La Medicina Tradicional Andino-Amazónica en el Perú. Conferencia Magistral. Primer Simposio de Antropología Médica en el Perú: “Articulando investigadores/as y delineando una agenda al 2020.” Lima, 20-21.05.2016.
La Medicina Tradicional Andino-Amazónica en el Perú.
1. Hugo E. Delgado Súmar
Primer Simposio de Antropología Médica en el Perú:
“Articulando investigadores/as y delineando una agenda al 2020.”
La Medicina Tradicional Andino-Amazónica en el Perú
Hugo E. Delgado Súmar1
“Los pueblos indígenas […] han desarrollado un conjunto de prácticas y
conocimientos sobre el cuerpo humano, la convivencia con los demás seres
humanos, con la naturaleza y con los seres espirituales, muy complejo y bien
estructurado en sus contenidos y en su lógica interna. Mucha de la fuerza y
capacidad de sobrevivencia de los pueblos indígenas se debe a la eficacia de
sus sistemas de salud tradicionales, cuyo ‘eje conceptual’ o cosmovisión se
basa en el equilibrio, la armonía y la integridad.” (OPS/OMS 1997:13)
2
.
El Panorama General
En todos los países del mundo existe una medicina de corte tradicional,
aunque sus modalidades varíen según el desarrollo cultural y económico
alcanzado en cada nación. Esta existencia, se da en forma paralela y pese a
los grandes adelantos alcanzados por la llamada medicina occidental o
científica, debido a un complejo de factores, entre los que destacan, por una
parte, la escasa cobertura de los servicios de salud oficiales y la
inaccesibilidad de los usuarios a dichos servicios, ambos casos,
fundamentalmente por razones económicas; y por otra, la estructura
fundamentalmente urbana y el carácter eminentemente reparativo del
sistema médico oficial, impuesto sobre patrones culturales distintos –y en
muchos casos, contrapuestos- a la lógica occidental.
El contacto de los países del tercer mundo con el occidente europeo en
plena expansión, como consecuencia de un proceso de aculturación –ni
sistemático ni racionalizado-, ha dado como resultado la existencia (y la
pervivencia) de una variedad infinita de formas locales y/o regionales de
medicina, que difieren entre sí por el grado de influencia recibida de los
sistemas médicos europeos, africanos y asiáticos, así como, de los sistemas
religiosos3
.
1
Periodista / Antropólogo Social por la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga / Magister en Antropología
Por la Pontificia Universidad Católica del Perú / Especialista en Gerencia de Servicios de Salud por el Instituto de
Desarrollo de Recursos Humanos del MINSA (Ex Escuela Nacional de Salud Pública) / Conciliador Extrajudicial.
2
Organización Mundial de la Salud / Organización Panamericana de la Salud. División de Desarrollo de Sistemas y
Servicios de Salud. Fortalecimiento y Desarrollo de los Sistemas de Salud Tradicionales: Organización y Provisión de
Servicios de Salud en Poblaciones Multiculturales. Iniciativa de Salud de los Pueblos Indígenas N° 6. Washington,
D.C., Agosto 1997.
3
A nivel mundial, se estima existen más de 5000 pueblos originarios, en 90 países, con una población de 370 millones
de personas. ONU. La situación de los pueblos indígenas del mundo. Departamento de Información Pública de las
Naciones Unidas, 2010.
2. Hugo E. Delgado Súmar
Las interacciones a que han dado lugar los contactos culturales iniciados con
la conquista americana, permiten apreciar al término de 500 años, la
existencia –en cada espacio nacional- de dos sistemas médicos claramente
definidos, uno occidental y uno tradicional; el primero, sometido a un
proceso de permanente “popularización” y el segundo, a un inevitable
proceso de “medicalización”, creando ambos, un espacio de atención en el
que predomina una medicina “sincrética” que denominamos popular, y que
se asienta fundamentalmente en las ciudades de gran aglomeración urbana.
Quienes postulan la necesidad de una “tercera civilización”, ven este campo
de convergencia de ambos sistemas, como el marco dentro del cual puedan
armonizarse la ciencia y la tecnología modernas con los conocimientos y las
técnicas tradicionales (selectivamente recuperadas y mejoradas); es decir,
el marco en el cual la creación de nuevas “maneras” o “estilos” de
desarrollo, impliquen nuevas “maneras” o “estilos” para elaborar una ciencia
que responda a las necesidades del tercer mundo.
