En general, se reconoce que la formación universitaria brinda elementos valiosos sobre los contenidos disciplinares, el “qué” enseñar, pero al mismo tiempo aparece deficitaria en lo que respecta al aprendizaje del oficio. Así, cuando muchos graduados universitarios se enfrentan a las tareas de docente en el nivel superior, se encuentran con aspectos del desempeño que no habían advertido. Buscando propiciar una relación pedagógica doblemente articulada, se pensó y propuso un espacio de ayudantía para la Escuela Normal Superior Nº 4, con la idea de aprender el “cómo” enseñar en el nivel terciario. Esta doble articulación se construye, por un lado, mediante la relación pedagógica del profesor a cargo de la materia que transmite su experticia al ayudante (futuro docente novel del nivel terciario); y al mismo tiempo, entre el ayudante, con experiencia en espacios educativos, y el estudiante del profesorado (futuro docente novel de nivel primario).

1. II Congreso Internacional
sobre profesorado
principiante e inserción
profesional a la docencia
El acompañamiento a los docentes noveles:
prácticas y concepciones
Buenos Aires, del 24 al 26 de febrero de 2010

2. II Congreso Internacional sobre profesorado principiante e inserción profesional a la docencia
Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 2
Eje temático: Las pedagogías de la formación y el acompañamiento a los noveles.
Implicancias en la formación inicial.
Reporte de experiencia
LA AYUDANTIA EN EL PROFESORADO DE NIVEL INICIAL Y PRIMARIO,
COMO ESPACIO DE ARTICULACIÓN
DE UNA DOBLE RELACIÓN PEDAGÓGICA
Friedt, Rodolfo A
DNI: 32111354
rodoagu@hotmail.com
Ramos G., Josefina
DNI: 18847942
josefinaramosg@gmail.com
Sablich, Juan E.
DNI: 31781623
juansablich@hotmail.com
Facultad de Filosofía y Letras (UBA)
Palabras clave: Ayudantía – relación pedagógica – oficio – docente novel.
Resumen
En general, se reconoce que la formación universitaria brinda elementos valiosos
sobre los contenidos disciplinares, el “qué” enseñar, pero al mismo tiempo aparece
deficitaria en lo que respecta al aprendizaje del oficio. Así, cuando muchos graduados
universitarios se enfrentan a las tareas de docente en el nivel superior, se encuentran con
aspectos del desempeño que no habían advertido.
Buscando propiciar una relación pedagógica doblemente articulada, se pensó y
propuso un espacio de ayudantía para la Escuela Normal Superior Nº 4, con la idea de
aprender el “cómo” enseñar en el nivel terciario.
Esta doble articulación se construye, por un lado, mediante la relación pedagógica
del profesor a cargo de la materia que transmite su experticia al ayudante (futuro
docente novel del nivel terciario); y al mismo tiempo, entre el ayudante, con experiencia
en espacios educativos, y el estudiante del profesorado (futuro docente novel de nivel
primario).

3. II Congreso Internacional sobre profesorado principiante e inserción profesional a la docencia
Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 3
La primera relación pedagógica se sostiene mediante un trabajo colaborativo entre
profesor y ayudante, compartiendo las múltiples tareas, destrezas y recursos que supone
el oficio de enseñar en el nivel terciario.
La segunda relación pedagógica se construye mediante el acompañamiento y
apoyo del ayudante, a través de su experticia en espacios educativos y su formación
como Licenciado en Ciencias de la Educación, al estudiante del profesorado.
Se aspira a evitar, con ambas relaciones, los ingresos traumáticos al campo
profesional al que deben exponerse la mayoría de los docentes noveles, a través de la
guía y ayuda generadas en el espacio de ayudantía.

