SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 8
Descargar para leer sin conexión
APORTES
Hacia
una relación
armónica
entre lo
teórico-práctico:
a propósito
de Paulo Freire
Óscar Gerardo Alvarado*
RESUMEN
En este ensayo, que se abre con un
resumen de la novena carta, la
cual es el punto central del presen-
te abordaje, se intenta una refle-
xión en torno a la importancia que
reviste la plena dependencia que
debe darse entre la teoría y la
práctica, a las cuales se refiere
Paulo Freire constantemente y pa-
ra el cual la relación entre estas de-
be ser inevitable e indisoluble.
Relación teoría y práctica
En la novena carta del texto Cartas
a quien pretende enseñar, de Paulo
Freire, este nos indica que la rela-
ción entre estos dos elementos se
asume como una interacción capi-
tal, en la que la práctica adquiere
un papel relevante, por lo que de-
be ser sabida y debe ser objeto de
saber. De tal forma, plantea una
ciencia de la práctica, lo cual le lle-
va a afirmar que la ciencia descu-
bre verdades acerca del mundo.
Asimismo, apunta que la práctica
no cuestionada crea hábito y una
realización por inercia que inhibe la
capacidad cuestionadora, mientras
que una práctica teorizada es una
práctica con sentido, no una expre-
sión vacía. De tal forma, pensar la
práctica es aprender a pensar mejor,
señala, y al educador tal actitud le
permite conocer mejor a sus alum-
nos, y las dificultades de estos, sus
vicisitudes, sus éxitos.
Por lo anterior, la práctica y la teo-
ría, señala, deben entablar una rela-
ción de diálogo, no de oposición,
pues son complementarias. La teo-
ría, sin el saber generado por la
práctica, carece de valor. Ello le
permite afirmar que la realidad so-
cial, el entorno, deba ser ineludible
e inalienable. Ante tal panorama, el
respeto a la diferencia y el rechazo a
la ideología autoritaria, por parte
de los maestros, los ayuda a ser me-
jores, tanto a ellos como a sus alum-
nos. La práctica, por ende, es inva-
luable pues, según lo apunta él mis-
mo, se aprende a leer leyendo, y se
aprende a escribir escribiendo. Pa-
* Licenciado en Filología Española. Egresado de
la Maestría en Literatura Latinoamericana.
Profesor de Comunicación en la Escuela de Es-
tudios Generales de la Universidad de Costa
Rica y Productor Académico de la UNED.
Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 75
ra ello, el estímulo se convierte en el
mejor aliado. La formación perma-
nente, indica Freire, puede alcan-
zarse si se logra profundizar en el
conocimiento de la práctica. Por lo
tanto, este pensar y estudiar la prác-
tica nos ayudan a delimitar mejor
qué es lo que queremos y hacia a
dónde vamos.
La labor de todo pensador debe
estar marcada por la huella indele-
ble que comporta el compromiso
consigo mismo y con los demás;
debe asumirse este compromiso
como el signo evidente que en-
marca a los grandes hombres y
mujeres cuya contribución a los
otros es el mejor aliciente para el
establecimiento de las teorías y las
prácticas. Uno de estos es precisa-
mente Paulo Freire, cuya labor, ex-
tensa y valiosa, ha servido como
testimonio de una acción conjunta
en la cual estos dos elementos se
aúnan de tal forma que, de acuer-
do con su visión, forman un blo-
que común, indivisible, comple-
mentario: vital dentro de la labor
pedagógica y formadora social.
Partiendo de los planteamientos
generales que esboza Freire en es-
ta carta, debe apuntarse que, efec-
tivamente, la práctica y la teoría
de ninguna manera son excluyen-
tes y si bien en ocasiones se privi-
legia una u otra, ello no es de nin-
guna manera un elemento exclu-
yente para alguna de las dos. El
término relación se torna básico e
insoslayable, por lo cual se esta-
blece un diálogo necesario que de
ninguna forma debiera ser despla-
zado. El generar el saber de la
propia práctica es lo que va a per-
mitir alcanzar este diálogo irre-
nunciable con la teoría, que ha de
emerger como baluarte de una re-
lación y una simbiosis que deben
ser fortalecidas. Tal convergencia
es el paso inmediato a la acción, al
movimiento que genera el saber
de la práctica en torno a sí misma,
como señala Freire. De tal mane-
ra, se ha de producir un descubri-
miento de esta práctica que, al teo-
rizar sobre sí, fundamenta el saber
y, por lo tanto, la auto-teoría.
Asimismo, la posibilidad de hacer
teoría y práctica, y de allí generar
una posición crítica, adquiere una
connotación relevante, trascen-
dente que debe redundar, sin du-
da alguna, en una toma de con-
ciencia popular. No se puede ser
acrítico en la medida en que ello
comporta una actitud de sumisión
y pasividad en las que algunos
grupos poderosos (económica, so-
cial y políticamente) implanten e
impongan medidas arbitrarias a
un pueblo explotado. Así, una na-
ción sin academia, una nación ig-
norante, emerge como un pueblo
sin alma y sin convicciones. Por lo
tanto, la lucha y la exigencia de los
derechos no es rebeldía, sino nece-
sidad. Esto permite afirmar que
una práctica sin teoría, y vicever-
76 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
sa, constituyen una aplicación va-
na, carente de sentido y desprovis-
ta de significado, sujeta al arbitrio
de aquellos que creen en la inde-
pendencia, imposible por lo de-
más, de una respecto a la otra. Es-
ta emerge como una relación in-
soslayable en la que la armonía
entre ambas se asuma como un
diálogo incuestionable y lógico.
Es así como la función de la prác-
tica, a partir de una teoría que se
funda en la aplicación de ésta, es el
desvelo pleno de Freire pues, tal
como él mismo lo señala:
“La cuestión central que se nos plan-
tea a nosotros, educadoras y educa-
dores, en el capítulo de nuestra for-
mación permanente, es la de cómo
hacer para, partiendo del contexto teó-
rico y tomando distancia de nuestra
práctica, desentrañar de ella su pro-
pio saber. La ciencia en la que se
funda. En otras palabras, es cómo
desde el contexto teórico “tomamos dis-
tancia” de nuestra práctica y nos ha-
cemos epistemológicamente curio-
sos para entonces aprehenderla en
su razón de ser” (Freire, 1998: 116).
Freire cree, por lo tanto, según sus
palabras, que la mejor manera de
enseñar es conociendo el entorno
de los estudiantes, de su realidad,
lo cual enriquece, además, al educa-
dor mismo. La precariedad de la si-
tuación en que viven muchos niños,
no debe pasar inadvertida, pues
ella es la realidad misma, el aconte-
cer en que se desenvuelven los suje-
tos, que puede desplazarse incluso
del lado de los docentes. No es la
pobreza el mejor camino conductor
hacia el cual avancen día con día los
hombres y las mujeres víctimas de
una sociedad explotadora y clasis-
ta. Las grandes obras, señala Freire,
incluyen el dar voz y dignidad a las
clases populares. Es así como el
respeto al otro deviene, por lo tanto,
en la mejor manera de llegar, de for-
ma óptima y armónica, al educan-
do, razón de ser de todo proceso
educativo. Abriga, además, la es-
peranza de que se respete el dere-
cho a la palabra y a la opinión por
parte del mismo educando, lo cual
reafirma lo señalado más arriba. La
diferencia debe ser respetada, aun-
que haya que luchar por ella. Tal
aserto lleva a afirmar que un edu-
cando carente de voz, es como una
flor marchita o como una vida sin
metas definidas. El derecho a la pa-
