2. • Dar a conocer los conceptos básicos acerca de la atención
integral de la mujer embarazada que consulta con diagnostico
relacionado a TORCH, y analizar la efectividad de los estudios
TORCH durante el período neonatal en relación con diversos
criterios diagnósticos.
• Reforzar la educación para la salud a los familiares (medidas
higiénicas, aportes nutritivo necesario adecuado, y vacunaciones,
entre otros).
3. El acrónimo TORCH se utiliza en forma universal para caracterizar
aquel feto o RN que presenta un cuadro clínico compatible con una
infección congénita y permite un enfrentamiento racional, tanto
diagnóstico como terapéutico; en otras palabras, el perfil TORCH (de
las iniciales en inglés de toxoplasmosis, rubéola, citomegalovirus,
herpes simple); algunas veces, el examen se deletrea TORCHES, la 'S'
adicional representa la sífilis. Es un examen diagnóstico del recién
nacido que detecta algunas infecciones.
Es más conocido como síndrome de TORCH, que se considera una
afección perinatal puesto que la infección se da durante el embarazo o
el parto. Las fuentes de infección pueden ser por virus, bacteria o
parásito.
4.
5.
6. Es en general una enfermedad leve, pero que puede complicarse hasta
convertirse en fatal, especialmente en los gatos y en los humanos, causada
por el protozoo Toxoplasma gondii. Esta enfermedad es sin duda la
antropozoonosis que presenta mayor difusión.
Está presente en numerosas especies animales (carnívoros, herbívoros y
aves), siendo el gato el reservorio más importante en el medio doméstico,
produciendo el contagio mediante ooquistes presentes en las heces.
Es muy frecuente en los humanos, aunque la mayoría son benignas y
asintomáticas. En los casos de enfermedad sintomática, las formas clínicas
de la toxoplasmosis son variables, dependiendo del órgano o sistema
afectado. El parasito presenta un tropismo especial por las células del
pulmón, el corazón, los órganos linfoides, el ojo y el sistema nervioso
central, aunque puede afectar a muchos tejidos diferentes.
7. a) Ingestión de productos cárnicos infectados.
b) Consumo de frutas y verduras frescas contaminadas con ooquistes.
c) Por vía transplacentaria.
d) La vía transfusional.
e) Trasplante de órganos.
8. Se admite que la toxoplasmosis se puede transmitir al feto solamente
cuando la madre desarrolla la primo infección durante el embarazo, vale
decir, cuando existe el periodo parasitémico de la enfermedad.
La infección fetal durante los primeros meses del embarazo puede producir
la muerte fetal y el aborto y en los meses más avanzados de la gestación
ocasiona el parto prematuro. Es posible también que ocurra el parto normal
a término de los niños que se infectaron en los últimos periodos del
embarazo. Al aumentar la permeabilidad de la placenta hacia el final del
embarazo, es más probable que ocurra el contagio durante el segundo o
tercer trimestre de la gestación.
Los infantes contagiados durante el tercer trimestre de gestación
generalmente no presentan sintomatología evidente al nacer y la
toxoplasmosis puede pasar desapercibida por muchos años.
9. DIAGNOSTICO
Hasta la aparición de las técnicas de biología molecular, el diagnóstico
etiológico de la toxoplasmosis se ha basado, casi exclusivamente, en la
detección de anticuerpos específicos en suero, reservándose las técnicas
de inoculación al ratón y el cultivo celular para las infecciones graves o
potencialmente peligrosas, como la infección aguda en la embarazada, la
toxoplasmosis cerebral y la infección congénita.
10. Anticuerpos IgG: La presencia de anticuerpos IgG implica que ha habido
contacto entre el paciente y el parásito en algún momento de la vida. Si
existe la evidencia de una seroconversión o de un aumento significativo del
título de IgG entre dos muestras separadas 3-4 semanas, es diagnóstica de
infección reciente.
Anticuerpos IgM: Clásicamente, su detección fue considerada como el
marcador de la fase aguda de la enfermedad.
Anticuerpos IgA: Considerado también como un marcador de fase aguda, se
ha comprobado que, si bien al igual que la IgM puede también permanecer
positivo varios meses después de la primo infección, el porcentaje de IgA
residuales es mucho menores que el de las IgM.
