El documento describe los elementos clave que componen las pequeñas y medianas empresas. Estos incluyen recursos humanos como trabajadores y propietarios, recursos materiales como edificios, equipos y materia prima, procedimientos como el organigrama y métodos, y recursos financieros como capital y financiamiento. La conclusión es que estas empresas requieren una coordinación entre capital, trabajo y dirección para lograr una producción útil y alcanzar sus objetivos, y que aplicar este modelo les permite funcionar a largo plazo.