labra, al uso del lenguaje, en una
colectividad en que lo social a veces
opaca lo individual o viceversa, de-
viene prioridad y respeto inviola-
bles. La grandeza del hombre no
debe conocer limitaciones banales
como la negación al derecho de ex-
presarse, sino que debe centrarse en
otras luchas, no en aquellos que, in-
herentes, deberían pertenecerle por
siempre. El desvalorizar tales dife-
rencias y el tratar de imponer crite-
rios, se convierte en el mayor pre-
texto para romper la plena relación
entre lo teórico y lo práctico. Tal en-
cuentro dicotómico establece, de
por sí, la asunción a la reflexión crí-
Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 77
APORTES
tica en torno al contexto. De acuer-
do con esto, la pasividad es la me-
jor manera de complacer a los gru-
pos privilegiados y de negarse el
quehacer crítico que debe caracteri-
zar a todo sujeto. Es por ello que la
teoría, desprovista de la práctica,
emerge como un discurso vacío, dé-
bil y engañoso. El saber y la prácti-
ca son uno... ¡indivisibles!:
“En rigor, nadie le enseña a hablar a
nadie. Uno aprende en el mundo, en
la propia casa, en la sociedad, en la
calle, en el barrio, en la escuela. El ha-
bla, el lenguaje propio, es una adqui-
sición. Uno aprende el habla social-
mente. El habla viene mucho antes
que la escritura, así como cierta “es-
critura” o el anuncio de ella viene
mucho antes de lo que nosotros lla-
mamos escritura. Y del mismo modo
que para hablar es necesario hablar,
para escribir es necesario escribir.
Nadie escribe si no escribe, del mis-
mo modo que nadie aprende a cami-
nar sin caminar” (Freire, 1998: 121).
Saber para conocer
Lo anterior reafirma la idea de que
el aprendizaje es social y de que
únicamente se aprende con la
práctica y se teoriza a partir de es-
ta. El tener como premisa tal su-
puesto permite captar una mejor
visión de la realidad y del entorno
en el que se mueven los sujetos.
Conocer y aprehender tal realidad
con una visión crítica contribuyen
a reforzar una posición más digna
del grupo social.
Por otra parte, es necesario hacer ex-
plícito que los hombres y las muje-
res, independientemente de la edad,
la religión y la ideología deberían es-
tar empapados de esta dignidad, la cual
debe también acompañarlos aún
desde su más tierna infancia. Sin
embargo, es claro que la represión y
el acto de invisibilizar a aquellos
que luchen o no por sus derechos,
ha de ser siempre una puesta en
práctica de corruptor y explotado-
res. La esperanza debe, por lo tanto,
no ser un sueño alrededor del cual
giren los nobles anhelos de aquella
parte de la humanidad que aún sue-
ña con la justicia y que, por suerte,
es la mayor parte. El tejer ideales y
luchar por ellos debe ser parte de la
lucha tesonera de cada día.
No bastan los títulos ni la acade-
mia para ser felices, sino que son
imprescindibles otras cosas, tal co-
mo la toma de conciencia, la cual
no debe regirse por los estudios,
sino por la capacidad de los pue-
blos de exigir lo que les pertenece
y rechazar lo que atenta contra su
idiosincrasia y su dignidad.
Los sujetos, efectivamente, deben
adquirir conciencia, y esa capaci-
dad de cuestionamiento les abre
horizontes hacia un mañana más
digno para sí y para los suyos.
Ello es parte de los planteamientos
fundamentales de la teoría de Frei-
re, el cual aboga por la necesidad de
abrir espacios iguales para todos.
78 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
Por otra parte, todo individuo que
se pliegue a los cánones estableci-
dos, sin saber por qué estos existen,
realiza una práctica despojada de
teoría, lo cual lo enajena, lo aliena
totalmente y lo llevan al hábito en el
cual caen los conformistas, aquellos
que se roban a sí mismos el derecho
de enfrentar lo establecido y teori-
zar este. Su actitud, por lo tanto, es
vegetativa ¡Qué vida más vacía
puede fundarse todo ser humano
que caiga en tal conformismo! La
valía de los sujetos no debe caer en
conformismos, por eso pocos llegan
a ser realmente grandes. Es esta
práctica la que nos permite, por
suerte, conocer nuestro entorno, co-
nocernos mejor y conocer a quienes
nos rodean. Es darle sentido a la vi-
da, y sentir la vida de otra forma.
De nuevo concordamos con lo
apuntado por Freire cuando agrega
lo siguiente:
“Como contexto práctico –teórico, la
escuela no puede prescindir del co-
nocimiento de lo que sucede en el
contexto concreto de sus alumnos y
de sus familias. ¿Cómo podemos
entender las dificultades durante el
proceso de alfabetización de los
alumnos sin saber lo que sucede en
su experiencia en casa, así como en
qué medida es o viene siendo escasa
la convivencia con palabras escritas
en su contexto sociocultural?
Una cosa es el niño hijo de intelec-
tuales que ve a sus padres ejerci-
tando la lectura y la escritura, y
otra es el niño de padres que no
leen la palabra y que, aún más, no
ven más que cinco o seis carteles de
propaganda electoral y uno que
otro comercial” (Freire, 1998: 123).
Ahora bien, el conocer es una la-
bor conjunta en la que maestros y
educandos deben complementar-
se de la mejor manera y ello re-
dunda, necesariamente, en seres
humanos mejores. La oportuni-
dad puede estar a la vuelta de la
esquina, por lo que hay que ir en
busca de ella y no esperar los aza-
res del destino.
Es importante, asimismo, no dejar
de lado su idea de que la lectura y
la escritura dialogan y se interco-
nectan, se complementan de for-
ma tal que leer un texto es escribir
el texto y escribir este es leerlo si-
multáneamente. Son la práctica y
la teoría puestas en diálogo. Tales
son los parámetros vitales en que
se fundamenta esta carta novena,
la cual plantea esta comunión
práctica-teoría como un encuentro
irrenunciable y necesario.
Tal panorama, por lo tanto, nos
abre un espectro de conocimientos
que antes posiblemente nos hemos
negado o nos han negado. El rom-
pimiento de una superficialidad
del conocimiento y la apertura ha-
cia nuevas visiones de mundo, de
abordaje teórico-práctico nos ayu-
dan a descubrir la verdad. Tal en-
cuentro dialógico permite desem-
bocar, afirma, en una formación
permanente, para la cual se deben
Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 79
APORTES
conocer los objetivos, el para qué,
el hacia adónde, los pro, etc., sin
olvidar el conocimiento que de sí
mismos deben tener los involucra-
dos. Una lucha no se sostiene a
partir de la ignorancia, y mucho
menos de la ignorancia de sí mis-
mo. El conocerse es abrirse al diá-
logo y al cuestionamiento, es rom-
per las fronteras de lo que se des-
conoce y penetrar en el universo
marcado por la búsqueda del sa-
ber. Este ensanchar los horizontes
permite pensar mejor y practicar
mejor, de acuerdo con Freire.
El resquebrajamiento de las barre-
ras de la explotación radica en ha-
llar la diferencia y no ignorarla sim-
plemente. El ser uno más es permi-
tir que se pisoteen nuestros dere-
chos. El teorizar sin práctica es dar
un paso al vacío, es vivir de la me-
diocridad de una vida pasiva... es
sembrar el desencanto y mirar mo-
rir, como el ocaso de una tarde de
verano, el respeto y la dignidad que
toda sociedad y todo ser humano se
merecen. El desafío se yergue como
un reto para todos, principalmente
para aquellos que, sometidos al ar-