Al término de 20 siglos de desarrollo autónomo, la América precolombina,
mostraba una gran heterogeneidad cultural. El desarrollo histórico de sus
pueblos no había sido simultáneo dando como resultado un extenso abanico
en el que “muchas tribus mostraban un escasísimo progreso cultural
mientras otras habían llegado a un nivel de cultura superior”. En este
marco, florecieron tres altas culturas: la Maya, la más antigua (que floreció
entre los siglos X y XII de nuestra era), la Azteca, heredera de la cultura de
los antiguos Nahuas y la Inca que llegó a constituir el dilatado imperio del
Tahuantinsuyo; las dos últimas, contemporáneas entre ellas.
En este continente, así como en todos los lugares del mundo, el “hombre
primitivo, ante la imposibilidad de comprender la causa y naturaleza de
ciertos fenómenos los interpretó como hechos sobrenaturales y fue
desarrollando una concepción animista y mágica del mundo. El sol, se
convierte en uno de los más importantes dioses en tanto que, los agentes
climatológicos agresivos y destructores, son por sí mismo dioses. La
enfermedad y la muerte fueron consideradas como fenómenos
sobrenaturales, y como consecuencia de ello surge el tratamiento mágico y
con él, los rituales para proteger o restituir la salud individual o para
proteger al grupo, asegurar su estabilidad y subsistencia. En este contexto
inicial, Medicina y Religión, son indistinguibles en la persona que oficia de
sacerdote y actúa como médico”.
Al momento del descubrimiento, y como resultado de su desarrollo, aztecas
e incas, al igual que otros pueblos, poseían una medicina con un elevado
grado de especialización; y aunque ésta era de carácter mágico religioso, en
el plano real –o natural-, un largo proceso de observación y
experimentación les permitió explicar las causas de la enfermedades,
reconocer sus síntomas y así poder diagnosticarlas y decidir, cómo tratarlas
y cómo prevenirlas; reconocieron las etapas naturales de los seres vivientes
(nacimiento, crecimiento, madurez, senectud y muerte) y entendieron las
diferencias entre salud, enfermedad, dolor y muerte.
3. Hugo E. Delgado Súmar
En este plano, “conocieron y utilizaron plantas hoy clasificables dentro de
muchas categorías farmacológica: psicoactivas, de efectos neuro-
vegetativos, diaforéticas, laxantes y purgativas, antiparasitarias, de efectos
antibacterianos, antineoplásicas, promotoras de fertilidad y abortivas y
anticonceptivas, antirreumáticas, anti jaquecosas, etc. Conocieron asimismo
plantas de uso cosmético y muchas de alto poder tóxico que utilizaron en la
caza y la pesca”.
En el plano mágico-religioso (en el que se ubicaban las enfermedades que
ignoraban cómo curar), a diferencia de la medicina moderna cumplía “una
función manifiesta en materia social” al “dar cohesión y continuidad a la
comunidad indígena”. A la luz de las investigaciones, y principalmente a la
luz de la tradición oral y la extensa obra de los cronistas, la farmacopea
aborigen constituía y constituye la más rica y variada del mundo y,
paradójicamente, todavía desconocida, en grado sumo.
Hoy, “la América Latina constituye un polícromo mosaico de nacionalidades,
de mezclas étnicas y raciales y, naturalmente, de tradiciones y de
costumbres regionales o locales, para no mencionar aspectos políticos o
económico-sociales”. Es un continente diverso, con una sola historia, con
desarrollos desiguales y con un mismo problema fundamental: su
incapacidad de proporcionar a sus poblaciones nacionales alimentación y
salud, en cantidades, oportunidad y calidad compatibles con la dignidad
humana y en armonía con la gran riqueza natural y la rica tradición cultural
que posee. La habitan 522 pueblos originarios, distribuidos en 21 países y
12 áreas geoculturales4
,5
. (Ver Relación adjunta).
Finalmente, en el aspecto demográfico, el subcontinente latinoamericano
posee actualmente 629 millones de habitantes, 20 millones más que lo
previsto en las proyecciones al 2025, como resultado de un crecimiento
anual a una tasa del 1.1%, en el periodo 2010-20156
. El 75,23% de dicha
población se encuentra concentrada en los espacios urbanos7
. América
Latina posee el 48.56% del territorio americano y el 13.94% de la superficie
total del planeta con una densidad demográfica media de 29 habitantes por
kilometro cuadrado (hab/km2), una cifra inferior al promedio mundial8
,
fundamentalmente por la muy baja ocupación de la zona Amazónica.