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Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 4
LA AYUDANTÍA EN EL PROFESORADO DE NIVEL INICIAL Y PRIMARIO,
COMO ESPACIO DE ARTICULACIÓN
DE UNA DOBLE RELACIÓN PEDAGÓGICA
Analizar y hacer propuestas alrededor de la formación de docentes nóveles forma
parte de un proceso complejo. Por un lado, surgen todas las cuestiones referidas al grado
de responsabilidad que asumen los docentes nóveles una vez que deben entrar
formalmente al sistema educativo. Por otro, en este proceso de asumir dicha
responsabilidad surgen todas las inseguridades y sensaciones de desamparo, desilusión
y desconcierto frente al gran proyecto que deberían protagonizar los docentes como
agentes socializadores, es decir, hacerse cargo del oficio de enseñar.
En este contexto, presentaremos una propuesta que busca ayudar a estructurar,
construir y configurar este oficio docente. Intentaremos reflexionar acerca del
experimentar y poner a prueba el “ejercicio docente” a partir de un nuevo espacio: la
Ayudantía en el Profesorado de Nivel Inicial y Primario para los futuros docentes nóveles
del nivel superior no universitario. Este espacio está pensado para los estudiantes
avanzados de carreras que habilitan a enseñar en el nivel superior no universitario,
especialmente en la formación de docentes, siendo un primer espacio de articulación
entre su formación inicial (la cual ya está finalizando) y su inserción al trabajo docente
(cercana en el tiempo). De hecho, los autores de esta propuesta nos encontramos en
esta situación, a partir de lo cual buscamos superar la posición del docente como simple
receptor de políticas, reubicándolo como actor fundamental en este proceso de reformas
e innovación.
Una genealogía de la formación docente inicial nos podría advertir acerca de una
evolución histórica signada por distintos enfoques y paradigmas que la regularon. Es
decir que la manera de aprender a ser docente tiene una historicidad con continuidades y
discontinuidades producto de los contextos políticos y sus demandas, que confluye con la
propia experiencia de aprender de cada docente cuando fue alumno y atravesó por las
instituciones escolares, es decir, su biografía escolar (Alliaud; 2004). Esta relación
dialéctica entre escenario exterior e interior fue construyendo lo que Quiroga (1994)
denomina matriz de aprendizaje que involucra operaciones más amplias que conocer,
pues permite al sujeto organizar y significar las propias experiencias, emociones,
sensaciones y pensamientos. Es la forma particular en la que cada uno de nosotros se
vincula con el conocimiento y aprende.

5. II Congreso Internacional sobre profesorado principiante e inserción profesional a la docencia
Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 5
Las nuevas tendencias en la formación docente han propuesto espacios y formas
de aprender que han condicionado el acercamiento del docente a su oficio y la
construcción del mismo, así como su matriz de aprendizaje. Actualmente la carrera
docente está organizada por una propuesta curricular que tiene a la práctica como eje
vertebrador, lo cual es un gran avance respecto de los modelos deductivos previos. Sin
embargo, aún permanecen en general desatendidos los espacios de reflexión sobre esas
prácticas que constituyen el oficio docente. En este sentido, muchos teóricos coinciden
acerca del predominio de una interpretación de la docencia como profesión que se logra
realizar o conocer por la simple repetición u observación de situaciones de enseñanza. Lo
que en ocasiones es reforzado por un desconocimiento por parte de los propios
formadores de docentes para generar estrategias concretas de análisis y reflexión de la
práctica.
Bajo esta coyuntura, los espacios de formación cobran características donde se
dificulta el acercamiento a la docencia como oficio. En este sentido, la Ayudantía en el
Profesorado de Nivel Inicial y Primario, propone la apertura de un dispositivo, entendido
como un acuerdo de personas, tiempos, recursos, objetivos que crea las condiciones
para la producción de transformaciones en los sujetos y en el ejercicio de su profesión
(Souto, M.; 1999). La experiencia en este dispositivo aspira a generar en el novel
docente un encuentro con su oficio que le posibilite abrirse interrogantes como “¿Sé ser
docente porque observo, repito, etc. o porque enseño? ¿Cómo enseño, qué es enseñar
para mí?”. Es así como el espacio de Ayudantía se plantea como instancia de formación
en tanto espacio de reflexión de la práctica para construir experiencia (Ferry, 1997). El
contacto con la realidad es condición necesaria pero no suficiente para que la formación
se dé. Formarse es transformarse (en las prácticas y representaciones) a través del
análisis de dicha realidad vivida para comprenderla (Ferry, 1997).
En este sentido, es necesario proporcionar a los ayudantes dispositivos que les
permitan el trabajo sobre sí mismo a través de distintas estrategias, como un diario de
itinerancia, a partir del cual puedan objetivar lo vivido (las dificultades, ansiedades,
satisfacciones, estrategias, vínculos generados, etc.) para analizarlo y comprenderlo junto
con el profesor. Otras estrategias complementarias podrán ser los espacios de tutorías
entre el Profesor y el Ayudante donde éste pueda intercambiar con el docente
inquietudes, dudas y así enriquecerse de la experticia del profesor. También se deben
dar estrategias como la microclase en la cual el Ayudante asuma frente a los estudiantes
el lugar del docente o coordinador de la actividad que se proponga en el espacio
curricular al que esté suscrito. Estrategias todas que serán definidas, en última instancia,
por cada pareja Profesor-Ayudante.