Anticuerpos IgE: Algunos estudios iniciales sugieren que las IgE
antitoxoplasma aparecen pronto, al inicio de la enfermedad, y desaparecen
más rápidamente que los anticuerpos de las clases IgM e IgA.
11.
12. La rubeola es una enfermedad exantemática causada por un virus ARN.
La infección ocurre predominantemente durante la infancia y es de curso
benigno.
El virus de la rubeola de propaga de una persona a otra por medio de
gotitas de las vías respiratorias. Después de la implantación y replicas
primarias en la nasofaringe, se propaga a los ganglios linfáticos.
Las personas con rubeola adquirida pueden propagar el virus siete días
antes de que comience el exantema, hasta casi cinco a siete días después
de ocurrida.
13. Manifestaciones clínicas
Se caracteriza por maculopápulas generalizadas que duran incluso tres días.
Incluso 50% de las infecciones pueden ser subclinicas o no manifestas.
Por lo general el exantema es poco intenso y a veces difícil de detectar en personas
con piel oscura. En niños, el exantema suele ser el primer signo de la enfermedad.
Sin embargo, en niños de mayor edad y en adultos, antes de dicha anomalía, suele
haber un pródromo de uno a cinco días que a veces incluye febrícula, malestar
general y síntomas de las vías respiratorias superiores. El periodo de incubación es
de 12 a 24 días.
La linfadenopatía cervical, en particular en zona occipital y retroauricular, puede
surgir durante la segunda semana después de la exposición.
Se considera a la rubeola una enfermedad benigna, pero en adultos infectados, en
particular mujeres, con frecuencia surgen artralgias y artritis.
16. En el caso de que la persona infectada por el virus de la Rubeola sea una mujer
embarazada, la viremia puede ocasionar la infección de la placenta. Esto solo
ocurre en las infecciones primarias, la transmisión del virus al feto a partir de
reinfecciones en mujeres que han tenido Rubeola o han sido vacunadas, es rara.
La replicación del virus en la placenta puede infectar los órganos del feto. El CRS
tiene un cuadro patológico definido, en el cual hay afectación de prácticamente
todos los órganos, sin embargo no se conoce la patogenia.
La transmisión del virus puede producir aborto espontaneo, muerte fetal, retardo en
el crecimiento fetal, un amplio espectro de malformaciones congénitas, etc. El daño
más severo se produce cuando la infección ocurre antes de finalizado el periodo de
organogénesis (8 semanas) y se traduce en graves malformaciones cardiacas y
oculares. Pasado este periodo, tanto el cerebro como el órgano de Corti continúan
en etapa de desarrollo y son los órganos más frecuentemente afectados en
infecciones hasta las 16 semanas de gestación.
17. Periodo del Embarazo % de transmisión.
0-12 semanas de gestación
13-16 semanas de gestación
17-22 semanas de gestación
23-30 semanas de gestación.
31-36 semanas de gestación
81
54
36
30
60
18.
19. En la primera consulta prenatal, todas las gestantes deben hacer la serología de
rubéola para que sus obstetras tengan conocimiento de su estado inmunológico
contra la enfermedad. Este primer examen sirve para saber quién está inmunizado y
quién es susceptible a la enfermedad.
La serología para rubéola también debe ser solicitada si durante el embarazo la
gestante tiene contacto con alguna persona infectada o desarrolla síntomas típicos
de la rubéola, tales como fiebre, aumento de los ganglios linfáticos y manchas por el
cuerpo. El diagnóstico de la rubéola se realiza si la serología detecta la presencia de
IgM reactivo. Otra forma de hacer el diagnóstico es a través de la comparación de los
valores de IgG en el momento de los síntomas y después de 3 semanas. Aunque el
IgM permanezca negativo, si los valores de IgG suben más de 4 veces en este
intervalo, esto indica que los síntomas fueron provocados por la rubéola.
La presencia de IgG en ausencia de IgM indica que la mujer está protegida, por
vacunación o por infección antigua y por tanto no deben realizarse más
determinaciones.
21. Una simple medida para inmunizar a las mujeres
embarazadas que presentan IgG no reactivo, es decir,
susceptibles a la rubéola en la gestación, sería la vacunación
durante el embarazo. Desafortunadamente, las actuales
vacunas contra rubéola se hacen con virus vivos atenuados,
lo que contraindica su administración durante el embarazo.