4
UNICEF. Atlas Sociolingüístico de pueblos indígenas en América Latina 1. Madrid, Agencia Española para la
Cooperación Internacional al Desarrollo AECID – UNICEF – PROEIB Andes, 2009. 522 p. Atlas Sociolingüístico de
pueblos indígenas en América Latina 2. Madrid, Agencia Española para la Cooperación Internacional al Desarrollo
AECID – UNICEF – PROEIB Andes, 2009. 584 p.
5
Cruz, Alberto. Pueblos Originarios en América. Guía Introductoria de su Situación. Pamplona, Aldea Alternatiba
Desarrollo, 2010. Apéndices: Ramiro, Pedro y Erika González. Multinacionales españolas en América Latina: impactos
sobre los pueblos indígenas. Mattié, Mailer. Mujeres de Abya Yala: Mama Tránsito Amaguaña (1909-2009). Mapas:
David San Martín.
6
UNFPA. Estado de la Población Mundial 2015. Fondo de Población de las Naciones Unidas, 2015.
7
ONU-HABITAT. El estado de las ciudades de América Latina y El Caribe 2012. Rumbo a una nueva transición
urbana. Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, ONU-Habitat, 2012.
8
El promedio mundial de densidad demográfica es de 51 hab/km2. UNDESA (2010). World Urbanization Prospects:
The 2009 Revision. Organización de las Naciones Unidas, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales, División
de Población.
4. Hugo E. Delgado Súmar
El Panorama Nacional
En el Perú, al igual que en la totalidad de países de América Latina,
coexisten dos sistemas médicos, uno formal, de creciente influencia
tecnológica, y uno andino, de pervivencia marginada y de ejercicio
“clandestino”.
Sin embargo, es necesario aclarar que, dentro del sistema médico andino,
existe no una, sino muchas “medicinas tradicionales” que corresponden a
espacios ecogeográficos diferentes, pero que sin embargo, se hallan
profundamente interrelacionadas, y sus diferencias fundamentales no son
sino expresión de los procedimientos de diagnóstico y curación empleados,
o expresan el nivel de influencia recibido.
Esta pluralidad de la medicina tradicional, corresponde –en primer lugar- a
la pluralidad etnolingüística que caracteriza al país, la mayor en el
continente americano. A ella se suman un conjunto de vertientes: la
española como resultado de la expansión europea del siglo XVI; la africana
consecuencia del tráfico de esclavos de la época colonial; la asiática
derivada de las migraciones –principalmente chinas- que provocó el
surgimiento de los complejos agroindustriales de la costa peruana en los
inicios de la República, entre otras más. A éstas, se agregará más tarde el
sistema médico moderno al que ya hemos hecho referencia. Todas estas
vertientes médicas, que a su vez eran diversas en sí mismas, dieron lugar
en los últimos quinientos años a las llamadas medicinas tradicionales hoy
vigente en el país.
Si asumimos que en el país existen no menos de 60 pueblos originarios,
entonces debemos, en teoría, aceptar la existencia de no menos de 60
tradiciones médicas, desarrolladas en el marco de cada una de dichas
culturas. En este sentido, para comprender esta diversidad de tradiciones,
creemos que es necesario abordarla a través de aproximaciones que nos
den cuenta al mismo tiempo de la unidad que las asemeja y la diversidad
que las hace singulares.
En una primera aproximación, hemos creído necesario distinguir dos área
de desarrollo de la medicina tradicional peruana: Una que comprende el
conjunto de tradiciones que se caracterizan por el uso de alucinógenos para
trascender la realidad como parte de los procesos terapéuticos a la que
denominaremos “chamanismo”, pese a que esta categoría ha resultado ser
inadecuada en nuestro contexto9
,10
; y, otra que comprende el conjunto de
tradiciones –de carácter fundamentalmente mágico-religioso- que no
9
Geertz, Clifford. Religion as a cultural system (La Religión como un sistema cultural). En. Anthropological
approaches to the study of religión (Enfoques antropológicos para el estudio de la Religión), M. Banton (coord.),
Tavistock, Londres, 1966.
10
Una amplia discusión sobre el uso del término shamanismo en Latinoamérica se encuentra en: Martínez González,
Roberto. Lo que el chamanismo nos dejó: cien años de estudios chamánicos en México y Mesoamérica. En. Anales de
Antropología, 41-II (2007), 113-156, México.
