1. ALIMENTACION VS. CONSUMO
Cambio del significado de la alimentación.
AUTORA: Yasmin Pinto
C.I.16.051.170
GUANARE, DICIEMBRE DE 2016.
2. La historia de la especie humana, se puede explicar con bastante precisión mediante la historia de
la alimentación. Se han producido importantes cambios entre el hombre prehistórico y el hombre
actual, algo evidente simplemente fijando la atención en el cambio del significado de la
alimentación.
El hombre prehistórico se preocupaba sobre todo por la cantidad de alimento, ya que su mayor
interés se basaba en la supervivencia, mientras que el hombre actual dispone de muchos más
recursos, sin apenas esfuerzo, centrando su elección en la calidad, determinada además por las
costumbres, tradiciones, creencias y el saber culinario entre otros.
Pero el hecho de elegir según la calidad, no implica que coma mejor. Esta evolución de la
alimentación a lo largo de la historia, ha estado influenciada por cambios sociales, políticos y
económicos. Los grandes viajes y descubrimientos contribuyeron a la diversificación de la dieta,
pero al mismo tiempo, la abundancia o escasez de alimentos, ha condicionado el desarrollo de los
acontecimientos históricos.
Es interesante analizar el origen del gusto por el sabor dulce, característico del humano, es decir,
el por qué de la preferencia del azúcar entre otros alimentos. Hay determinadas características
biológicas que han participado en la evolución de la especie humana, buscando siempre la
supervivencia.
En los humanos, el olor y el sabor de los alimentos, van unidos a señales metabólicas que siguen
a la ingestión y, consecuentemente, a propiedades nutricionales de los alimentos. Un ejemplo es
la preferencia de los alimentos de origen animal, por el gran valor nutritivo que los caracteriza,
aportando proteínas de alto valor biológico. El apetito específico por el sabor dulce, esto es algo
común en todos los mamíferos, al considerar el azúcar como fuente de energía. Esta característica
está presente en el humano de forma innata.
Hasta el siglo XVIII el azúcar fue un producto escaso, exótico y de lujo, pero a partir del siglo
XIX los usos del azúcar aumentaron y se diversificaron, convirtiéndose en un producto trivial. El
3. azúcar adquirió el papel de condimento universal en la cocina, mejorando el sabor de ciertos
platos, haciendo que éstos fueran más apetitosos y nutritivos. A partir de 1900, el consumo
comenzó a aumentar de forma exagerada hasta nuestros días, en los que es excesivo,
representando un gran aporte calórico de absorción rápida, lo que está provocando, junto con
otros factores, problemas de sobrepeso y obesidad en la población, dada.
Con respecto al gusto alimentario, es además fundamental comentar su formación. Es un gusto
primario adquirido en la infancia, ligado al hogar. Según Grande Covián, a diferencia del resto de
los animales, el hombre está peor preparado para hacer una selección intuitiva de los alimentos,
por lo que una dieta mantenida durante siglos puede no ser correcta, de ahí la importancia de que
la adquisición del gusto primario, influenciado por la cultura, lo social y el hogar se realice de
forma correcta.
Con respecto a los horarios y comidas en familia, también se han producido importantes cambios.
Hace cuarenta o cincuenta años, los horarios de las comidas los marcaba la finalización de las
faenas agrícolas y los horarios dependían, fundamentalmente, del tipo de cultivo. Sin embargo, en
la actualidad, los horarios se acondicionan a las necesidades de cada uno, razón por la cual las
familias suelen almorzar y, cada vez más cenar, por separado, siendo además dichos horarios
totalmente irregulares.
Un hecho relevante, ha sido el aumento del uso de la televisión en las comidas, dada la
desaparición, ya citada, de las comidas en familia. Hace cuarenta años, la televisión sólo se usaba
en el tiempo de sobremesa, sin embargo, ahora es un elemento fundamental a la hora de las
comidas, cuya falta hace parecer que la comida no es completa, provocando además que las
personas coman de forma mecánica, sin prestar atención ni siquiera al plato en ese momento. Este
hecho contribuye a la pérdida de la importancia de la alimentación en la sociedad actual.
4. En conclusión, el hecho de comer está perdiendo su significado social, de forma que cada vez
aumenta más el número de personas que comen “porque hay que comer”, como algo mecánico.
Todo esto es uno de los muchos efectos de la pérdida de autoridad de los padres en la actualidad,
consiguiendo que muchos niños coman cuando, como y lo que quieran, siendo la consecuencia, el
mantenimiento de estos hábitos en la edad adulta y la transmisión de éstos a próximas
generaciones.
Cambios sociales y económicos como la industrialización, la incorporación de la mujer al trabajo,
los horarios y ritmo de trabajo, el incremento de la tasa de escolarización y su prolongación, el
desarrollo de los medios de comunicación y la información transmitida por ellos1,2,o la creencia
basada en que la alimentación no es algo importante a lo que hay que dedicar tiempo, han hecho
que la dieta, tan importante por su papel en la prevención de enfermedades relacionadas con la
alimentación, vaya perdiendo la importancia mantenida hasta hace unos veinte años a favor de la
comida rápida, además del uso cada vez más generalizado de productos congelados y
precocinados, provocando así el deterioro de nuestros hábitos alimentarios.
La comida rápida, así como los productos precocinados, tienen un alto contenido de grasas
saturadas, colesterol, sal, y aditivos para darles un olor y sabor particulares, además de
conservantes. Un menú a base de comida rápida, por ejemplo, uno mediano compuesto por una
hamburguesa, un refresco, patatas fritas y dos bolsitas de kétchup, contiene fácilmente 1000 kcal,
lo que supone el 35-45% de la energía diaria necesaria. Es necesario entender que este tipo de
comida se puede incorporar como parte de una alimentación completa y equilibrada, pero nunca
ser base de la alimentación como está ocurriendo de manera, cada vez, más evidente.
En la parte opuesta están las personas que intentan “cuidar” su alimentación, en ciertos casos
hasta extremos, siendo algunos ejemplos el vegetarianismo, las dietas macrobióticas, el
higienismo, dietas disociadas, etc. Se puede apreciar, que cada vez más personas forman parte de
alguno de los extremos, pero disminuyen las que llevan a cabo una alimentación normal, es decir,
equilibrada y completa. En este aspecto es donde pretende intervenir la educación nutricional,
dada la pérdida de la objetividad y la razón en el tema de la alimentación. Es importante crear en
5. la sociedad la conciencia perdida respecto a la importancia de una correcta alimentación, además
de un criterio objetivo que impida seguir normas sociales motivadas por el físico y las modas,
dejando a un lado la salud.
Bibliografía
Patricia Bolaños Ríos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 9 (2009) 956-972
6. la sociedad la conciencia perdida respecto a la importancia de una correcta alimentación, además
de un criterio objetivo que impida seguir normas sociales motivadas por el físico y las modas,
dejando a un lado la salud.
Bibliografía
Patricia Bolaños Ríos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 9 (2009) 956-972