La filosofía medieval abarca desde la caída del Imperio Romano hasta el descubrimiento de América e incluye tres periodos principales: 1) la patrística, encabezada por san Agustín, buscó conciliar la filosofía con la religión cristiana, 2) la escolástica, con figuras como Alberto Magno y Santo Tomás de Aquino, usó la lógica aristotélica para explicar doctrinas teológicas, y 3) el declive de la escolástica en los siglos XIV y
1. Universidad Juárez
Autónoma de Tabasco
Integrantes:
Alex Córdova Córdova
Julio César Lázaro Olán
Docente de la materia:
Prof. José Ángel Bautista García
Materia:
Filosofía
Fecha:
15 de Septiembre de 2017
3. La filosofía Medieval marca el fin de
la historia del pensamiento antiguo y
la apertura a una nueva forma de
pensamiento.
Con el nacimiento de Cristo y el
advenimiento del cristianismo la
filosofía deberá comenzar a dialogar
con la religión.
Introducción
9. La corriente gnóstica primitiva
• El ciclo patrístico se inicia con una tendencia gnóstica,
De la posición gnóstica fue máximo
representante Valentino, en general, los gnósticos fueron
esencialmente dualistas: preocupados por la idea del mal
y por el problema de su relación con Dios, enfrentaron los
conceptos de divinidad y, materia. Pero en su última
esencia, la gnosis fue un impulso místico: el conocimiento
verdadero, según esta tendencia, sólo se consigue
en Dios. Meta suprema de todo conocimiento, por lo
tanto, será la unión del hombre con su creador.
10. La tendencia apologética
• A esta primera tendencia, propiamente sincretista*,
sigue la posición apologética de muchos Padres de la
Iglesia. Se trataba de defender, con argumentos
racionales, la nueva fe y sus implicaciones dogmáticas.
La figura más notable de este período
fue Tertuliano (c.155-245), cuyo temperamento jurídico le
lleva a afirmar que el cristianismo se impone a la razón
humana como una nueva ley de la vida. Poseedor de un
vasto conocimiento de la filosofía griega, Tertuliano
defendió en sus obras, con argumentos racionales, la
nueva fe. Y creó la terminología básica de la teología
cristiana.
• *Armonizar corrientes de pensamiento o ideas opuestas.
12. Hacia una filosofía de la religión
• Hacia este objetivo tendieron los esfuerzos de dos
Padres de la Iglesia: Clemente de Alejandría, fallecido
en el año 215, y Orígenes, desaparecido en el año 254 y
discípulo del anterior. Las obras de este último son un
esfuerzo heróico para elucidar el contenido de las
Escrituras (Antiguo y Nuevo Testamento) a la luz de la
filosofía griega, y en especial de la metafísica
neoplatónica. Sus obras se relacionan con la casi
totalidad de la ciencia eclesiástica: exégesis y crítica de
las Escrituras.
13. La nueva patrística: Agustín de
Hipona
• La Nueva Patrística, o período final
de este gran ciclo de la primitiva
filosofía cristiana, encuentra en
Agustín de Hipona su máximo
representante. Este ilustre pensador
nació en Tagaste (África) en el año
354 y falleció en el 430, siendo
obispo de Hipona. Había sido
pagano, y se convirtió al cristianismo
después de prolongadas vacilaciones
y de vastos estudios. En su
conversión tuvo parte decisiva San
Ambrosio de Milán.
14. Punto de partida de la filosofía agustiniana es la propia
certidumbre de la experiencia interna, que es la que nos
indica lo que es verdadero y lo que es falso.
Otro de los conceptos básicos del pensamiento
agustiniano es el de que la esencia del hombre radica en la
voluntad. La fe religiosa, según San Agustín, reposa
también en un acto de voluntad.
En las obras de San Agustín, el concepto de libre
albedrío se limita cada vez más, cediendo el paso al de la
predestinación: corresponde a Dios "elegir a los que
quiere". Aquí, su pensamiento abandona el campo
especulativo propio de la filosofía racional y se adentra en
el de la teología.
16. 1. Sus comienzos (siglo IX a inicios del XIII),
2. Su culminación (siglos XIII y XIV), y
3. Su decadencia (siglo XIV -fines- y siglo XV).
La Escolástica
La historia de la Escolástica se puede dividir,
cronológicamente, en tres períodos:
17. Se da el nombre de Escolástica
a aquella filosofía cristiana que
aspira a desarrollar y
fundamentar la doctrina de la
Iglesia como sistema científico.
Debe su nombre a las escuelas
en que fue enseñada. Doctores
scholastici, o escolásticos, se
llamó originalmente a los
maestros de las siete "artes
liberales": gramática, dialéctica y
retórica; aritmética, geometría,
música y astronomía.
La Escolástica
18. Cuyo objetivo principal es descubrir las causas profundas o
esenciales y después practicar a partir de ellas el método científico
por excelencia con la reinterpretación de Aristóteles.
Se va a cultivar un saber principalmente teológico y filosófico por el
que a través de la ciencia de Aristóteles, se intentará explicar la
existencia sobrenatural de Dios. A pesar de que la Escolástica es
principalmente teología, es esencialmente filosofía.
La Escolástica trata problemas
filosóficos que surgen con ocasión de
cuestiones religiosas y teológicas.
La Escolástica
19. Alberto Magno
Mejor que un pensador original, fue un erudito, razón por la cual
recibió el nombre de "Doctor universalis". Pero fue quien más influyó
entre los filósofos occidentales cristianos, en el sentido de inclinar el
pensamiento crítico por las vías del aristotelismo. Y esto, hasta el
punto de que varias de sus obras son comentarios e inclusive
paráfrasis de los tratados del Estagirita.
De aquí que diferencie claramente el conocimiento natural (filosófico)
del conocimiento sobrenatural (teológico). Esta posición básica pasa a
su discípulo Tomás de Aquino.
21. Tomas de Aquino
Fue y sigue siendo, indudablemente, el más
importante e influyente de los filósofos cristianos de la
Edad Media. Su misión consistió, esencialmente, en la
ordenación del concepto del mundo, que toma de
Aristóteles. La razón natural, en este sistema, es
aceptada como fuente última de toda verdad, porque
lo que de ella emana, lo que ella reconoce como
cierto, no sólo tiene validez en filosofía sino en
teología.
22. Tomas de Aquino
Aquino resolvió el problema de la fe y la razón, en
esencia, negando incluso la existencia de un
problema fundamental, siempre y cuando la razón y
la fe fuesen entendidas apropiadamente. La razón,
según él, es un regalo de Dios, establecida en la
creación como una virtud para todos los hombres y
las mujeres. Por tanto, la razón debe entenderse
como un regalo de la naturaleza, lo que significa
que es una capacidad natural en todos nosotros.