5. Hugo E. Delgado Súmar
requieren del uso de alucinógenos para trascender la realidad como parte
de los procesos terapéuticos a la que denominaremos “curanderismo”.
En una segunda aproximación, es necesario distinguir aquellas tradiciones
médicas de carácter simbiótico que han surgido como resultado de la
interacción del curanderismo mágico-religioso con las tradiciones
“chamánicas”. I finalmente, aquella que surge como resultado de los
procesos de migración y del crecimiento de los conglomerados poblacionales
en los contextos urbanos.
Tradiciones médicas que hacen uso de alucinógenos:
1. La Medicina Tradicional de parte de la Costa y Sierra Norte del país,
con notoria presencia en los departamentos de Piura, Chiclayo y La
Libertad11
; y de manera más limitada, en los departamentos de Ancash
y Lima. (Ver Mapa)
11
Comprende: [1] parte de los distritos de Chongoyape, Monsefú y Saña de la Provincia de Chiclayo; parte de los
distritos de Ferreñafe e Incahuasi de la Provincia de Ferreñafe; y, parte de los distritos de Illimo, Muchumi, Morrope,
6. Hugo E. Delgado Súmar
2. La Medicina Tradicional de la Selva, que comprende los departamentos
de Loreto, Madre de Dios y Ucayali, y parte de los departamentos de
San Martín, Amazonas, Huánuco, Cajamarca, La Libertad, Pasco, Junín,
Huancavelica, Apurímac, Ayacucho, Cusco, Puno y Piura12
. (Ver Mapa).
Motupe y Salas de la Provincia de Lambayeque, en el Departamento de Lambayeque. [2] parte de los distritos de
Moche y Trujillo de la Provincia de Trujillo; parte de los distritos de Chicama, Magdalena de Cao y Paiján de la
Provincia de Ascope; parte de los distritos de Jequetepeque y San Pedro de Lloc de la Provincia de Pacasmayo; y
parte del distrito de Virú de la Provincia de VIrú en el Departamento de La Libertad. [3] parte del distrito de
Huancabamba de la Provincia de Huancabamba; parte del distrito de Morropón de la Provincia de morropón; y, parte
de los distritos de Apotape y Tamarindo de la Provincia de Paita en el Departamento de Piura. [4] parte del distrito de
Chimbote de la Provincia de Santa del Departamento de Ancash; [5] parte del distrito de Supe en la Provincia de
Barranca; y, parte del distrito de Huacho en la Provincia de Huaura del departamento de Lima.
12
Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana. Delimitación del territorio amazónico con criterio ecológico y
criterio hidrográfico. Octubre 1998. Bajo el criterio ecológico, la Amazonía comprende el siguiente territorio;
La totalidad de los departamentos de Loreto, Madre de Dios y Ucayali.
El Departamento de San Martín, excepto parte de los distritos de Huicungo de la Provincia de Mariscal
Cáceres y Shunte de la Provincia de Tocache.
El Departamento de Amazonas, excepto parte de los distritos de Leimebamba, Balsas y Chuquibamba de la
Provincia de Chachapoyas; parte de los distritos de La Peca y Copallin de la provincia de Bagua; parte de los
distritos de Pisuquia, Cocabamba, San Francisco de Yeso, Camporredondo y Providencia de la Provincia de
Luya; y, parte de los distritos de Cajaruro, Yamon, Cumba, Lonya Grande, Bagua Grande y Jamalca de la
Provincia de Utcubamba.
El Departamento de Huánuco, excepto parte de los distritos de Panao y Chaglla de la Provincia de Pachitea;
parte de los distritos de Chinchao y Churubamba de la Provincia de Huánuco; parte de los distritos de Arancay,
Jircan y Monzón de la Provincia de Huamalíes; parte de los distritos de Cochabamba y Huaycabamba de la
Provincia de Huaycabamba; y, parte del distrito de Marías de la Provincia de Dos de Mayo.
La Provincia de las Ignacio, excepto parte de los distritos de Huarango, Chirinos, San José de Lourde,
Tabaconas y La Coipa y la Provincia de Jaén, excepto parte de los distritos de Bellavista, Las Pirias, Colasay,
Pomahuaca, Pucará, Sallique, Chontali, San Felipe, Santa Rosa y Jaén, en el Departamento de Cajamarca.
