'Snatch: Cerdos y Diamantes' Por Simón Cano Le Tiec
Simón Cano Le Tiec vuelve a publicar en Torremolinos Información
1. Torremolinos información
DEL 20 AL 26 DE AGOSTO DE 2011 Cultura 11
Tribunas
—TORREMOLINOS ONÍRICO—
El destello
del esplendor
LA MENTE no siempre es objeto de si misma; en algunas ocasiones, nuestros recuerdos ejercen un gran peso
sobre ella. Simón Cano Le Tiec intenta plasmar sobre Torremolinos lo que el subconsciente es capaz de generar,
pues en esta ciudad, abundan los recuerdos y las muestras del pasado que permiten formar esas ideas.
INFORMACIÓN
SIMÓN CANO
LE TIEC
TORREMOLINOS
N o deberíamos esperar a
más; la noche cae en jú-
bilo sobre nuestras in-
cansables miradas, y la mente, tras
abandonar esas tímidas preocu-
paciones, tiende a convertirse en
objeto de nuestra ilusión, que co-
mienza a perfilar según la leve bri-
sa veraniega se apresura a entrar
en nuestra habitación.
Es entonces, cuando creamos
la estructura onírica por defini-
ción: una casa. Una casa, alejada
de un inexistente mundo habita-
do por simples voces que escu-
chamos en la lejanía. Éstas, nos
obligan a forzar nuestra entrada
a esa peculiar edificación, en la
que parece reposar una tranqui-
lidad exasperante.
Cuando entramos, nos perca-
tamos de la ilógica de la cuestión:
el interior no puede pertenecer
al exterior. Un gran salón, donde
observamos un piano de cola blan-
co esperando a ser afinado, por
el mero hecho de encontrarse
sólo en mitad de la cena, donde
divisamos cerca de 60 comensa-
les. Nos acercamos lo suficiente
como para notar la existencia de “Ava Gardner comenzaban a pisar un suelo donde los cristales de los flashes reflejaban más que cualquier otro elemento: un sueño roto”.
un lujo bastante poco definido,
donde abundaban las parejas por “Nos levantamos, y nos de tal acto: No prestes atención a mienza a congelarse mientras las chazo de elementos que nosotros
excelencia. mis compañeros; la mayoría son puertas del edifico son abiertas mismos creamos, quedando a
Desplazados en una esquina encaminamos hacia el un poco tímidos. Todos buscan por un botones que no había vis- merced de un mundo real don-
del salón principal, situado cerca numeroso conglomerado la primicia del día, tal vez de la se- to en ningún momento. Aquel de sólo puede existir aquello que
del recibidor, observamos la pre- de fotógrafos, mana, y es la de ver a Ava Gardner periodista abandonó rápida- tenga lógica.
sencia de varios fotógrafos, casi abriéndonos paso entre entrando por esa puerta que has mente su copa de vino, y la dejó Nos levantamos, y nos enca-
todos, apoyados sobre las lisas pa- atravesado un par de veces. Pue- a nuestra merced, mientras saca- minamos hacia el numeroso con-
redes que se cernían sobre ellos. ellos, y vemos como Ava de que estén pendientes de que ba el bolígrafo y el bloc de notas. glomerado de fotógrafos, abrién-
Para volver a comprobar aquel Gardner es presa de los una persona como tú no les es- Los demás fotográfos se apre- donos paso entre ellos, y vemos
fenómeno, abandonamos ins- destellos que reflejaban tropee la instantánea que tanto suraron a enfocar sus objetivos. como Ava Gardner es presa de los
tantáneamente el edificio, y ob- con belleza tanta ansían tomar. No sé si más o me- Curioso era el hecho de ver a la destellos que reflejaban con be-
servamos que la casa había aban- nos sabrás lo que ocurre, pero su- mayoría con flashes de bombilla. lleza tanta exuberancia. El mo-
donado su forma, y había dado a exuberancia” pongo que aquí no se hablará de Entonces, nos levantamos y nos mento se asimila a una ansiada
luz otro ilógico momento oníri- otra cosa. De todas maneras, no damos cuenta de que incluso el cercanía, en la que ella nos diri-
co. vuelvas a acercarte a la puerta, mu- mundo más ilógico, puede tener ge una mirada entreabierta, y no-
Cuando volvemos a entrar, los chos de ellos son compañeros de sus distinciones. No por el simple sotros le devolvemos otra, la del
periodistas centran sus miradas trabajo, y tengo que trabajar con hecho de que personalidades que retornar al mundo donde sólo po-
sobre nosotros, y es entonces, lo que hayan hecho, aunque sea ya desaparecieron se encuentren demos preocuparnos de no caer
cuando uno de ellos, pero que no simples recortes de celuloide. siendo el centro de atención, sino en otro. Y tras nosotros, el fugaz
se hallaba en la esquina, sino en Aquello era casi un reflejo de porque en él, las personas no di- botones se apresura a cerrar las
el bar, se nos acerca y tira de no- un hecho que nos llenaba de in- fieren de los conceptos creados puertas, mientras los pies de Ava
sotros balbuceando explicaciones genuidad y sosiego, estábamos por nosotros mismos, es decir, cre- Gardner comenzaban a pisar un
sin lógica, burdos intentos de cap- molestando, y por ello, nos había amos un mundo inexacto, pero suelo donde los cristales de los
tar nuestra ya alocada atención. llamado la atención. Entonces, igual al que entregamos nuestra flashes reflejaban más que cual-
Nos obliga a tomar asiento junto cuando tenemos las mirada per- vida. Adaptamos Torremolinos a quier otro elemento: un sueño
a él, mientras nos explica la razón dida, sentimos como el tiempo co- un sueño, y obtenemos un re- roto.