6. II Congreso Internacional sobre profesorado principiante e inserción profesional a la docencia
Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 6
Definimos a la Ayudantía como espacio de articulación de una doble relación
pedagógica. Esta articulación se construye, por un lado, mediante la relación pedagógica
del profesor a cargo de la materia que transmite su experticia al ayudante (futuro docente
novel del nivel terciario); y al mismo tiempo, entre el ayudante, con experiencia en
espacios educativos, y el estudiante del profesorado (futuro docente novel de nivel
primario). Esta doble articulación de la relación pedagógica tiene como bisagra central al
rol de Ayudante.
La primera relación pedagógica se sostiene mediante un trabajo colaborativo entre
profesor y ayudante, compartiendo las múltiples tareas, destrezas y recursos que supone
el oficio de enseñar en el nivel terciario. En este sentido, la relación maestro–discípulo
será uno de los elementos de encuadre bajo el que se desarrollará este dispositivo. Por
ello, se propone el desarrollo de la Ayudantía en los espacios curriculares donde sea
requerido por el profesor, pues el vínculo que se genera entre maestro y discípulo debe
partir del interés del profesor por brindar su experticia y el compromiso del discípulo de
asumir las tareas asignadas. Esta compleja relación maestro–discípulo es el marco que
permite al ayudante vincularse e indagar en la génesis de la propia matriz de aprendizaje
para poder criticarla, reeditarla y transformarla. Esto permite objetivar la experiencia
surgida de la práctica, “separarla” para hacerla materia de análisis, con la intencionalidad
de producir transformaciones, nuevas relaciones interpersonales, conocimiento,
pensamientos, reflexiones en los Ayudantes.
La segunda relación se construye mediante el acompañamiento y apoyo del
ayudante, a través de su experticia en espacios educativos y su formación como
Licenciado en Ciencias de la Educación, al estudiante del profesorado.
Para alcanzar el objetivo final de esta doble articulación hay que tener presente
este aspecto psicoafectivo que implica el ser docente novel una vez que cualquier
graduado ingresa a la carrera docente. En cualquier caso de docentes nóveles en
situación de trabajo, se da una sensación de angustia, de desconcierto, de incompetencia
inicial que es casi inevitable (y que es común a cualquier campo ocupacional) y
“reconocemos que los docentes tendrían más chance de operar sobre situaciones
complejas y enseñar, es decir ejercer su oficio, si “gente con oficio” o preocupada por el
oficio, los prepara para eso” (Alliaud y Antelo 2008, p. 96).

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Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 7
(Nóvel)
Ayudantía
(Experto)
(Nóvel)
Estudiante
(Nóvel)
(Experto)
Profesor
(Experto)
Relación Maestro-Discípulo
Esquema 1: Doble articulación de la relación pedagógica
En este proceso de formación, autorreflexión, y hasta metacognición del futuro
docente de nivel superior, en su lugar “bisagra” de Ayudantía en la relación pedagógica
entre el Profesor y el Estudiante del profesorado, es donde en verdad se propone que el
Ayudante construya su oficio docente, su ser docente. Desde la experiencia, desde el día
a día, a partir del contacto con la práctica cotidiana se vislumbrará la dimensión oculta del
oficio de enseñar a la que hace mención Meirieu (2006). Dimensión oculta que se dará a
conocer a través de lo que el autor denomina ese “algo” que son los “secretos de
fabricación” (Alliaud, A. y Antelo, E.; 2008) en cuanto a “ese todo” que implica el oficio
docente y que no se reduce a una lista de competencias sino que van tomando forma en
esa práctica pareciendo “ser productos de una rara fórmula (de métodos, técnicas, modos
de actuar) que en principio permite distinguir lo que funciona bien de lo que no” (Alliaud y
Antelo 2008, p. 91).
Es en este sentido se propone este espacio de Ayudantía como dispositivo,
artificio que despliegue su carácter revelador en función de desplegar significados
diversos, su carácter analizador en función de tener la potencialidad de poner en análisis
aquello que en su interior se revela, y provocador en cuanto provoque transformaciones,
nuevas relaciones interpersonales, conocimientos, pensamientos, reflexiones y

