1. Notas para una reflexión..
Dr Francisco Montes de Oca Garro
2. Recursos humanos
La amplitud y la persistencia de la escasez de
trabajadores de salud han sido causa de
preocupación en todo el mundo.
Las iniciativas destinadas a mejorar los indicadores
de salud se han visto frenadas por la falta de
profesionales para dispensar los servicios necesarios.
Los estudios han indicado que se consiguen avances
en la salud pública cuando los países pueden
sostener al menos 2,5 trabajadores de salud por 1.000
habitantes
3. Desempleo y subempleo en enfermería.
Múltiples Publicaciones sobre la escasez mundial de la enfermería (Dovlo 2005; Kingma 2006).
Muchas enfermeras desempleadas están preparadas para trabajar, pero no están dispuestas o no
pueden hacerlo (Buchan 2000),
Las enfermeras subempleadas trabajan en labores de la enfermería pero no utilizan la totalidad de sus
conocimientos o de su capacidad de trabajo.
Este fenómeno puede ser consecuencia de una limitada demanda de enfermeras, de una decisión de no
trabajar por el salario o las condiciones laborales ofrecidas, o de otro desequilibrio del mercado (Little y
Buchan 2007).
Las enfermeras que están desempleadas o subempleadas pueden ser un importante recurso para:
a) Solucionar la escasez de enfermería
b) Resolver las deficiencias de la calidad de los servicios dispensados al paciente.
Representa para ellas una cuestión de bienestar:
a) Influye en su modo de ganarse de vida,
b) En su capacidad para conservar sus capacidades de enfermería
c) y sus ingresos.
4. ¿por que hay enfermeras desempleadas?
Una causa común de desempleo o de subempleo se
presenta cuando las enfermeras dejan de trabajar de
manera temporal o permanente, o reducen su horario de
trabajo para cumplir responsabilidades familiares.
En algunos países, hay una importante presión social para
que las mujeres dejen de trabajar cuando se casan y
dediquen todo su tiempo a sus deberes familiares.
En particular en las naciones desarrolladas, es frecuente
que las enfermeras se retiren voluntariamente antes de la
edad legal de jubilación.
En algunos países, la edad de jubilación obliga a las
enfermeras a dejar el trabajo antes de que puedan elegir
otra posibilidad.
5. UNA CAUSA IMPORTANTE DE
ABANDONO
En diversos países la investigación ha vinculado unas condiciones
laborales difíciles con tasas más altas de desempleo, dimisiones y
migración internacional (CIE 2006; King y McInerney 2006).
Las enfermeras que trabajan en entornos pobres en recursos luchan
contra la falta de suministros, entre ellos los medicamentos, el agua
potable, equipo de trabajo, guantes, vendas y otros medios
esenciales (Gilson y Erasmus 2005; CIE 2006).
Muchas de las personas entrevistadas comunicaron problemas con
las condiciones de trabajo y problemas similares se documentan en
las publicaciones.
Un entorno laboral insatisfactorio puede surgir aun cuando los
recursos son adecuados, si dominan unas prácticas de gestión
deficientes.
6. Otras causas
importantes
La seguridad en el puesto de trabajo empuja a las enfermeras
fuera de éste.
La violencia en el puesto de trabajo es común en el contexto de
la atención de salud, las enfermeras corren muchas veces el
mayor riesgo por su función primordial en la prestación de los
cuidados. (Buchan y Calman 2004).
En estudios realizados en muchos países se han constatado
elevados niveles de violencia y acoso en el lugar de trabajo.
Las enfermeras también se enfrentan a riesgos para la salud y
dejan el trabajo por las condiciones insalubres o por falta de
protección adecuada contra enfermedades que amenazan la
vida, tales como el VIH/SIDA (Anderson y Isaacs 2007;
Padarath et al. 2003).
7. Repercusiones
Frecuentemente, el desempleo esta asociado a escasez de las
actividades de enfermería, lo que es causa de que las enfermeras
tengan cargas más pesadas de pacientes.