bitrio del poderoso, se oponen a
plegar su voluntad y su fuerza a la
tiranía impuesta. Asumir la crítica
es vivir, pues, como indica este teó-
rico-práctico de la docencia:
“Desafiar al pueblo a leer críti-
camente el mundo siempre es
una práctica incómoda para los
que apoyan su poder en la “ino-
cencia” de los explotados”
(Freire, 1998: 127).
La práctica y su correspondiente
teorización emergen como la for-
ma más eficaz de luchar y coaccio-
nar la acción del opresor, apoyada
por un sistema elaborado para tal
fin. Es el rechazo a la ideología au-
toritaria y avasalladora que, más
que educar, sujeta y aprisiona. El
respeto al otro, y a su práctica, es el
objetivo de esta premisa, pues, tal
como lo escribe el propio Freire en
Pedagogía de la esperanza:
“...el educador o educadora, aun
cuando a veces tenga que hablarle
al pueblo, debe ir transformando
ese al en con el pueblo. Y eso impli-
ca el respeto al “saber de experien-
cia hecho” del que siempre hablo, a
partir del cual únicamente es posi-
ble superarlo” (Freire, 1996:25).
La cita precedente evidencia, por
lo tanto, el respeto que el otro, im-
puesto como maestro, debe al edu-
cando, también poseedor de dis-
curso y de su propia verdad. Y es-
ta verdad constituye el camino a la
esperanza de la que este mismo ha-
bla y predica. Es así como el edu-
cando debe conocer y re-conocer
por sus medios, y con la ayuda del
educador, pero jamás con la imposi-
ción de este. La existencia y la refle-
xión en torno a esta se hacen cada
día y se interiorizan. Es esa la ver-
dadera fuente del saber y la libertad
de asumirse como sujeto cognos-
80 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
cente, es decir, como ente capaz de
aprendizaje más que de receptor y
repetidor de “conocimientos”.
El educando como
paradigma del pueblo
El saber se halla no solo en el que
aprende sino también en el que en-
seña y que reconoce su ignorancia
como tal y su proceso de aprendiza-
je como aquel que no se detiene si-
no que es permanente, inacabable,
infinito. Enseñar es conocer junto
con el educando y asimilarse como
un estudiante más. De tal forma, el
diálogo permite la plena confluen-
cia entre práctica y teoría como un
saber total, no parcializado, como
una formación integral.
Asu vez, en relación con lo plantea-
do por Freire, la investigadora nor-
teamericana Shoshana Felman exal-
ta la relación entre la teoría y la
práctica:
“El análisis didáctico es pues inves-
tido por Lacan no simplemente con
el valor práctico, pragmático, sino
también con la significancia teórica
–la instrucción alegórica- de un pa-
radigma: un paradigma, precisa-
mente, de la interminabilidad, no so-
lo de la enseñanza (del aprendizaje)
y del análisis (del ser analizado), si-
no también de todo acto de pensa-
miento, de teorización: de enseñar,
de analizar, de pensar, de teorizar...”
(Felmann, s.f.:24).
Es claro que la cita precedente enfo-
ca, de acuerdo como lo hemos seña-
lado, la relación dialógica que debe
existir entre ambos elementos, lo
cual ha de contribuir, de manera
óptima, a alcanzar la confluencia
precisa entre la enseñanza y el
aprendizaje.
Apartir de todo lo anterior, debe in-
dicarse que la correspondencia en-
tre estos dos elementos no debe es-
tablecer contradicciones, pues ello
ha de redundar, si así se diera, en
una confusión en el educando mis-
mo, en el tanto en que este se halla
en el proceso inicial de aprendizaje.
Esto es fundamental debido a que,
como se ha insistido a lo largo del
presente texto, para Freire, y en la
carta respectiva, el sujeto debe co-
nocer su entorno para poder aplicar
y establecer diálogo entre teoría y
práctica. Es la mejor forma de afir-
marse como tal, según se nos indica
en la siguiente cita de Gutiérrez:
“El conocimiento de la realidad se
opera como resultado del proceso
dialéctico entre el sujeto y su mundo,
entre su afirmación como sujeto y la
apertura hacia lo universal. Es este
ser histórico, esta conciencia crítica y
este ser en relación, lo que constituye
el primer rasgo del hombre que bus-
camos” (Gutiérrez, 1982:47).
El educando, según se desprende
de esta cita, es un ser en formación,
en un proceso en el cual se va ha-
ciendo, construyéndose. Ello per-
mite, asimismo, sembrar la esperan-
Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 81
APORTES
za en logros adecuados y satisfacto-
rios para el futuro. Es el germen de
un mañana que pugna por aflorar,
grande, optimista y que produce
hombres libres y auténticos. Es, por
lo tanto, una praxis reflexiva cuyo
origen debe estar en el entorno, en
la realidad de cada día, con todos
sus matices, sus pros y sus contras,
presente y palpable. Es la sociedad
productora de hombres y mujeres
disímiles, pero confluentes, opues-
tos pero similares, en la que deben
enfrentar la lucha de cada día y en la
que se hacen y a la que construyen.
En esta insistida relación, el maes-
tro debe explotar al máximo la ca-
pacidad del educando, de manera
que aquel incorpore la teoría a la
práctica y viceversa, lo cual permi-
tirá un desarrollo intelectivo e inte-
gral mayor. Es por ello que las si-
guientes palabras no deben erguir-
se como un vaticinio doloroso en el
que puedan naufragar nuestros
educandos, nuestros futuros hom-
bres y mujeres y, por ende, nuestras
naciones, almas vitales y perennes
de la historia de la humanidad:
“Un pueblo manso y resignado, res-
petuoso y discreto; un pueblo para
quien los amos tienen siempre razón,
¿cómo no habría de ser el ideal de
una burguesía que solo aspira a re-
solver su propia crisis, descargando
todo el peso sobre los hombros de las
masas oprimidas? Solo un pueblo
“gentil, meditativo” podría soportar
sin “parloteo” la explotación feroz. Y
ese pueblo que el fascismo necesita
es el que su escuela se apresura a
prepararle.” (Ponce, 1980:176)
Finalmente, la aceptación ante el
empuje de los poderosos, de los
subyugadores, es la ruta directa
hacia la venta y la entrega de los
ideales, del coraje y la dignidad
que deben caracterizar a cada pue-
blo. Es ello el planteamiento fun-
damental de esta carta, de la cual
se desprenden los valores necesa-
rios que deben caracterizar a cada
ser humano. He allí el eje, la in-
tención y el interés de Freire...¡He
allí nuestra lectura!
BIBLIOGRAFÍA
Banks, Olive, 1983, Aspectos sociológicos de la
educación. Madrid, Editorial Narcea.
Durkheim, Émile, 1976, Educación como so-
cialización. Salamanca, España, Edito-
rial Sígueme.
Felmann, Shoshana. Psicoanálisis y educación:
enseñanza terminable e interminable. (copia)
Freire, Paulo, 1998, Cartas a quien pretende
enseñar. Cuarta edición.México D.F.
Editorial Siglo XXI.
Freire, Paulo, 1996, Pedagogía de la esperan-
za. Segunda edición, México D.F. Edi-
torial Siglo XXI.
Gutiérrez, Francisco, 1981, Strip tease de la es-
cuela. Heredia, Costa Rica, Editorialpec.
Gutiérrez, Francisco, 1982, Educación como
praxis política. San José, Costa Rica, Ed.
Nueva Década.
Hameline, Daniel, 1981, La instrucción: Una ac-
tividad intencionada, Madrid, Ed. Narcea.
Krauskopf, DINA,1990, Adolescencia y edu-
cación. Quinta reimpresión a la primera
edición, San José, Costa Rica, EUNED.
Ponce, Aníbal.1980, Educación y lucha de clases.
San José, Costa Rica, Ed. Nueva Década.
82 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001

