
encuentra principalmente en frutas y verduras, en especial en las manzanas, las naranjas
y las zanahorias, así como en el salvado de avena, la cebada y las leguminosas.
La fibra insoluble absorbe agua y hace que las heces sean blandas y voluminosas; su
principal fuente está en cereales integrales, tortillas de nixtamal, frijol, verduras y frutas,
entre otros alimentos.
8. La fibra y el control de peso . Se necesita más tiempo para masticar un
alimento fibroso, lo que retarda el proceso de alimentación e incrementa la
sensación de saciedad y plenitud, además de evitar la ingestión excesiva de
alimentos.
La fibra y los trastornos intestinales . La combinación de una dieta rica en
fibra, el consumo de líquidos y el aumento en el ejercicio son recomendables para
combatir el estreñimiento, las hemorroides, el intestino irritable (caracterizado por
estreñimiento, diarrea o episodios alternos) y la diverticulitis (en la cual pequeñas
bolsas o apéndices llamados divertículos pueden infectarse).
9. La fibra y la diabetes. La fibra soluble retarda la entrada de glucosa en la corriente
sanguínea, lo que facilita el control de la diabetes.
La fibra y las enfermedades del corazón. La fibra facilita la excreción de ácidos
biliares con colesterol. Por ello, una dieta alta en fibra y baja en grasa puede disminuir
las concentraciones sanguíneas de colesterol y las enfermedades cardiovasculares.
La fibra y el cáncer de mama. La fibra dietética ayuda tanto a disminuir la cantidad de
estrógenos en el organismo, como a reducir el riesgo de desarrollar este cáncer.
10. ¿Cuánta fibra se necesita?
En el adulto se sugiere consumir diariamente entre 25 y 35 g de fibra, como mezcla de
fibra soluble e insoluble. Se ha sugerido una relación 3: 1 de fibra insoluble con respecto a
la soluble; lo que puede obtenerse con cinco porciones de frutas y verduras y seis porciones
diarias del grupo de tortillas, pan integral y leguminosas.