2. • La discapacidad es un tema antiguo, que a lo largo de la historia ha estado ligado a la
muerte, el abandono, socorro, asistencia, rehabilitación, ocultamiento, normalización,
etc. Las personas con discapacidad han estado condenadas a asumir un rol marginal,
pobre, asistido, etc.
3. • A finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX se consideraba la discapacidad
como una enfermedad y las personas eran recluidas en hospitales o instituciones de
caridad, donde permanecían segregados e imposibilitados al acceso a cualquier tipo
de educación o eran objetos de entretenimiento, de tipo sensorial, diseñados e
implementados por médicos.
4. • En la década del 60 se produjo un movimiento que generó visualizar la discapacidad
no sólo como un problema propio del individuo “portador”, sino que es un
problema de la sociedad. Este movimiento promueve la inserción del sujeto con
discapacidad en proyectos sociales y educativos.
5. • Desde la escuela especial se orienta hacia un cambio que supere el paradigma del
déficit por el respeto por las diferencias, promoviendo la responsabilidad de la
educación para todos y cada uno de los alumnos, generando espacios educativos de
experiencias para potenciar las capacidades de cada uno.
6. • La intervención desde la Educación Especial en momentos tempranos de la vida del
individuo, con un diagnóstico preciso y oportuno, posibilitará la modificación de las
trayectorias educativas.
• Este modelo intenta superar el modelo tradicional médico.
7. • A su vez, para los profesionales de la educación especial, enseñar y aprender en la
escuela especial hoy, implica varios desafíos.
• Para fortalecer nuestra postura referida a la existencia de un único sistema educativo
para todos, necesitamos focalizar la tarea en función de los niveles educativos de
modo de poder ofrecer trayectorias a nuestros alumnos que permitan facilitar la
articulación entre las diferentes modalidades.
8. • En la actualidad, integración y plena inclusión educativa son dos desafíos importantes
que definen dos políticas diferentes/complementarias pero con puntos en común.
En primer lugar, tienen en común el desafío de garantizar el derecho a la educación
de todos los niños y niñas. El sistema educativo debe garantizar una oferta educativa
que respete todas las variables individuales evitando cualquier tipo de discriminación,
ya sea por raza, nacionalidad, religión, sexo, capacidades intelectuales o discapacidad
de origen físico.
9. • La inclusión se ve como el proceso de identificar y responder a la diversidad de
las necesidades de todos los estudiantes a través de la equidad en la participación
en el aprendizaje, las culturas y las comunidades, reduciendo de este modo, la
exclusión en la educación.
• Se basa en el principio de que cada niño/a tiene características, intereses,
capacidades y necesidades y tiempos de aprendizajes distintos y deben ser los
sistemas y programas educativos los que se pongan en marcha, para dar
respuesta a la amplia diversidad de dichas características y necesidades.
