Este documento describe 4 pasos para tratar la candidiasis: 1) mejorar el terreno orgánico eliminando azúcares y carbohidratos refinados de la dieta; 2) eliminar los hongos con antifúngicos naturales como el ajo y la cebolla; 3) equilibrar las defensas repoblando la flora intestinal con probióticos; y 4) reparar el daño intestinal con vitaminas y nutrientes. Factores como el estrés, antibióticos, y embarazo pueden causar un desequilibrio e incremento de la candid

1. Candidiasis, extermínela en 4 pasos con una alimentación fungicida
Las levaduras están presentes en todos los seres humanos poco después de nacer y viven en
una armónica simbiosis junto a nosotros. Se encuentran en la piel, aparato digestivo y
genitourinario. Entre sus funciones está absorver cierta cantidad de metales pesados para
que no entren en la sangre, degradar restos de carbohidratos mal digeridos y, junto con las
bacterias, mantener nuestro equilibrio intestinal y del PH.
La flora intestinal y vaginal junto con sistema inmunitario nos ayuda a mantener estas
levaduras bajo control. Sin embargo, existe una serie de factores que pueden deprimir y
desequilibrar el sistema, causando el sobrecrecimiento excesivo de estas levaduras y, por
consiguiente, el desarrollo de la incomoda candidiasis. (Existen varios tipos de candidiasis,
pero la más común es la candida albicans). Esta puede presentarse en la boca, esófago,
genitales y otras partes del cuerpo, y causar irritación, picazón severa, enrojecimiento y
malestar general, pudiendo ser incluso fatal en casos extremos.
Factores de riesgo
Un exceso de azúcar y carbohidratos refinados, además de alimentar la candida
directamente, aumenta los niveles glucosa en la sangre, con lo cual también podemos
alimentar la candida. Es por eso que es tan común la candida en pacientes
insulinodependientes y diabéticos. ¡Ojo! Que también el estrés es un factor de riesgo en la
elevación de la glucosa en sangre.
El cloro presente en el agua potable destruye la flora intestinal, y el fluor deprime el
sistema inmunitario.
Los antibióticos, por su parte, destruyen la flora intestinal bacteriana, pero NO la candida;
lo que hace que crezca sin ningún microorganismo que la controle.
Durante el embarazo los niveles de progesterona aumentan, induciendo a las glándulas
endometriales a producir glucógeno, lo que también favorece el crecimiento de la candida
vaginal. La falta de ácido clorhidrico y de enzimas digestivas impide la correcta digestión
de los alimentos, produciendo fermentación y putrefacción intestinal. Esto genera
sustancias irritantes para la mucosa intestinal, favoreciendo el desequilibrio de la flora y el
crecimiento de la candida. Lo que debido al ritmo desenfrenado de la vida moderna. Puede
verse incrementado con la comida rápida y la falta de masticación adecuada de los
alimentos.
Paso 1 mejorar el terreno orgánico
Es vital que debilitémosla candida antes de atacarla con un antifúngico. De lo contrario, si
está fuerte, podrá combatirlo y con el tiempo se hará resistente y afectará el desequilibro de
la flora interna aún más. La mejor forma de debilitarla es haciéndola “pasar hambre”.
Tendrá que eliminar de su dieta todos los productos y alimentos que contengan algún tipo