Por lo tanto, la mejor forma de prevenir la rubéola en el
embarazo es a través de la vacunación masiva de las niñas
durante la infancia.
22.
23. El citomegalovirus (también llamado CMV) es un tipo de virus del herpes. Hay
muchas clases de virus del herpes. Algunos son enfermedades de
transmisión sexual, otros pueden causar problemas como herpes labiales y
algunos pueden causar infecciones como el CMV. Mucha gente se contagia el
CMV en algún momento de su vida, con mayor frecuencia durante la niñez.
Si está infectada con el CMV durante el embarazo, tiene 1 de 3 probabilidades
(33% de transmitírselo a su bebé). El CMV es el virus más común que se
transmite de madres a bebés durante el embarazo. Alrededor de 1 a 4 de cada
100 mujeres (1 al 4 %) tiene el CMV durante el embarazo. La mayoría de los
bebés nacidos con CMV no tienen problemas de salud causados por el virus.
Pero el CMV puede causar problemas para algunos bebés, incluyendo
microcefalia
25. El CMV es un oportunista por excelencia. La infección por CMV es endémica y sin
variación estacional. Su transmisión se produce por contacto persona a persona a
través de secreciones infectadas (orina, secreciones respiratorias, secreciones
cervicales o vaginales, semen, leche materna, lagrimas, sangre y órganos
trasplantados) y por vía transplasentaría
Las principales formas de adquirir la infección varían según la edad: 1-2% de los
recién nacidos adquiere CMV por la vía transplasentaría, 30-60% adquiere la infección
durante los dos primeros años de vida a través de la lactancia materna y contacto
persona a persona, durante la adolescencia y la vida adulta, el virus se transmite por
contacto sexual o por contacto con niños portadores del virus.
Se distinguen 2 tipos de infecciones que pueden afectar a la mujer, la infección
primaria en aquella en la que no han tenido contacto con el virus y la reactivación, en
aquellas que adquirieron la infección previamente y el virus reaparece en el embarazo.
En ambas circunstancias el virus puede ser transmitido al feto o recién nacido. Sin
embargo la infección primaria durante el embarazo es la principal causa de morbilidad
y secuelas en el feto. La infección fetal a partir de una infección recurrente en el
embarazo es habitualmente asintomática y puede infrecuentemente asociarse a
morbilidad.
27. Los métodos de amplificación molecular (PCR) son ahora de elección para el
diagnóstico de la infección por CMV. En el pasado los test serológicos y los cultivos
virales fueron la piedra angular del diagnóstico.
Los test serológicos miden la presencia de anticuerpos (AC) anti CMV IgM e IgG.
La técnica de ELISA es la más comúnmente utilizada. Otros test utilizados son
inmunofluorescencia, hemaglutinación indirecta y aglutinación en látex.
La IgM específica de CMV se detecta típicamente en las primeras dos semanas
después del desarrollo de los síntomas y puede persistir hasta 4 a 6 meses después
Los AC IgG específicos de CMV a menudo no son detectables hasta 2 o 3 semanas
después de la aparición de la clínica y persisten toda la vida.
La presencia de AC IgM para CMV puede indicar:1) infección reciente, 2) reactivación
de una infección adquirida en el pasado o 3) falso positivo. Por tanto la presencia de
AC IgM CMV por sí sola no es diagnóstica de infección primaria por CMV.
El hallazgo de AC IgG CMV positivo indica infección pasada en algún momento
durante la vida de ese individuo no pudiendo determinar el momento
28.
29. El término TORCH dota al médico de las herramientas para hacer un
enfrentamiento racional, tanto diagnóstico como terapéutico, y establecer un
plan de acción para minimizar los daños producidos por estas infecciones,
por este motivo como futuros médicos, debemos guiar a las mujeres
embarazadas a realizarse este análisis serológico. También a no olvidar
fomentar la prevención de las patologías que corresponden al grupo de
TORCH por medio de diversos métodos, incluyendo la vacunación con SPR
(Sarampión, Parotiditis y Rubeola ), medidas de prevención como la cocción
adecuada de las carnes, el cuidado higiénico de las aéreas donde habiten
felinos, y el uso de protección durante las relaciones sexuales entre
personas de riesgo.