Revisión de 5 de los pensadores más relevantes en la forja de las ideas educativas del siglo XX y XXI en America: Simón Rodríguez, John Dewey, Arturo Uslar Pietri, Luis Beltrán Prieto Figueroa, Paulo Freire
4. Desde la perspectiva de Rodríguez educar es crear voluntades necesarias para cimentar
las nuevas Repúblicas.
Para Rodríguez la educación ha de ser popular, entendida como general y separada de la instrucción, que ha de
ser obligación del gobierno y que debe construir una nación prudente, fuerte, experta y pensadora.
Rodríguez propone una enseñanza verbal y lecciones conferenciales, es decir, dispone el campo educativo como
un foro dialéctico en el que los conocimientos emergen según las aptitudes y necesidades de los individuos.
5. APRENDER HACIENDO
John Dewey
Propositor del pragmatismo en la Nueva
Escuela americana, desarrolla un enfoque
educativo que ve a la formación como función
social e individual y a la escuela como la vida
misma reflejada. Concentrando sus esfuerzos
en el estudiante, el maestro y el programa,
Dewey estima:
Que la educación busca generar nuevas perspectivas para la humanidad.
Que el programa está dirigido a la formación de la personalidad.
Que el maestro transforma contenidos para el conocimiento, la vida y la acción.
6. Función formadora del ser social.
Función transmisora a tono con sus nuevas exigencias sociales.
Del mismo modo concibe que, para que la educación sea auténtica igualitaria, ha de ser compensatoria y
descubridora de vocaciones y aptitudes.
La escuela es un puente hacia la sociedad global y es el fundamento del progreso tecnológico y del
desarrollo del país.
7. Incorpora en su plan a los medios de divulgación e información como elementos prioritarios para
la educación.
Considera imprescindible la capacitación y acreditación formal del docente como instrumento
competente para la formación general.
Afirma a la educación como un proceso permanente y experimental, sistémico y que abarca toda la vida del
individuo.
8. Para el pensador brasilero, Paulo Freire,
comprometido con los movimientos políticos y
sociales de su época, de un fuerte componente
reivindicativo, la educación es más que un
proceso de aprendizaje, es un proceso de
ajustes, de desaprendizajes, en los que el
oprimido debe buscar su propia liberación.
Concibe la educación como un proceso social contextual y universal.
La educación es siempre subjetiva y parte del ser humano y de su propia perspectiva reflexiva de sí
mismo y de lo que lo rodea.
La educación es un proceso afectivo y formador de vínculos, que deja de ser un acto bancario y comienza a
ser un acto cognoscente, mediante la dialéctica entre los actores participantes.