Lesiones torácicas Traumáticas: ESOFAGO
1. ANATOMÍA DEL ESÓFAGO
El esófago es un órgano tubular, de dirección longitudinal, que se extiende desde la faringe hasta el estómago, por lo que es el único órgano digestivo situado en la cavidad torácica. Comienza y termina en dos estructuras esfinterianas, el esfínter esofágico superior y el esfínter esofágico inferior, que lo independizan de la faringe y del estómago
1.1 División Topográfica:
Desde el punto de vista topográfico pueden distinguirse en él cuatro porciones
1. una porción superior o cervical, que se extiende desde el cartílago cricoides hasta un plano horizontal formado por la horquilla esternal,
2. una porción media o torácica, que desde este mismo plano se prolonga hasta el diafragma,
3. una porción diafragmática, que corresponde al anillo esofágico del diafragma,
4. una porción inferior o abdominal, comprendida entre el diafragma y el estómago.
En el tórax se sitúa detrás de la tráquea, en el mediastino posterior, y está en contacto, de arriba abajo, con la aorta, el bronquio principal izquierdo y la aurícula izquierda. La longitud media en el adulto es de unos 22-25cm: 5-6 cm para el esófago cervical, 16-18 cm para la porción torácica y 3 cm para el segmento abdominal.
1.2 Relaciones:
La región cervical del esófago mide alrededor de 5 cm y desciende dorsalmente entre la tráquea y la columna vertebral, del nivel de la sexta vértebra cervical al nivel del espacio entre la primera y la segunda vértebras El esófago cervical se extiende entre la sexta vértebra cervical y el borde superior de la segunda vértebra torácica en una posición paraaxil izquierda. En su cara posterior se relaciona con los músculos y la fascia prevertebral, entre los cuales hay una capa de tejido laxo que forma tabiques sagitales que constituyen las paredes del espacio retrovisceral de Henke o retroesofágico. Por delante se relaciona con la cara membranosa de la tráquea; a los lados se relaciona, en el lado derecho, con la tráquea y el nervio laríngeo recurrente y, a la izquierda, con el paquete neurovascular del cuello, con el cual tiene también relaciones más mediatas en el lado derecho.
El esófago torácico se encuentra entre la segunda y octava vértebras torácicas. En su parte posterior se relaciona con el mediastino posterior, que contiene el conducto torácico, el cayado (o arco) de la aorta y su porción descendente, las venas ácigos y hemiácigos, y ambas cadenas ganglionares simpáticas. Por delante se relaciona con el bronquio principal izquierdo y el seno oblicuo del pericardio, del lado derecho con el cayado de la vena ácigos y por el lado izquierdo con el nervio laríngeo recurrente y el nervio vago izquierdo.
La porción diafragmática es muy importante desde el punto de vista fisiológico puesto que se establece relaciones anatómicas con los dos nervios vagos, la aorta y la pleura
El esófago abdominal está recubierto de peritoneo únicamente en la cara anterior, del lado derecho se relaciona con la trascavida
3. Las lesiones de esófago es un evento relativamente
raro. Esto debido a que la mayor parte de este
órgano se encuentra localizado profundamente
dentro de la caja torácica. Por lo que muy a menudo
pasa inadvertida.
Son complejas debido a varios factores: involucran
tres regiones anatómicas diferentes (Región
cervical, Torácica y abdominal)
4. El esófago es un órgano tubular, de dirección
longitudinal, que se extiende desde la faringe
hasta el estómago, único órgano digestivo
situado en la cavidad torácica. Comienza y
termina en dos estructuras, el esfínter
esofágico superior y el esfínter esofágico
inferior, que lo independizan de la faringe y del
estómago
5. 1. una porción superior o cervical: Se
extiende desde el cartílago cricoides hasta
un plano horizontal formado por la horquilla
esternal.
2. Porción media o torácica: Desde este
mismo plano se prolonga hasta el diafragma.
3. Porción diafragmática: Corresponde al
anillo esofágico del diafragma.
4. Porción inferior o abdominal: Entre el
diafragma y el estómago.
División Topográfica:
6. • Posterior: se relaciona con los
músculos y la fascia prevertebral.
• Anterior: se relaciona con la cara
membranosa de la tráquea-
• Lateral: se relaciona, en el lado
derecho con la tráquea y el nervio
laríngeo recurrente, izquierda con el
paquete neurovascular del cuello.
Esófago cervical
• Posterior: se relaciona con el
mediastino posterior, con el conducto
torácico, el cayado aortico y su porción
descendente, las venas ácigos y
hemiácigos, y ambas cadenas
ganglionares simpáticas.
• Anterior: se relaciona con el bronquio
principal izquierdo y el seno oblicuo del
pericardio.
• Lateral: derecho con el cayado de la
vena ácigos y por el lado izquierdo con
el nervio laríngeo recurrente y el nervio
vago izquierdo.
Esófago torácico
Establece relaciones anatómicas:
Con los dos nervios vagos, la aorta
y la pleura
Porción diafragmática
Relaciones:
• Anterior: está recubierto de
peritoneo únicamente.
• Lateral: derecho se relaciona con la
trascavidad de los epiplones y el
lóbulo izquierdo del hígado, y su
borde izquierdo se continúa con la
tuberosidad mayor del estómago.