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Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 8
finalmente conciencia de la función pedagógica1
(Souto; M. 1999). Todo esto último en
función de hacer de esa relación maestro–discípulo un potente y rico acercamiento al
campo profesional de la docencia, al campo de formación en el nivel terciario no
universitario y a la construcción del oficio docente.
Este proyecto supone un tipo particular de articulación entre Universidad e
Instituto Terciario, que intenta poner en cuestión la histórica ausencia de una vinculación
significativa entre los circuitos universitario y terciario.
Aunque aquí el lado de “la Universidad” no está representado institucionalmente
(como organización) sino sólo por un grupo de estudiantes-próximos graduados, de
todas maneras, la institución Universidad (como tradiciones de prácticas y
representaciones) se hace presente a través de dicho grupo. De esta manera, el
dispositivo de Ayudantía propuesto vincula a estos circuitos históricamente separados,
posibilitando un inicio de transferencia social (Llomovatte y otros, 2008) entre los dos
espacios, entendida como una relación dialéctica que permite la construcción conjunta de
conocimiento y aprendizajes, en donde se habilita la posibilidad de mejora de las
prácticas en ambas instituciones.
Los institutos de formación docente de nivel terciario han cristalizado en su
funcionamiento una tradición ligada a la secundarización, una de cuyas manifestaciones
es la lógica de trabajo individual de cada docente. En este sentido, uno de los cambios
más fuertes que propone la Ayudantía en estas lógicas de trabajo instaladas en este
nivel, es el trabajo en equipo: Profesor–Ayudante. El trabajo de enseñar, en tanto “gran
tarea” (Alliaud y Antelo, 2005), sólo puede llevarse a cabo de manera significativa y
efectiva cuando se trabaja en grupo, con otros. Es esa intersubjetividad lo que produce
mejores resultados y procesos formativos más interesantes.
De este modo, un profundo sentido político atraviesa a este pequeño proyecto, en
tanto se inscribe en un marco más general de búsqueda de propuestas para la mejora de
las instituciones formadoras y su compromiso con el desarrollo de la educación y la
sociedad.
1
“Conciencia de la función pedagógica” en el sentido de que el dispositivo debe mantener una
vigilancia sobre sí mismo en cuanto a tener la capacidad de reencauzar metas, objetivos, etc. en
relación a las distorsiones que a su interior se generan.

9. II Congreso Internacional sobre profesorado principiante e inserción profesional a la docencia
Friedt, Rodolfo A - Ramos G., Josefina - Sablich, Juan E. 9
Bibliografía
• Alliaud, A. (2004) “La escuela y los docentes: ¿Eterno retorno o permanencia
constante? Apuntes para abordar una particular relación desde una perspectiva
biográfica”, en Cuaderno de Pedagogía Rosario. Año 7, Nº 12. El Zorzal. Rosario.
• Alliaud, A. y Antelo, E. (2005) “Grandezas y miserias de la tarea de enseñar”, en
Revista Linhas, volumen 6, Nº1, 2005. Universidad Do Estado Sta. Catarina.
Florianópolis, Brasil.
• Allliaud, A. y Antelo, E. (2009) “Iniciarse en la docencia. Los gajes del oficio de
enseñar”, en Profesorado. Revista de currículum y formación del profesorado. Vol.
13, Nº1.
• Ferry, G. (1997): Pedagogía de la formación. Volumen de la colección “Formación
de formadores”. Novedades educativas. Buenos Aires.
• Llomovatte, S.; Pereyra, K. y Kantarovich, G. (2008): “Escribir sobre el vínculo
Universidad-sociedad. Llamar a las cosas por su nombre es complejo”, en Revista
del IICE-UBA, año XVI, Nº26, diciembre 2008.
• Meirieu, P. (2006): Carta a un joven profesor. Porqué enseñar hoy. Grao.
Barcelona, España.
• Quiroga, A. P. (1994): Matrices de aprendizaje: constitución del sujeto en el
proceso de conocimiento. Ediciones Cinco. Buenos Aires.
• Souto, M. y otros (1999). “El dispositivo en el Campo pedagógico” en Grupos y
dispositivos de formación. Colección Formador de Formadores. Serie: Los
Documentos. Facultad de Filosofía y Letras-UBA. Novedades Educativas. Buenos
Aires.