Parte del distrito de Hongón, de la Provincia de Pataz del Departamento de La Libertad.
La Provincia de Oxapampa, excepto parte de los distritos de Pozuzo y Huancabamba y parte de los distritos de
Huachón y Paucartambo de la Provincia de Pasco del Departamento de Pasco.
La Provincia de Chanchamayo excepto parte del distrito de Vitoc; La Provincia de Satipo excepto parte del
distrito de Pampa Hermosa; parte de los distritos de Pariahuanca y Santo Domingo de Acobamba de la
Provincia de Huancayo; Parte de los distritos de Monobamba, Molinos y Apata de la Provincia de Jauja; parte
de los distritos de Huasahuasi y Palca de la Provincia de Tarma; y, parte del distrito de Ulcumayo de la
Provincia de Junín, en el Departamento de Junín.
Los distritos de Huachocolpa y Salcahuasi y parte de los distritos de Surcubamba, Tinta y Puncu y
Salcabamba, en la Provincia de Tayacaja del departamento de Huncavelica.
Los distritos de Pacobamba y Andarapa y parte de los distritos de San Jerónimo, Kishuara, Huancarama,
Pacucha, Talavera y Andahuaylas de la Provincia de Andahuaylas; los distritos de San Pedro de Cachora y
Huanipaca y parte de los distritos de Curahuasi y Abancay de la Provincia de Abancay; y, parte de los distritos
de Huaccana, Ongoy y Ocobamba de la Provincia de la Provincia de Chincheros, en el Departamento de
Apurimac.
Distritos de Ayna y Santa Rosa y parte de los distritos de San Miguel, Anco y Chungui de la Provincia de La
Mar, y, parte de los distritos de Sivia, Ayahuanco y Huanta de la Provincia de Huanta en el Departamento de
Ayacucho.
Distritos de Santa Ana, Echarate, Quimbiri y Maranura, y parte de los distritos de Huayopata, Quellouno,
Ocobamba, Santa Teresa y Vilcabamba, en la Provincia de La Convención; parte de los distritos de
Paucartambo, Kosñipata y Challabamba en la Provincia de Paucartambo; parte de los distritos de Camati y
Marcapata en la Provincia de Quipicanchi; parte de los distritos de Machupicchu y Ollantaytambo en la
Provincia de Urubamba; parten de los distritos de Yanatile y Lares en la Provincia de Calca; y, parte de los
distritos de Limatambo y Mollepata en la Provincia de Anta, en el Departamento del Cusco.
Distritos de San Juan de Oro y Yanahuaya y parte de los distritos de Limbani, Phara, Patambuco , Quiaca y
Sandia en la Provincia de Sandia; distrito de San Gabán y parte de los distritos de Ayapata, Coasa, Ollachea,
Ituata y Usicayos en la Provincia de Carabaya; parte del distrito de Sina de la Provincia de San Antonio de
Putina, en el Departamento de Puno.
Parte de los distritos de Huancabamba, Sondor y El Carmen de la Frontera, de la Provincia de Huancabamba
del Departamento de Piura.
8. Hugo E. Delgado Súmar
En este marco, definido como shamánico, como es natural, “no existe Un
saber común a todos los chamanes (...), sino que hay tantos “saberes”
como shamanes (y áreas de desarrollo shamánico) existen” (Chaumeil; p.
37)13
.
El “Shamanismo” practicado en los departamentos de la costa y sierra norte
del país, fuertemente impregnado del ritual y la imaginería católica (santos,
efigies, crucifijos, rosarios, medallas, detentes, estampas, etc.), de
elementos religiosos afro-asiáticos, y en algunos casos de brujería;
comprende la utilización del Sanpedro (Trichocereus pachanoi)14
y el Tabaco
(Nicotiana tabacum) como elementos modificadores de la actividad psíquica
para alcanzar el trance y poder convocar a los “espíritus favorables”.
El núcleo de esta tradición médica se ha construido en torno al complejo de
lagunas denominadas “Huaringas”15
, ubicadas en la provincia de
Huancabamba, en el departamento de Piura. El área que comprende esta
tradición alcanza escasamente al 5% del territorio de los departamentos de
Piura, Lambayeque y La Libertad. El otro 95% del territorio, comprende una
infinita variedad de tradiciones médicas locales de carácter mágico-religioso
de origen quechua, sobre las cuales se ha hecho, o se hace, una inadecuada
generalización.