2. de azúcar blanca, miel, ENDULZANTES, y todos los productos refinados que los
contengan. ¡Lea las etiquetas!
Tanto el azúcar en la alimentación como la propia glucosa de la sangre, son los alimentos
favoritos de la candida.
Tendrá que dejar de consumir fruta por un tiempo como también productos lácteos, alcohol,
harinas refinadas por la presencia de levaduras, almidones como el arroz blanco y
productos fermentados como vinagre, salsa de soya, tempeh, “pickes”, etc.
A cambio, se puede comer carnes, pescado, huevos, vegetales, legumbres, frutos secos,
semillas de todo tipo, arroz integral, quínoa, pan integral sin levadura, palta, avena, aceite
de oliva, jugos de vegetales (excepto de beterraga y zanahoria). Agua purificada, etc.
Durante el tiempo de cambio en la dieta es muy posible que sienta un agravamiento de los
síntomas, pero es solo temporal. Se debe a la desintoxicación y también a que la candida
está “protestando de hambre”
Un buen zumo matutino de hojas verdes será de gran ayuda, ya que contiene una buena
cantidad de enzimas y ayudará a la producción de ácido clorhídrico.
Si las molestias digestivas persisten, pídale a su terapeuta que le recomiende suplementar su
dieta con algunas enzimas digestivas.
Al cabo de un mes de haber empezado la dieta (y siempre manteniéndola), se puede pasar
al segundo paso.
Paso 2 eliminar a los invasores
Una vez debilitada la candida, es importante introducir antifúngicos la destruya. Existen
muchos antifúngicos naturales que no producen efectos secundarios y son realmente
eficaces.
Los mejores resultados han dado en investigación son el ajo, la cebolla, el extracto de
semilla de pomelo, el aceite de orégano y ciertas hierbas como el sello de oro.
Es muy importante sí introducirlos con mucho cuidado, siempre empezando por cantidades
pequeñas. En el caso del ajo por ejemplo, comience con un diente diario y vaya
aumentando de a uno cada 4 o 5 días. Esto dado que si la candida se destruye de golpe se
pueden formar muchas toxinas y producir un empeoramiento muy fuerte de los síntomas.
Es recomendable consumir más alimentos que contengan molibdeno, ya que este mineral
destruye los deshechos de la candida, convirtiendo el acetaldehido en ácido acético que, en
el círcuulo de Krebs, es convertido en energía. Las principales fuentes de molibdeno son las
legumbres como lentejas, porotos, garbanzos, habas, arvejas, cereales integrales, verduras
de hoja verde y frutos secos.

3. Nota: No se auto-recete; si necesita un fungicida suplementario, consulte con su
nutriterapeuta.
Paso 3 equilibrar las defensas
Cuando los síntomas que presenta el paciente han remitido en su mayoría, es muy
importante reequilibrar la flora intestinal. Este paso no debe hacerse al principio, ya que
cuando la pared intestinal esta inflamada puede haber una reacción de intolerancia a las
bacterias “amigas”.
Además, mientras haya un exceso de candida en el intestino, los Lactobacillus no pueden
crecer y repoblar el tracto intestinal. Es mucho mas efectivo disminuir el crecimiento de la
candida, reducir la inflamación intestinal y entonces repoblar la flora intestinal.
Las bacterias más abundantes son los Lactobacillus acidophilus y los Bicidobacterium
Bifidum. Estas bacterias se encargan de inhibir el crecimiento de ciento de organismos,
como la candida. Suplemente estos probióticos con la orientación adecuada.
Paso 4 reparar lo perdido
Una vez que la infección ha remitido, la flora intestinal está equilibrada y el organismo
dispone de una buena dosis de nutrientes, acá es conveniente introducir otros nutrientes
para reparar la pared intestinal. Las vitaminas más, adecuadas en este caso son las A, C, E y
la glutamina. También los ácidos grasos esenciales, pero estos ya fueron incorporados
desde el paso 1. Todos estos nutrientes se encargan de reparar, sellar y fortalecer la pared
intestinal.
Otro nutriente aconsejable por un tiempo es la biotina (mínimo 300 mcg.), pare evitar que
las levaduras sanas y presentes en el intestino crezcan y pasen de ser inofensivas a
levaduras problemáticas.
¡Éxito!
· Dato importante: Ciertas levaduras luchan entre sí
Existe un tipo de levadura que tiene la gran propiedad de luchas con la candida por el
espacio disponible en el organismo; se llama Saccharomyces boulardii y la puede
encontrar en cualquier farmacia. Esta levadura incluso puede actuar luego de un tratamiento
con fungicidas y antibióticos, asegurando una buena repoblación de la flora intestinal, y
evitando la multiplicación de levaduras dañinas como la candida. Se siente el alivio de
inmediato.
Fuentes:
http://nutricion-ortomolecular.blogspot.com/2007//10/candidiasis-crnica-cala-cervera.html
http://www.fibromialgia.com.ar/candidiasis_cronica.htm
http://foro.candidiasiscronica.org/default.aspx?g=posts&m=66

4. Paola Ramírez vega
Nutriterapeuta ortomolecular
p.andrearamirez@yahoo.cl
El Guardian de la Salud Edicion 109 paginas 32 – 33