Esófago abdominal
7. Inervación y vascularización
La irrigación arterial del esófago proviene de varias fuentes
• Esófago cervical: Arterias tiroideas superiores y, en menor
medida de las arterias tiroideas inferiores.
• Esófago torácico: Ramas de la arteria traquebronquial y
ramas directas de la aorta.
• Unión gastroesofágica: Ramas de la arteria gástrica
izquierda en las caras anterior y lateral derecha, mientras que
la cara posterior está irrigada por ramas de la arteria
esplénica.
Inervación esofágica proviene de:
• Simpático: Cadena ganglionar torácica.
• Parasimpático: Nervio Vago.
• Inervación Intrínseca: plexo de Auerbach y plexo de
Meissner.
8. Es un evento relativamente raro, pero es la lesión traumática de cuello
que más a menudo pasa inadvertida.
Son complejas ya que involucran tres regiones anatómicas diferentes,
están producidas por diversas causas y conllevan una alta
morbimortalidad. Un manejo adecuado precisa una alta sospecha y una
visión global del trauma para establecer una estrategia diagnóstica y
terapéutica precoz.
Clasificación:
A. Por su localización:
9. B. Según su etiología: C. Por la forma del traumatismo:
d. Según la gravedad de la lesión
Clasificación de la Asociación Americana para Cirugía de Trauma (American Association for the Surgery of Trauma, AAST)
10. Fisiopatología:
Puede ser el resultado de un golpe directo o por un
aumento de la presión intraluminal contra una glotis
cerrada, causando una lesión tipo Magulladura. Tanto
en el trauma contuso como en el penetrante hay una
pérdida de la continuidad del esófago, con salida de
fluidos (saliva, fluidos gástricos y enzimas digestivas).
Esta puede ser el resultado de la gravedad, la
presión negativa intratorácica, o por la presión
positiva generada en la porción baja de la hipofaringe
durante la deglución. Estos mismos factores pueden
facilitar la diseminación de la infección resultante
desde el espacio retrofaríngeo-retroesofágico hacia la
cavidad torácica. El contacto con los fluidos puede
causar mediastinitis y sepsis, la cual es fatal en la
mayoría de los casos no tratados.
12. Las radiografías simples de cuello y tórax son anormales
en 75 a 80% de las perforaciones.
• Radiografías de tórax: se observa neumotórax,. Si
continúa la salida de aire y líquido, junto con el edema y
la inflamación, se puede encontrar ensanchamiento
mediastinal sobre todo del área paratráqueal. También
puede haber derrame con o sin hidroneumotórax si la
perforación se extiende hacia la pleura adyacente, e
incluso desarrollarse sin existir daño a ésta, pasadas 48
horas. Esto ocurre en 75% de las veces del lado
izquierdo, aunque puede ser derecho o bilateral. Cuando
la ruptura es en el segmento abdominal o la unión
esofagogástrica, las anormalidades radiográficas
pueden ser tanto torácicas como abdominales e incluyen
neumomediastino, neumotórax, derrame pleural o fuga
de aire extraluminal en la parte superior del abdomen
Radiología
C. Diagnóstico por imágenes
Esofagograma
Permite realizar el diagnóstico, ver la
localización, el tamaño, hacia dónde drena y si la
lesión está bloqueada o no. Sensibilidad del 60-
80 %. Inicialmente se debe utilizar contraste
hidrosoluble.
Tomografia axial computarizada
Esto sirve para determinar la ubicación de la
lesión, sobre todo en lesiones muy pequeñas.
13. 1. Diagnóstico precoz de la perforación.
2. Perforación transmural contenida en el
cuello o mediastino.
3. Ausencia de enfermedad esofágica
obstructiva benigna o maligna.
4. Mínima sintomatología sin evidencia de
sepsis.
criterios propuestos por Cameron y Cols
En todos los casos se debe realizar una monitorización exhaustiva del paciente, con valoración de
criterios de sepsis y pruebas de imagen seriadas para identificar de forma precoz la necesidad de
intervención quirúrgica. Recientemente, Freeman y cols. han documentado la viabilidad y el éxito del
uso de stents recubiertos autoexpandibles en lesiones yatrogénicas diagnosticadas precozmente.
Sin embargo, aunque el stent puede sellar la perforación y controlar una fuga, se debe garantizar un
desbridamiento adecuado y drenaje de los espacios contaminados.
14. El abordaje quirúrgico puede ser vía incisión tipo
collar o a lo largo del músculo
esternocleidomastoideo, dependiendo de si hay
lesiones vasculares o se requiere visualización a
ambos lados del esófago. Se debe identificar y
proteger el nervio laríngeo recurrente. Cuando es
posible, el esófago puede ser reparado en una o dos
capas, con suturas absorbibles o no absorbibles. Se
sugiere utilizar una “ala” muscular (esternohioideo,
esternotiroideo o esternocleidomastoideo) para
reforzar la anastomosis, o entre el esófago y la
tráquea en caso de lesión combinada. En caso de
heridas más complejas puede ser necesario hacer
resección de esófago o esofagostomía.
(Esofagostoma cervical lateral)