Más contenido relacionado

Similar a Dialnet-HaciaUnaRelacionArmonicaEntreLoTeoricopractico-5340148.pdf

El conocimiento zemelman
El conocimiento zemelmanEl conocimiento zemelman
El conocimiento zemelmanemartineza
 
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabria
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabriaRel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabria
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabriacamiblancoa
 
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...Mónica Osorio
 
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12danny cordoba
 
Trabajo final filosofia
Trabajo final   filosofiaTrabajo final   filosofia
Trabajo final filosofiaAngelica Vazpe
 
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-729843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7Breiner Fuentes Diaz
 
Hacia una pedagogia del conocimiento
Hacia una pedagogia del conocimientoHacia una pedagogia del conocimiento
Hacia una pedagogia del conocimiento1052381249
 
Modulo de aprendizaje por tutorias
Modulo de aprendizaje por tutoriasModulo de aprendizaje por tutorias
Modulo de aprendizaje por tutorias03Sonny
 
Por qué volver a los clásicos . prof. maria eugenia guacheta
Por qué volver a los clásicos . prof.  maria eugenia guachetaPor qué volver a los clásicos . prof.  maria eugenia guacheta
Por qué volver a los clásicos . prof. maria eugenia guachetacamiblancoa
 
Algunas teorias pedagogicas
Algunas teorias pedagogicasAlgunas teorias pedagogicas
Algunas teorias pedagogicaskaraul
 
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparente
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparenteLabor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparente
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparenteAlfredo Ruíz
 
Textos Arbitrados
Textos ArbitradosTextos Arbitrados
Textos Arbitradosalechinita
 
Ensayo 1de filosofía
Ensayo 1de filosofía Ensayo 1de filosofía
Ensayo 1de filosofía samara cortez
 
Ensayo argumentativo sobre paradigma
Ensayo argumentativo sobre paradigmaEnsayo argumentativo sobre paradigma
Ensayo argumentativo sobre paradigmaEstefania Ortega
 
Producto 3 vidal_delaluzoscar
Producto 3 vidal_delaluzoscarProducto 3 vidal_delaluzoscar
Producto 3 vidal_delaluzoscarOscar Vidal
 
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....ricardow111
 

Similar a Dialnet-HaciaUnaRelacionArmonicaEntreLoTeoricopractico-5340148.pdf (20)

El conocimiento zemelman
El conocimiento zemelmanEl conocimiento zemelman
El conocimiento zemelman
 
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabria
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabriaRel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabria
Rel. pedagogia y formacion por barahona, blanco, mellizo, hernandez, sanabria
 
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...
REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y FORMACIÓN: Palimpsesto de muchos con...
 
Proyecto filosofia
Proyecto filosofiaProyecto filosofia
Proyecto filosofia
 
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12
La teoria de la argumentacion como una alternativa razonable a la no violencia12
 
Trabajo final filosofia
Trabajo final   filosofiaTrabajo final   filosofia
Trabajo final filosofia
 
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-729843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7
29843561 florez-ochoa-rafael-hacia-una-pedagogia-del-conocimiento-cap-7
 
Hacia una pedagogia del conocimiento
Hacia una pedagogia del conocimientoHacia una pedagogia del conocimiento
Hacia una pedagogia del conocimiento
 
Modulo de aprendizaje por tutorias
Modulo de aprendizaje por tutoriasModulo de aprendizaje por tutorias
Modulo de aprendizaje por tutorias
 
Por qué volver a los clásicos . prof. maria eugenia guacheta
Por qué volver a los clásicos . prof.  maria eugenia guachetaPor qué volver a los clásicos . prof.  maria eugenia guacheta
Por qué volver a los clásicos . prof. maria eugenia guacheta
 
Epistemología
Epistemología Epistemología
Epistemología
 
Algunas teorias pedagogicas
Algunas teorias pedagogicasAlgunas teorias pedagogicas
Algunas teorias pedagogicas
 
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparente
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparenteLabor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparente
Labor docente: Posibilitar la crítica del axioma aparente
 
Textos Arbitrados
Textos ArbitradosTextos Arbitrados
Textos Arbitrados
 
Paulo freire
Paulo freirePaulo freire
Paulo freire
 
Ensayo 1de filosofía
Ensayo 1de filosofía Ensayo 1de filosofía
Ensayo 1de filosofía
 
Ensayo argumentativo sobre paradigma
Ensayo argumentativo sobre paradigmaEnsayo argumentativo sobre paradigma
Ensayo argumentativo sobre paradigma
 
El Proceso Grupal
El Proceso GrupalEl Proceso Grupal
El Proceso Grupal
 
Producto 3 vidal_delaluzoscar
Producto 3 vidal_delaluzoscarProducto 3 vidal_delaluzoscar
Producto 3 vidal_delaluzoscar
 
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....
Resumen Primeras palabras, Primera carta y Segunda carta para los profesoses....
 