La presión laboral unida a un personal inadecuado está, a su vez,
relacionada con un aumento en la pérdida de personal.
En algunas naciones, el empleo de enfermería no ofrece un salario
adecuado para que las enfermeras satisfagan sus necesidades
económicas, y por ello las enfermeras buscan un empleo secundario
fuera de la enfermería o abandonan por completo sus puestos de
trabajo.
La falta de oportunidades laborales y los bajos salarios figuran entre
los múltiples factores que empujan a las enfermeras a emigrar a
otros países .
8. Repercusiones
En periodos de desempleo obligado, las enfermeras sienten con
frecuencia que han sido injustamente tratadas y pueden perder
el sentido de su adhesión a la profesión.
El desempleo y el subempleo de las enfermeras tienen
importantes consecuencias para la prestación de los servicios de
salud. En los países que sufren escasez de enfermeras, la
pérdida de enfermeras capaces en los recursos humanos agrava
la escasez y compromete el acceso a los cuidados y la calidad de
éstos.
Todos los países deben tratar de conseguir que sus recursos
humanos de enfermería participen en la prestación de los
cuidados de salud en la mayor medida posible, para conseguir
que se satisfagan las necesidades de salud de su población.
9. Deberes familiares
Puede ser que las enfermeras dejen de trabajar de
manera temporal o permanente, o que reduzcan sus
horarios de trabajo, para hacer frente a sus
responsabilidades familiares.
En una encuesta nacional de las enfermeras
especialistas hecha en 2004 en los Estados Unidos, el
38,4% de las enfermeras que estaban capacitadas pero
no trabajaban dijo que “cuidar de la casa y de la
familia” era la razón principal del desempleo (Black et
al. 2008).
10. Mejorar el acopio de datos
Es difícil identificar la magnitud de un problema y
preparar sus soluciones si no se dispone de información
precisa y actualizada.
La mayoría de los países no tienen datos sobre el empleo
de sus recursos humanos de enfermería, y algunos no
mantienen registros actualizados de las enfermeras que
residen en ellos y están preparadas para trabajar.
Incluso, muchos países de renta elevada, como los
Estados Unidos, recogen datos a intervalos amplios; por
ejemplo, el Modelo nacional de muestreo de las
enfermeras especialistas, de los Estados Unidos, se recoge
sólo una vez cada cuatro años (Oficina de Las profesiones
de salud de los Estados Unidos, 2010).
11. Reforma de la
financiación y del sistema
de salud
En algunos países, el desempleo de las enfermeras va
asociado a la reforma del sistema de salud o a medidas de
austeridad financiera (Gilson y Erasmus 2005).
En las evaluaciones de la reforma del sistema de salud
debe incluirse la consideración de las repercusiones que
tienen sobre los recursos humanos (Van Lerberghe et al.
2002), y sobre la salud de la población.
La reestructuración del sistema de salud ha estado
vinculada con un rápido desempleo y subempleo, lo que
puede minar los posibles beneficios de la reforma
(Buchan y Calman 2004).
12. Contratación
Las enfermeras que han dejado la profesión pueden verse atraídas
a volver al trabajo, pero la preparación de estrategias de
contratación eficaces depende de que se tenga a una comprensión
nacional de los motivos por los que las enfermeras no están
empleadas.
Las iniciativas desplegadas en el Reino Unido, en Irlanda y en
Australia han resultado eficaces para atraer a “las que vuelven”, y
los criterios aplicados en estos países para evaluar y abordar ese
problema de desempleo deben estudiarse y seguirse (Buchan y
Calman 2004; Lilly 2002).
Deben preverse cursos de reorientación como elementos
integrantes de las iniciativas encaminadas a traer de nuevo a su
trabajo a las enfermeras desempleadas, tanto para conseguir que
sus capacidades se mantengan actualizadas como para fortalecer
su adhesión a la profesión (Zambia, Ministerio de Sanidad, 2005).