El “Shamanismo” practicado por los grupos étnicos de la Amazonía Peruana
(entre los que desatacan los Yagua y los Shipibo-Conibos), comprende la
utilización de la Ayahuasca (Banisteriopsis caapi y Banisteriopsis
rubsyana)16
, el Toé (Datura suaveolen) y el tabaco (Nicotiana Tabacum),
como modificadores de la actividad psíquica que permite alcanzar el trance
y el contacto con los “espíritus auxiliares”, que a su vez permite descubrir el
origen de la enfermedad (que generalmente es consecuencia de un acto
shamánico) y establecer el tratamiento posterior que debe seguir el
enfermo.
En el marco de esta tradición, que comprende aproximadamente 55 grupos
étnicos, se hace necesario hacer algunas precisiones: [1] no todos los
grupos étnicos de la Amazonía utilizan el Ayahuasca; [2] muchos de ellos
han adoptado el ayahuasca como elemento básico en épocas muy
13
Chaumeil, Jean-Pierre. Chamanismo Yagua. En. Amazonía peruana, Chamanismo, Lima, 1979, 2(4): 35-69.
14
El Sanpedro (Achuma, Huachuma o Wachuma en quechua), cuyo principio activo es la mescalina, tiene tres especies
principales, cada una de las cuales se usa en un área determinada: Echinopsis pachanoi, en Ecuador y norte del Perú
hasta Huánuco; Echinopsis peruvieanus, de Ancash hasta Cusco; Echinopsis bridgesii, del Lago Titicaca hasta La Paz.
En las regiones puneñas del NOA (Región histórico-geográfica de la República Argentina, integrada por las provincias
de: Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, y Santiago del Estero), el Sanpedro (Echinopsis pachanoi), “se
emplea para curar enfermedades, incluyendo el alcoholismo y la locura, para adivinaciones, para hacer brujería
amorosa, para combatir cualquier tipo de hechicería y para asegurar éxito en empresas personales”.
15
Compljo Las Huaringas: 1. El Shimbe, nacimiento del río Huancabamba, 2. La Huaringa o laguna Negra,
considerada como sagrada, en el nacimiento del río Quiroz. 3. La Condor-Huac. 4. La de La Peña Blanca. 5. La
Colorada. 6. La de La Pampa del Corcovado. 7. La de Las Arrebiatadas. 8. La de Los Luceros o Palanganas Grandes.
9. La de Los Relámpagos. 10. La de Los Linderos de Sapalache, 11. La de Las Barabacoas o de Los Amarillo, 12. La
de El Toro. 13. La de Las Palanganas o Lagunas del Rey Inga. 14. La de Los Patos. 15. La del Pozo Claro.
16
Resolución Directoral Nacional N° 836/INC “Declaran Patrimonio Cultural de la Nación a los conocimientos y usos
tradicionales del Ayahuasca practicados por comunidades nativas amazónicas”. 24.06.2008.
9. Hugo E. Delgado Súmar
recientes; [3] muchos de ellos, han abandonado su uso en los últimos 50
años por la desaparición de sus especialistas; [4] muchos de ellos, usan el
tabaco como elemento básico para trascender la realidad,
independientemente de si usan o no el ayahuasca con carácter ritual, y
finalmente, [5] muchos de ellos, tal vez la mayoría, lo usan en el marco del
“vegetalismo”, “una forma de medicina popular a base de alucinógenos
vegetales, cantos y dietas”17
,18
.
Principales Plantas Maestro en las Tradiciones Médicas del Perú
El uso de los recursos vegetales curativos en la Amazonía peruana, y dentro
de ellas, el uso de las llamadas plantas maestras, está ampliamente
documentado. Entre ellas, el sanpedro y la ayahuasca, resultan ser tan sólo
dos de una larga lista de plantas de poder o plantas maestras. "Las plantas
tienen un espíritu y sus espíritus son inteligentes y tienen una gran misión y
es la de ayudar... las llamadas plantas de Poder o plantas Maestras, que en
17
Dobkin de Ríos, M. 1970. A note of the use of Ayahuasca among urban mestizo populations in the Peruvian Amazon.
American Anthropologist 72: 1419-1422, mencionado por: Trujillo Trujillo, Edwin; Frausin Bustamante, Gina Geovanna;
Correa Múnera, Marco Aurelio & William Fernando Trujillo Calderón. El uso de la ayahuasca en la amazonia. En.
Ingenierías & Amazonia 3(1), 2010. Universidad de la Amazonía.
