Este documento ofrece consejos para padres sobre cómo evitar involucrar a los hijos en los conflictos de la pareja. Recomienda que los padres gestionen sus propios conflictos sin involucrar a terceros y que no usen a los hijos para desahogarse o ganar afecto sobre el otro padre. También advierte que la "triangulación" afecta emocionalmente a los hijos y que estos necesitan el afecto de ambos padres por igual.