2. historia En 1843, el científico húngaro David Gruby —considerado el fundador de la microbiología— estudiaba un parásito microscópico. El parásito parecía propulsarse hacia adelante como un sacacorchos, así que nombró a la criatura Trypanosoma sanguinis, que viene del griego “trypanon”, o taladro. El nombre perduró y ahora se utiliza el término tripanosoma para describir un género de parásitos unicelulares que se mueven de manera similar. En 1880, Griffith Evans descubrió el Trypanosoma evansi, agente de la enfermedad fatal que atacaba caballos y camellos conocida como “surra”. Al comienzo del siglo XX, fue descubierto el Trypanosoma gambiense, causador de la tripanosomiasis africana o enfermedad del sueño, que aflige a la población africana.
3. Las primeras observaciones sobre tripanosomas realizadas en Brasil fueron de Adolpho Lutz en la década de 1890, cuando en sus estudios sobre hematozoarios observó la aparición de esos protozoarios en ratones y ranas. Anos más tarde, en 1907, Vital Brasil y A. Lutz registrarían la aparición de una tripanosomiasis epizoótica en los estados de São Paulo y Pará. Carlos Chagas dio a conocer un descubrimiento del tripanosoma en ejemplares de monos tití, Un experimento, dirigido por Oswaldo Cruz, resultó en un gran número de tripanosomas en la sangre periférica de los monos, pero con morfología completamente diferente a la del tripanosoma encontrado anteriormente por Chagas lo que le llevó a describirla como una nueva especie, la cual denominó Trypanosomacruzi en homenaje a Oswaldo Cruz.