7. No acertar en los precios. No
contemplar que además de resolver
una necesidad, se necesitan clientes
que estén dispuestos a pagar el precio
que fijemos.
8. Desarrollo de un producto
pobre, que sea decepcionante para el
usuario, de mala calidad.
9. No tener modelo de negocio
claro desde el inicio. Es decir, no
pensar en cómo voy a ganar dinero.
10. Falta de marketing adecuado.
Pensar que el producto se vendería
solo, o definir a la audiencia y los
medios de difusión equivocados.
11. Ignorar a los clientes. Estar tan
enamorados de la idea que no
hacemos caso de lo que nos dicen los
clientes sobre ella.
12. No lanzar el producto en el
momento adecuado. Lanzarlo
demasiado pronto o demasiado tarde.