18
Para profundizar este tema, ver: Luna, Luis Eduardo. Xamanismo amzônico, ayahuasca, antrpomorfismo e
mundo natural. En. O uso ritual da ayahuasca, editado por B. Labate y W. Araujo. Campinas: Mercado de Letras, 2009.
Luna, Luis Eduardo. Vegetalismo. Shamanism among the mestizo population of the peruvian amazon. Stockholm:
Tesis de doctorado en Estudios Comparados Sobre Religión -University of Stockholm, 1986. Luna, Luis Eduardo.
«The concept of Plants as TEachers among four Mestizo Shamans of Iquitos. Northeastern Peru.» The Journal of
Ethnopharmacology, nº 11 (1984): 135-156.
SANPEDRO
SANPEDRO
AYAHUASCA
AYAHUASCA
COCA
COCA
TABACO
TABACO
10. Hugo E. Delgado Súmar
el desarrollo de la evolución, son plantas más evolucionadas, son grandes
adiestradoras o adiestradores de lo que es la mente y la conexión con el
espíritu." (Juan Ruiz Naupari, chamán y psicólogo nacido en Cusco).
Las plantas Maestro se utilizan para:
a) diagnosticar;
b) curar enfermedades;
c) ejercer sus capacidades adivinatorias;
d) comunicarse con los espíritus de la naturaleza;
e) comunicarse con los espíritus de los muertos;
f) comunicarse y adquirir conocimiento del espíritu de las plantas;
g) también, para hacer “daño”.
Las plantas maestro utilizadas por los sistemas médicos tradicionales se
agrupan en tres tipos básicos:
a) las que tienen carácter psicoactivo (que inducen directamente a
estados modificados de conciencia) como el Sanpedro (Trichocereus
Pachanoi) o la Ayahuasca (Banisteriopsis caapi);
b) las que no poseen componentes psicoactivos, pero se manifiestan
intensamente durante el trance o los sueños, como la Ushpawasha
Sanango o el Chiric Sanango (Brunfelsia grandiflora);
c) las que, independientemente de los aspectos ya señalados, se utilizan
como puente ritual para la comunicación con el mundo sobrenatural,
como la coca (Erythroxylon coca) o el cacao (Theobroma cacao).
(Ver Relación adjunta de Plantas Maestro)
Tradiciones médicas que no hacen uso de alucinógenos:
3. La Medicina Tradicional Quechua, que tiene su mejor expresión en los
departamentos de Cusco, Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Junín,
Ancash y Cajamarca. (Ver Mapa).
4. La Medicina Tradicional Aymara, asentada fundamentalmente en el
departamento de Puno y en las zonas altas de los departamentos de
Moquegua y Tacna. (Ver Mapa)
Ambas, de carácter mágico religioso, comparten una misma cosmovisión y
tienen la misma percepción sobre el complejo salud enfermedad, hacen uso
de una rica y variada farmacopea de origen andino y amazónico y son
altamente ritualizadas. Difieren en el idioma a través del cual se expresan y
el territorio en el que se desarrollan, y en ambos casos, su lenguaje ha
permeado la casi totalidad de las culturas andino-amazónicas y sus áreas de
influencia trascienden los límites nacionales.
12. Hugo E. Delgado Súmar
La Medicina Tradicional Quechua, al igual que su lengua, cuyo centro
principal se halla en la sierra peruana, se practica desde el sur de Colombia
hasta el Noroeste Argentino.
13. Hugo E. Delgado Súmar
La Medicina Tradicional Aymara, al igual que su lengua, cuyo centro
principal se encuentra en el altiplano Perú-Boliviano, se practica en el nor-
oeste y la parte nor-central de Bolivia (sobre todo en la ciudad de La Paz, la
zona lacustre del lago Titicaca y la mayor parte del Altiplano), en el sur de
Perú (en los departamentos de Puno, Tacna, Moquegua y Arequipa y toda la
zona lacustre), en el norte de Chile (en la sierra fronteriza con Bolivia como
en las ciudades de Arica, Iquique y Antofagasta), y la parte norte de
Argentina (en la sierra jujeña y salteña, y en las provincias del mismo
nombre), además de la población migrante en la ciudad de Buenos Aires.
14. Hugo E. Delgado Súmar
Tradiciones médicas de carácter “simbiótico”
5. La Medicina Tradicional de la Provincia de Cajamarca19
Tradición que se desarrolla con características altamente ritualizadas
propias de la tradición quechua-aymará y la utilización de alucinógenos
que la aproxima a la tradición chamánica de los departamentos de la
Costa y Sierra Norte.