Último

TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilización
TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilizaciónTEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilización
TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilizaciónVasallo1
 
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docxMINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docxLorenaHualpachoque
 
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la época
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la épocaÉpoca colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la época
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la épocacecifranco1981
 
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanente
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanenteDiapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanente
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanenteinmaculadatorressanc
 
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdf
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdfApunte clase teorica propiedades de la Madera.pdf
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdfGonella
 
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docx
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docxcuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docx
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docxANDREAGRACEDURANSALA
 
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemas
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemasciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemas
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemasFlor Idalia Espinoza Ortega
 
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptxnelsontobontrujillo
 
PLAN LECTOR QUINTO 2023 educación primaria de menores Quinto grado
PLAN LECTOR QUINTO 2023  educación primaria de menores Quinto gradoPLAN LECTOR QUINTO 2023  educación primaria de menores Quinto grado
PLAN LECTOR QUINTO 2023 educación primaria de menores Quinto gradoSantosprez2
 
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA EL OCHENIO.pptx
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA   EL OCHENIO.pptxGOBIERNO DE MANUEL ODRIA   EL OCHENIO.pptx
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA EL OCHENIO.pptxJaimeAlvarado78
 
a propósito del estado su relevancia y definiciones
a propósito del estado su relevancia y definicionesa propósito del estado su relevancia y definiciones
a propósito del estado su relevancia y definicionessubfabian
 
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLAJAVIER SOLIS NOYOLA
 
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...MarcoAntonioAmayaSag
 
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdf
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdfPasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdf
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdfNELLYKATTY
 
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptx
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptxComunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptx
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptxJunkotantik
 
4ª SESION la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...
4ª SESION  la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...4ª SESION  la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...
4ª SESION la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...Reneeavia
 
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.JonathanCovena1
 

Último (20)

TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilización
TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilizaciónTEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilización
TEMA EGIPTO.pdf. Presentación civilización
 
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docxMINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
 
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la época
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la épocaÉpoca colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la época
Época colonial: vestimenta, costumbres y juegos de la época
 
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanente
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanenteDiapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanente
Diapositivas unidad de trabajo 7 sobre Coloración temporal y semipermanente
 
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdf
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdfApunte clase teorica propiedades de la Madera.pdf
Apunte clase teorica propiedades de la Madera.pdf
 
Sesión de clase Motivados por la esperanza.pdf
Sesión de clase Motivados por la esperanza.pdfSesión de clase Motivados por la esperanza.pdf
Sesión de clase Motivados por la esperanza.pdf
 
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docx
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docxcuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docx
cuadernillo_cuentos_de_los_valores_elprofe20 (1).docx
 
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemas
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemasciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemas
ciclos biogeoquimicas y flujo de materia ecosistemas
 
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx
4. MATERIALES QUE SE EMPLEAN EN LAS ESTRUCTURAS.pptx
 
PLAN LECTOR QUINTO 2023 educación primaria de menores Quinto grado
PLAN LECTOR QUINTO 2023  educación primaria de menores Quinto gradoPLAN LECTOR QUINTO 2023  educación primaria de menores Quinto grado
PLAN LECTOR QUINTO 2023 educación primaria de menores Quinto grado
 
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA EL OCHENIO.pptx
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA   EL OCHENIO.pptxGOBIERNO DE MANUEL ODRIA   EL OCHENIO.pptx
GOBIERNO DE MANUEL ODRIA EL OCHENIO.pptx
 
a propósito del estado su relevancia y definiciones
a propósito del estado su relevancia y definicionesa propósito del estado su relevancia y definiciones
a propósito del estado su relevancia y definiciones
 
La historia de la vida estudiantil a 102 años de la fundación de las Normales...
La historia de la vida estudiantil a 102 años de la fundación de las Normales...La historia de la vida estudiantil a 102 años de la fundación de las Normales...
La historia de la vida estudiantil a 102 años de la fundación de las Normales...
 
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
 
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...
ACTIVIDAD 19 Construyo mi identidad personal y familiar para fortalecer los v...
 
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdf
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdfPasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdf
Pasos para enviar una tarea en SIANET - sólo estudiantes.pdf
 
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptx
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptxComunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptx
Comunidades Virtuales de Aprendizaje Caracteristicas.pptx
 
Motivados por la esperanza. Esperanza en Jesús
Motivados por la esperanza. Esperanza en JesúsMotivados por la esperanza. Esperanza en Jesús
Motivados por la esperanza. Esperanza en Jesús
 
4ª SESION la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...
4ª SESION  la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...4ª SESION  la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...
4ª SESION la misión santificadora del Espíritu Santo en la vida de la Iglesi...
 
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.
El liderazgo en la empresa sostenible, introducción, definición y ejemplo.
 

