3. La Institución Educativa Distrital Madre Laura contribuye a la formación integral de las estudiantes, fundamentada en la fe, la esperanza, el amor, la alegría, la humildad, la sencillez y la honradez; basándose en los principios religiosos, éticos y morales que profesa la doctrina de la Beata Laura Montoya Upegui, como modelo de mujer evangelizadora; desarrollando y cultivando actitudes de solidaridad, justicia y sentido de pertenencia con criterios de excelencia como ser humano y profesional en las dimensiones religiosa, social, política, cultural y académica para que lleguen a proyectarse a la educación superior y a la sociedad acorde a los procesos adquiridos en las competencias laborales ofrecidas en la institución, desarrollando su espíritu creativo y científico para ser tomada como modelo a seguir por la comunidad y convertirse en apoyo para su familia y orgullo de nuestro país.
4. Ser una de las mejores instituciones de Educación Básica Primaria, Secundaria Media y técnica de Colombia, gestando permanentemente nuevos modelos educativos de acuerdo con las actualizaciones e innovaciones científicas y tecnológicas que permitan generar pensamientos propios de transformación y conciencia histórica para mejorar la calidad de vida personal, familiar y social. La Institución Educativa Distrital “Madre Laura”, se proyecta a la comunidad entregando mujeres cristianas auténticas al estilo de la Beata Laura Montoya Upegui; como defensoras de la vida, de los principios democráticos y de convivencia, fundamentada en la excelencia académica recibida, que les permitirá desenvolverse en su entorno socio-cultural.
5. La Institución Educativa Distrital Madre Laura considera al ser humano como un ser trascendente, activo y creativo, con derechos y deberes; por lo tanto ofrece una educación cristiana y humanística fundamentada en los valores del evangelio (valores espirituales, éticos, morales y sociales), que abarcan todas las dimensiones de la persona (biológica, cognoscitiva y sensorial), potenciando a las estudiantes para una convivencia pacífica, capaz de relacionarse consigo misma, con sus semejantes, con la naturaleza y la sociedad.