13. Abordar los
desequilibrios regionales
El problema de la distribución geográfica desequilibrada es importante
entre las enfermeras.
La investigación ha demostrado que son muchos los criterios que pueden
ayudar a abordar la escasez en las regiones rurales y otras regiones que
tienen escasez de servicios, y a integrar en los planes de estudios de
enfermería el servicio a las regiones deficientemente atendidas, ofreciendo
incentivos financieros para que se acepten destinos en regiones
deficientemente atendidas, estableciendo requisitos de servicio a cambio de
becas de formación, y mejorando las condiciones laborales en las zonas
rurales (Bourgueil et al. 2006).
En un gran conjunto de investigaciones se ha constatado que los
profesionales de salud con antecedentes rurales ofrecen más
probabilidades de ejercer en las zonas rurales, y por eso puede tener
amplias consecuencias si el acento se pone en contratar a personas de las
zonas rurales para los programas de formación de enfermería (Lehmann et
al. 2008).
14. Aumentar la edad de la
jubilación
En muchos países hay una edad obligatoria de la jubilación, aun cuando
las enfermeras quizá pueden y quieren trabajar después de esa edad.
Alargando la edad de la jubilación se elimina el problema del desempleo
forzoso, aunque éste no es un criterio políticamente sostenible en algunos
países.
Cuando la jubilación es optativa, para la eficaz retención de los posibles
jubilados es preciso que los empleadores se centren en la flexibilidad de los
puestos de trabajo, en las exigencias físicas del puesto, en la moral de
trabajo y en la gestión del estrés (Manion 2009).
Puede ser que algunos puestos hayan de diseñarse de nuevo para retener a
enfermeras de más edad (Zurn et al. 2005).
Algunos países han contratado con éxito a enfermeras retiradas, que
vuelven al trabajo; los motivos de su éxito deben estudiarse de manera
sistemática (Dussault et al. 2009).
15. Salarios
Un salario inadecuado es la causa de que algunas
enfermeras abandonen el trabajo de la enfermería, y
de que otras completen el empleo de enfermería con
un trabajo secundario, lo que es causa de subempleo
en la enfermería.
En numerosos estudios se ha constatado que los
salarios son importantes para la contratación y la
retención de las enfermeras, aun cuando su
incidencia puede ser menor en los países en que los
salarios de enfermería son relativamente elevados
(CIE 2006).
16. Mejorar el lugar de
trabajo
En casi todos los países hay inquietud por el entorno laboral que se
presenta a las enfermeras.
Éstas se ven a sí mismas trabajando en contextos que carecen de los
recursos adecuados; con frecuencia son víctimas de violencia y de
presiones en el lugar de trabajo; se enfrentan a riesgos de salud y a
exposición a infecciones; los niveles de la dotación de personal son
demasiados bajos; y la moral de trabajo es insatisfactoria.
Aun en los países en que los salarios de la enfermería son muy
bajos, las preocupaciones por la calidad del entorno laboral son
más frecuentes que las preocupaciones por los salarios.
La seguridad en el trabajo, los riesgos para la salud y la violencia
hacia las enfermeras influyen mucho en los índices de retención de
éstas, y es de máxima importancia que los empleadores y los
gobiernos aseguren lugares de trabajo seguros para las enfermeras
(Jackson et al. 2002).
17. Conclusión
Numerosos estudios han demostrado que las enfermeras
tienen más probabilidades de ser retenidas cuando la
gestión de sus organizaciones es buena.
Ciertos estudios han demostrado que las enfermeras están
más motivadas y que su retención en los lugares de
trabajo es más fácil cuando en éstos hay un estilo de
dirección participativa.
Las enfermeras atribuyen gran valor a las posibilidades
de desarrollarse profesionalmente .
La gestión de los recursos humanos debe trabajar con
determinación para hacer posible que las enfermeras
alcancen sus metas en la organización y sus propias metas
personales.