1. Producto 8
Everardo Zubiri Austria
Identificar significaciones, creencias y prenociones sobre la narrativa en el aprendizaje
de la historia.
En nuestro trayecto como docente hemos incurrido en concebir a la narrativa desde dos
elementos que se construye a partir de textos orales o en construcciones textuales escritas.
En ambos casos se ha considerado como reflejo de los elementos que son importantes para
determinada persona, comunidad o sociedad. Así que la primer característica que se otorga
es la configuración subjetiva de la realidad, una razón más por lo cual las ciencias naturales
en parte no le refieren a la altura de un discurso científico.
Es así, como consideramos que por ejemplo la inundación del 1999 es narrada y registrada
dependiendo de las implicaciones y la significancia del narrador. No es la misma idea
expresada por las personas que vivieron el suceso y de quien observó a distancia la
secuencias de hechos. De esta forma es como la narrativa es un constructo de la realidad en
la temporalidad de un hecho. La interpretación es construida a partir de nuestras propias
experiencias o relaciones e intereses con el hecho histórico.
Los textos narrativos que se facilitan en la escuela primaria y a los que el alumno tiene
acceso en las redes o en los sitios WEB también implican esa responsabilidad divergente en
las versiones sobre los hechos. Un estudiante puede visitar sitios y compararlos entre estos y
los libros y verificar que existen configuraciones de la realidad diferentes según las fuentes o
el propósito del autor. Hay disparidades en fechas, en el enfoque las acciones a las que le
otorga relevancia, la serie de fotografías que muestra. Es otro de los elementos de la
narrativa y de las historias que promueve la serie de dudas y que bien dirigida puede facilitar
el interés con la finalidad de configurar una nueva realidad que sea lo más congruente
posible. Para llegar a este proceso evolutivo debe tomarse conciencia del hecho como tal y
examinar todas las variables posibles.
Como estrategia de aprendizaje la narrativa otorga muchas ventajas. En el terreno de la
evaluación ofrece un espacio para que les estudiantes desarrollen sus competencias
comunicativas y externen en una práctica social del lenguaje sus representaciones sobre el
hecho histórico y el espacio geográfico hasta antes de tener contacto con documentos
narrativos lo cual presupone un ejercicio de organizar la realidad dentro de un espacio
temporal.
Este mismo ejercicio resulta ser de mayor complejidad cuando al haber sido orientado para
paulatinamente analizar, examinar, saber mirar y evaluar la información que de formal oral o
textual se le presente, configure un nueva realidad al final de la sesión. De acuerdo a las
características del grupo el docente decidirá si es conveniente hacerlo de forma oral y
2. escrita, o de manera grupal o individual. Convertirla en un guion para escenificación o un
elemento para la creación de debates al realizar una crítica sobre la objetividad de su
narrativa.
Parte de la función de la escuela primaria es desarrollar al ser humano para ser más humano
y para la convivencia. La narrativa es una necesidad humana de compartir experiencias.
Todos, en ambientes informales o en ambientes organizados requerimos momentos para
representarnos. Los niños lo realizan, en este ejercicio y a partir de sus intereses contemplan
detalles, versiones, secuencias, contextos y perspectivas según su complejidad cognitiva y
su predisposición con respecto a su gusto. Narrar desarrolla no sólo el lenguaje sino a la
persona misma de tomar conciencia de su entorno, de su tiempo y de sí mismo.
La narrativa exige congruencia y conciencia, no tan rigurosa como los enunciados del
neopositivismo dialectico pero guarda ciertos límites naturales. El cuento inventado por un
niño de primer o sexto grado lleva cierta causalidad que confiere lógica a los hechos.
Después de haber leído un suceso como el movimiento de Independencia se toma
conciencia de las implicaciones, los esfuerzos, el propósito, la causa y si analizamos el texto
consultado se puede encontrar congruencia en el interior de la macroestructura textual. Es un
complejo hilado de ideas que conforman un todo inteligible. La abstracción de esa parcela de
la realidad no es fácil lograr, la narrativa entre más compleja es, más se asemeja a la
realidad.
La nueva concepción sobre la narrativa refortalece el papel del docente a ser más minucioso
en los documentos que ha de facilitarle al estudiante. Los documentos narrativos o textos
orales deberán ayudar a hacer comprensible la realidad, pero al mismo tiempo motivante. El
uso de las nuevas tecnologías puede auxiliar al respecto, se nos ocurre sólo como un
ejemplo para un nivel inicial la autograbación de un hecho histórico en la vida del alumno;
partiendo de la lógica del protagonista ayudándole a descubrir el orden secuencial de hecho,
la simultaneidad y el espacio geográfico envolvente con la finalidad de hacerlo más
consciente e introducirlo poco a poco a la forma en que está construida la historia.
Analizando su trabajo ayudándole a mejorarlo y que perciba el esfuerzo que conlleva la
documentación histórica para que configure una realidad en un espacio temporal lejano.
Todo producto elaborado en la clase de historia deberá tener un propósito y un acto
comunicativo. Es decir, deberán ser suceptible de ser socializada. La historia no debe pasar
de un documento para ser resguardado en otro. La historia es para contarse con lógica, con
detalle, con responsabilidad, con emoción para que el estudiante intente de percibir las
intencionalidades de los actores y de las circunstancias, pero sobre todo para que se
fomente una ciudadanía que emana de sentirse parte del constructo de hechos que dieron
como resultado la comunidad, la entidad y de la nación a la que ahora pertenece.