Dialnet-HaciaUnaRelacionArmonicaEntreLoTeoricopractico-5340148.pdf

  • 1. APORTES Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico: a propósito de Paulo Freire Óscar Gerardo Alvarado* RESUMEN En este ensayo, que se abre con un resumen de la novena carta, la cual es el punto central del presen- te abordaje, se intenta una refle- xión en torno a la importancia que reviste la plena dependencia que debe darse entre la teoría y la práctica, a las cuales se refiere Paulo Freire constantemente y pa- ra el cual la relación entre estas de- be ser inevitable e indisoluble. Relación teoría y práctica En la novena carta del texto Cartas a quien pretende enseñar, de Paulo Freire, este nos indica que la rela- ción entre estos dos elementos se asume como una interacción capi- tal, en la que la práctica adquiere un papel relevante, por lo que de- be ser sabida y debe ser objeto de saber. De tal forma, plantea una ciencia de la práctica, lo cual le lle- va a afirmar que la ciencia descu- bre verdades acerca del mundo. Asimismo, apunta que la práctica no cuestionada crea hábito y una realización por inercia que inhibe la capacidad cuestionadora, mientras que una práctica teorizada es una práctica con sentido, no una expre- sión vacía. De tal forma, pensar la práctica es aprender a pensar mejor, señala, y al educador tal actitud le permite conocer mejor a sus alum- nos, y las dificultades de estos, sus vicisitudes, sus éxitos. Por lo anterior, la práctica y la teo- ría, señala, deben entablar una rela- ción de diálogo, no de oposición, pues son complementarias. La teo- ría, sin el saber generado por la práctica, carece de valor. Ello le permite afirmar que la realidad so- cial, el entorno, deba ser ineludible e inalienable. Ante tal panorama, el respeto a la diferencia y el rechazo a la ideología autoritaria, por parte de los maestros, los ayuda a ser me- jores, tanto a ellos como a sus alum- nos. La práctica, por ende, es inva- luable pues, según lo apunta él mis- mo, se aprende a leer leyendo, y se aprende a escribir escribiendo. Pa- * Licenciado en Filología Española. Egresado de la Maestría en Literatura Latinoamericana. Profesor de Comunicación en la Escuela de Es- tudios Generales de la Universidad de Costa Rica y Productor Académico de la UNED. Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 75
  • 2. ra ello, el estímulo se convierte en el mejor aliado. La formación perma- nente, indica Freire, puede alcan- zarse si se logra profundizar en el conocimiento de la práctica. Por lo tanto, este pensar y estudiar la prác- tica nos ayudan a delimitar mejor qué es lo que queremos y hacia a dónde vamos. La labor de todo pensador debe estar marcada por la huella indele- ble que comporta el compromiso consigo mismo y con los demás; debe asumirse este compromiso como el signo evidente que en- marca a los grandes hombres y mujeres cuya contribución a los otros es el mejor aliciente para el establecimiento de las teorías y las prácticas. Uno de estos es precisa- mente Paulo Freire, cuya labor, ex- tensa y valiosa, ha servido como testimonio de una acción conjunta en la cual estos dos elementos se aúnan de tal forma que, de acuer- do con su visión, forman un blo- que común, indivisible, comple- mentario: vital dentro de la labor pedagógica y formadora social. Partiendo de los planteamientos generales que esboza Freire en es- ta carta, debe apuntarse que, efec- tivamente, la práctica y la teoría de ninguna manera son excluyen- tes y si bien en ocasiones se privi- legia una u otra, ello no es de nin- guna manera un elemento exclu- yente para alguna de las dos. El término relación se torna básico e insoslayable, por lo cual se esta- blece un diálogo necesario que de ninguna forma debiera ser despla- zado. El generar el saber de la propia práctica es lo que va a per- mitir alcanzar este diálogo irre- nunciable con la teoría, que ha de emerger como baluarte de una re- lación y una simbiosis que deben ser fortalecidas. Tal convergencia es el paso inmediato a la acción, al movimiento que genera el saber de la práctica en torno a sí misma, como señala Freire. De tal mane- ra, se ha de producir un descubri- miento de esta práctica que, al teo- rizar sobre sí, fundamenta el saber y, por lo tanto, la auto-teoría. Asimismo, la posibilidad de hacer teoría y práctica, y de allí generar una posición crítica, adquiere una connotación relevante, trascen- dente que debe redundar, sin du- da alguna, en una toma de con- ciencia popular. No se puede ser acrítico en la medida en que ello comporta una actitud de sumisión y pasividad en las que algunos grupos poderosos (económica, so- cial y políticamente) implanten e impongan medidas arbitrarias a un pueblo explotado. Así, una na- ción sin academia, una nación ig- norante, emerge como un pueblo sin alma y sin convicciones. Por lo tanto, la lucha y la exigencia de los derechos no es rebeldía, sino nece- sidad. Esto permite afirmar que una práctica sin teoría, y vicever- 76 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
  • 3. sa, constituyen una aplicación va- na, carente de sentido y desprovis- ta de significado, sujeta al arbitrio de aquellos que creen en la inde- pendencia, imposible por lo de- más, de una respecto a la otra. Es- ta emerge como una relación in- soslayable en la que la armonía entre ambas se asuma como un diálogo incuestionable y lógico. Es así como la función de la prác- tica, a partir de una teoría que se funda en la aplicación de ésta, es el desvelo pleno de Freire pues, tal como él mismo lo señala: “La cuestión central que se nos plan- tea a nosotros, educadoras y educa- dores, en el capítulo de nuestra for- mación permanente, es la de cómo hacer para, partiendo del contexto teó- rico y tomando distancia de nuestra práctica, desentrañar de ella su pro- pio saber. La ciencia en la que se funda. En otras palabras, es cómo desde el contexto teórico “tomamos dis- tancia” de nuestra práctica y nos ha- cemos epistemológicamente curio- sos para entonces aprehenderla en su razón de ser” (Freire, 1998: 116). Freire cree, por lo tanto, según sus palabras, que la mejor manera de enseñar es conociendo el entorno de los estudiantes, de su realidad, lo cual enriquece, además, al educa- dor mismo. La precariedad de la si- tuación en que viven muchos niños, no debe pasar inadvertida, pues ella es la realidad misma, el aconte- cer en que se desenvuelven los suje- tos, que puede desplazarse incluso del lado de los docentes. No es la pobreza el mejor camino conductor hacia el cual avancen día con día los hombres y las mujeres víctimas de una sociedad explotadora y clasis- ta. Las grandes obras, señala Freire, incluyen el dar voz y dignidad a las clases populares. Es así como el respeto al otro deviene, por lo tanto, en la mejor manera de llegar, de for- ma óptima y armónica, al educan- do, razón de ser de todo proceso educativo. Abriga, además, la es- peranza de que se respete el dere- cho a la palabra y a la opinión por parte del mismo educando, lo cual reafirma lo señalado más arriba. La diferencia debe ser respetada, aun- que haya que luchar por ella. Tal aserto lleva a afirmar que un edu- cando carente de voz, es como una flor marchita o como una vida sin metas definidas. El derecho a la pa- labra, al uso del lenguaje, en una colectividad en que lo social a veces opaca lo individual o viceversa, de- viene prioridad y respeto inviola- bles. La grandeza del hombre no debe conocer limitaciones banales como la negación al derecho de ex- presarse, sino que debe centrarse en otras luchas, no en aquellos que, in- herentes, deberían pertenecerle por siempre. El desvalorizar tales dife- rencias y el tratar de imponer crite- rios, se convierte en el mayor pre- texto para romper la plena relación entre lo teórico y lo práctico. Tal en- cuentro dicotómico establece, de por sí, la asunción a la reflexión crí- Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 77 APORTES
  • 4. tica en torno al contexto. De acuer- do con esto, la pasividad es la me- jor manera de complacer a los gru- pos privilegiados y de negarse el quehacer crítico que debe caracteri- zar a todo sujeto. Es por ello que la teoría, desprovista de la práctica, emerge como un discurso vacío, dé- bil y engañoso. El saber y la prácti- ca son uno... ¡indivisibles!: “En rigor, nadie le enseña a hablar a nadie. Uno aprende en el mundo, en la propia casa, en la sociedad, en la calle, en el barrio, en la escuela. El ha- bla, el lenguaje propio, es una adqui- sición. Uno aprende el habla social- mente. El habla viene mucho antes que la escritura, así como cierta “es- critura” o el anuncio de ella viene mucho antes de lo que nosotros lla- mamos escritura. Y del mismo modo que para hablar es necesario hablar, para escribir es necesario escribir. Nadie escribe si no escribe, del mis- mo modo que nadie aprende a cami- nar sin caminar” (Freire, 1998: 121). Saber para conocer Lo anterior reafirma la idea de que el aprendizaje es social y de que únicamente se aprende con la práctica y se teoriza a partir de es- ta. El tener como premisa tal su- puesto permite captar una mejor visión de la realidad y del entorno en el que se mueven los sujetos. Conocer y aprehender tal realidad con una visión crítica contribuyen a reforzar una posición más digna del grupo social. Por otra parte, es necesario hacer ex- plícito que los hombres y las muje- res, independientemente de la edad, la religión y la ideología deberían es- tar empapados de esta dignidad, la cual debe también acompañarlos aún desde su más tierna infancia. Sin embargo, es claro que la represión y el acto de invisibilizar a aquellos que luchen o no por sus derechos, ha de ser siempre una puesta en práctica de corruptor y explotado- res. La esperanza debe, por lo tanto, no ser un sueño alrededor del cual giren los nobles anhelos de aquella parte de la humanidad que aún sue- ña con la justicia y que, por suerte, es la mayor parte. El tejer ideales y luchar por ellos debe ser parte de la lucha tesonera de cada día. No bastan los títulos ni la acade- mia para ser felices, sino que son imprescindibles otras cosas, tal co- mo la toma de conciencia, la cual no debe regirse por los estudios, sino por la capacidad de los pue- blos de exigir lo que les pertenece y rechazar lo que atenta contra su idiosincrasia y su dignidad. Los sujetos, efectivamente, deben adquirir conciencia, y esa capaci- dad de cuestionamiento les abre horizontes hacia un mañana más digno para sí y para los suyos. Ello es parte de los planteamientos fundamentales de la teoría de Frei- re, el cual aboga por la necesidad de abrir espacios iguales para todos. 78 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
  • 5. Por otra parte, todo individuo que se pliegue a los cánones estableci- dos, sin saber por qué estos existen, realiza una práctica despojada de teoría, lo cual lo enajena, lo aliena totalmente y lo llevan al hábito en el cual caen los conformistas, aquellos que se roban a sí mismos el derecho de enfrentar lo establecido y teori- zar este. Su actitud, por lo tanto, es vegetativa ¡Qué vida más vacía puede fundarse todo ser humano que caiga en tal conformismo! La valía de los sujetos no debe caer en conformismos, por eso pocos llegan a ser realmente grandes. Es esta práctica la que nos permite, por suerte, conocer nuestro entorno, co- nocernos mejor y conocer a quienes nos rodean. Es darle sentido a la vi- da, y sentir la vida de otra forma. De nuevo concordamos con lo apuntado por Freire cuando agrega lo siguiente: “Como contexto práctico –teórico, la escuela no puede prescindir del co- nocimiento de lo que sucede en el contexto concreto de sus alumnos y de sus familias. ¿Cómo podemos entender las dificultades durante el proceso de alfabetización de los alumnos sin saber lo que sucede en su experiencia en casa, así como en qué medida es o viene siendo escasa la convivencia con palabras escritas en su contexto sociocultural? Una cosa es el niño hijo de intelec- tuales que ve a sus padres ejerci- tando la lectura y la escritura, y otra es el niño de padres que no leen la palabra y que, aún más, no ven más que cinco o seis carteles de propaganda electoral y uno que otro comercial” (Freire, 1998: 123). Ahora bien, el conocer es una la- bor conjunta en la que maestros y educandos deben complementar- se de la mejor manera y ello re- dunda, necesariamente, en seres humanos mejores. La oportuni- dad puede estar a la vuelta de la esquina, por lo que hay que ir en busca de ella y no esperar los aza- res del destino. Es importante, asimismo, no dejar de lado su idea de que la lectura y la escritura dialogan y se interco- nectan, se complementan de for- ma tal que leer un texto es escribir el texto y escribir este es leerlo si- multáneamente. Son la práctica y la teoría puestas en diálogo. Tales son los parámetros vitales en que se fundamenta esta carta novena, la cual plantea esta comunión práctica-teoría como un encuentro irrenunciable y necesario. Tal panorama, por lo tanto, nos abre un espectro de conocimientos que antes posiblemente nos hemos negado o nos han negado. El rom- pimiento de una superficialidad del conocimiento y la apertura ha- cia nuevas visiones de mundo, de abordaje teórico-práctico nos ayu- dan a descubrir la verdad. Tal en- cuentro dialógico permite desem- bocar, afirma, en una formación permanente, para la cual se deben Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 79 APORTES
  • 6. conocer los objetivos, el para qué, el hacia adónde, los pro, etc., sin olvidar el conocimiento que de sí mismos deben tener los involucra- dos. Una lucha no se sostiene a partir de la ignorancia, y mucho menos de la ignorancia de sí mis- mo. El conocerse es abrirse al diá- logo y al cuestionamiento, es rom- per las fronteras de lo que se des- conoce y penetrar en el universo marcado por la búsqueda del sa- ber. Este ensanchar los horizontes permite pensar mejor y practicar mejor, de acuerdo con Freire. El resquebrajamiento de las barre- ras de la explotación radica en ha- llar la diferencia y no ignorarla sim- plemente. El ser uno más es permi- tir que se pisoteen nuestros dere- chos. El teorizar sin práctica es dar un paso al vacío, es vivir de la me- diocridad de una vida pasiva... es sembrar el desencanto y mirar mo- rir, como el ocaso de una tarde de verano, el respeto y la dignidad que toda sociedad y todo ser humano se merecen. El desafío se yergue como un reto para todos, principalmente para aquellos que, sometidos al ar- bitrio del poderoso, se oponen a plegar su voluntad y su fuerza a la tiranía impuesta. Asumir la crítica es vivir, pues, como indica este teó- rico-práctico de la docencia: “Desafiar al pueblo a leer críti- camente el mundo siempre es una práctica incómoda para los que apoyan su poder en la “ino- cencia” de los explotados” (Freire, 1998: 127). La práctica y su correspondiente teorización emergen como la for- ma más eficaz de luchar y coaccio- nar la acción del opresor, apoyada por un sistema elaborado para tal fin. Es el rechazo a la ideología au- toritaria y avasalladora que, más que educar, sujeta y aprisiona. El respeto al otro, y a su práctica, es el objetivo de esta premisa, pues, tal como lo escribe el propio Freire en Pedagogía de la esperanza: “...el educador o educadora, aun cuando a veces tenga que hablarle al pueblo, debe ir transformando ese al en con el pueblo. Y eso impli- ca el respeto al “saber de experien- cia hecho” del que siempre hablo, a partir del cual únicamente es posi- ble superarlo” (Freire, 1996:25). La cita precedente evidencia, por lo tanto, el respeto que el otro, im- puesto como maestro, debe al edu- cando, también poseedor de dis- curso y de su propia verdad. Y es- ta verdad constituye el camino a la esperanza de la que este mismo ha- bla y predica. Es así como el edu- cando debe conocer y re-conocer por sus medios, y con la ayuda del educador, pero jamás con la imposi- ción de este. La existencia y la refle- xión en torno a esta se hacen cada día y se interiorizan. Es esa la ver- dadera fuente del saber y la libertad de asumirse como sujeto cognos- 80 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001
  • 7. cente, es decir, como ente capaz de aprendizaje más que de receptor y repetidor de “conocimientos”. El educando como paradigma del pueblo El saber se halla no solo en el que aprende sino también en el que en- seña y que reconoce su ignorancia como tal y su proceso de aprendiza- je como aquel que no se detiene si- no que es permanente, inacabable, infinito. Enseñar es conocer junto con el educando y asimilarse como un estudiante más. De tal forma, el diálogo permite la plena confluen- cia entre práctica y teoría como un saber total, no parcializado, como una formación integral. Asu vez, en relación con lo plantea- do por Freire, la investigadora nor- teamericana Shoshana Felman exal- ta la relación entre la teoría y la práctica: “El análisis didáctico es pues inves- tido por Lacan no simplemente con el valor práctico, pragmático, sino también con la significancia teórica –la instrucción alegórica- de un pa- radigma: un paradigma, precisa- mente, de la interminabilidad, no so- lo de la enseñanza (del aprendizaje) y del análisis (del ser analizado), si- no también de todo acto de pensa- miento, de teorización: de enseñar, de analizar, de pensar, de teorizar...” (Felmann, s.f.:24). Es claro que la cita precedente enfo- ca, de acuerdo como lo hemos seña- lado, la relación dialógica que debe existir entre ambos elementos, lo cual ha de contribuir, de manera óptima, a alcanzar la confluencia precisa entre la enseñanza y el aprendizaje. Apartir de todo lo anterior, debe in- dicarse que la correspondencia en- tre estos dos elementos no debe es- tablecer contradicciones, pues ello ha de redundar, si así se diera, en una confusión en el educando mis- mo, en el tanto en que este se halla en el proceso inicial de aprendizaje. Esto es fundamental debido a que, como se ha insistido a lo largo del presente texto, para Freire, y en la carta respectiva, el sujeto debe co- nocer su entorno para poder aplicar y establecer diálogo entre teoría y práctica. Es la mejor forma de afir- marse como tal, según se nos indica en la siguiente cita de Gutiérrez: “El conocimiento de la realidad se opera como resultado del proceso dialéctico entre el sujeto y su mundo, entre su afirmación como sujeto y la apertura hacia lo universal. Es este ser histórico, esta conciencia crítica y este ser en relación, lo que constituye el primer rasgo del hombre que bus- camos” (Gutiérrez, 1982:47). El educando, según se desprende de esta cita, es un ser en formación, en un proceso en el cual se va ha- ciendo, construyéndose. Ello per- mite, asimismo, sembrar la esperan- Hacia una relación armónica entre lo teórico-práctico 81 APORTES
  • 8. za en logros adecuados y satisfacto- rios para el futuro. Es el germen de un mañana que pugna por aflorar, grande, optimista y que produce hombres libres y auténticos. Es, por lo tanto, una praxis reflexiva cuyo origen debe estar en el entorno, en la realidad de cada día, con todos sus matices, sus pros y sus contras, presente y palpable. Es la sociedad productora de hombres y mujeres disímiles, pero confluentes, opues- tos pero similares, en la que deben enfrentar la lucha de cada día y en la que se hacen y a la que construyen. En esta insistida relación, el maes- tro debe explotar al máximo la ca- pacidad del educando, de manera que aquel incorpore la teoría a la práctica y viceversa, lo cual permi- tirá un desarrollo intelectivo e inte- gral mayor. Es por ello que las si- guientes palabras no deben erguir- se como un vaticinio doloroso en el que puedan naufragar nuestros educandos, nuestros futuros hom- bres y mujeres y, por ende, nuestras naciones, almas vitales y perennes de la historia de la humanidad: “Un pueblo manso y resignado, res- petuoso y discreto; un pueblo para quien los amos tienen siempre razón, ¿cómo no habría de ser el ideal de una burguesía que solo aspira a re- solver su propia crisis, descargando todo el peso sobre los hombros de las masas oprimidas? Solo un pueblo “gentil, meditativo” podría soportar sin “parloteo” la explotación feroz. Y ese pueblo que el fascismo necesita es el que su escuela se apresura a prepararle.” (Ponce, 1980:176) Finalmente, la aceptación ante el empuje de los poderosos, de los subyugadores, es la ruta directa hacia la venta y la entrega de los ideales, del coraje y la dignidad que deben caracterizar a cada pue- blo. Es ello el planteamiento fun- damental de esta carta, de la cual se desprenden los valores necesa- rios que deben caracterizar a cada ser humano. He allí el eje, la in- tención y el interés de Freire...¡He allí nuestra lectura! BIBLIOGRAFÍA Banks, Olive, 1983, Aspectos sociológicos de la educación. Madrid, Editorial Narcea. Durkheim, Émile, 1976, Educación como so- cialización. Salamanca, España, Edito- rial Sígueme. Felmann, Shoshana. Psicoanálisis y educación: enseñanza terminable e interminable. (copia) Freire, Paulo, 1998, Cartas a quien pretende enseñar. Cuarta edición.México D.F. Editorial Siglo XXI. Freire, Paulo, 1996, Pedagogía de la esperan- za. Segunda edición, México D.F. Edi- torial Siglo XXI. Gutiérrez, Francisco, 1981, Strip tease de la es- cuela. Heredia, Costa Rica, Editorialpec. Gutiérrez, Francisco, 1982, Educación como praxis política. San José, Costa Rica, Ed. Nueva Década. Hameline, Daniel, 1981, La instrucción: Una ac- tividad intencionada, Madrid, Ed. Narcea. Krauskopf, DINA,1990, Adolescencia y edu- cación. Quinta reimpresión a la primera edición, San José, Costa Rica, EUNED. Ponce, Aníbal.1980, Educación y lucha de clases. San José, Costa Rica, Ed. Nueva Década. 82 ESPIGA 3 ENERO-JUNIO, 2001