6. La Medicina Tradicional de la Provincia de Lamas o Medicina Tradicional
Quechua-Lamisto20
Tradición de raíz eminentemente quechua que se desarrolla con
características propias que la aproximan al chamanismo amazónico. Ha
introducido el uso del ayahuasca con carácter terapéutico.
19
Ver: Iberico Mas, Luis. Folklore Médico de Cajamarca. Cajamarca, UNC, 1984. El pensamiento mágico de la
medicina tradicional cajamarquina. En: La Medicina Tradicional en el Norte del Perú. Encuentro Regional Nor Andino
de Etnomedicina, 4o. Departamento de Acción Social – Cajamarca, 1994. pp. 55-63.
20
Ver: Gilardi Salaverry, Cecilia. Esbozo del aspecto medico de la cultura Quechua Lamisto. En. II Congreso
Internacional de Medicinas Tradicionales. Area de Antropología Médica. Lima, junio 26-29, 1988.
16. Hugo E. Delgado Súmar
A éstas, luego y como resultado de los movimientos demóticos que han
caracterizado los procesos de urbanización que ha vivido el Perú en los
últimos ochenta años, se puede agregar una, a la que denominamos
curanderismo urbano. Esta, tiene su máxima expresión en el gran
aglomerado urbano que constituye Lima-Callao, y en el cual, confluyen, se
integran y se reelaboran todas las tradiciones médicas del Perú, la cuál,
influye a su vez, en dichas tradiciones.
Según las proyecciones oficiales, el Perú en el año 2005, alcanzó una
población de 28.1 millones de habitantes, lo que implica un aumento
absoluto de 6 millones de personas con respecto a la población de 1993. Es
decir, creció en un volumen similar a la población acumulada a lo largo de
toda su historia prehispánica, colonial y republicana hasta 1940.
Igualmente, para el año 2005, como resultado de los procesos migratorios
campo-ciudad y de las tendencias de centralización y litorización de la
población rural, Lima tenía una población de 8.1 millones de habitantes, es
decir, creció en 1.7 millones de personas con respecto al censo de 1993,
siendo éste un incremento similar al crecimiento de su población desde su
fundación en el año 1535 hasta el año 1961.
En las estimaciones oficiales para el año 2014, Lima cuenta 9’735,587
habitantes, es decir, cerca de 400 mil habitantes más que la totalidad de las
74 ciudades más grandes del país con más de 100 mil habitantes21
.
21
INEI. Perú: Estimaciones y Proyecciones de Población total por Sexo de las principales ciudades 200-2015. Boletín
Especial N° 23. Lima, marzo 2012.
6.O 16.1 6.O
HASTA
1940
HASTA
2005
1940 - 1993
1. LA POBLACION
2. LA POBLACION URBANA: LIMA
1535
1961
HASTA
2005
1961 - 1993
1.7 1.7
4.7
17. Hugo E. Delgado Súmar
La Realidad actual
En 1998, afirmábamos que, desde Valdizan y Maldonado (192222
), hasta la
fecha, son numerosos los estudios llevados a cabo sobre la Medicina
Tradicional en el Perú. Todos ellos, fundamentalmente de carácter
etnográfico y algunos, con carácter testimonial. Sin embargo, esta valiosa
información no ha podido ser llevada todavía a un nivel de análisis que –
escapando de lo puramente fenomenológico-, pueda medir objetivamente
los resultados de las prácticas médicas tradicionales en términos de eficacia
y cobertura del sistema.
Tampoco existen en nuestro país, los estudios comparativos entre la
diversidad de “formas” tradicionales y entre éstas y la medicina occidental,
en relación a lo que la gente entiende sobre salud y enfermedad, sus causas
y sus formas de tratamiento; lo que hace con respecto a la preservación y
la recuperación de su salud y la del medio ambiente; y, la eficacia de los
recursos curativos, procedimientos y rituales.
La casi totalidad de los estudios existentes, están referidos a determinadas
áreas geográficas o a determinadas “formas” que innegablemente han
contribuido a demostrar su vigencia y su importancia. Pero aún, no se han
ensayado estudios que permitan entender la interrelación que existen entre
la diversidad de formas tradicionales, y entre éstas y la llamada medicina
occidental; la forma y el grado como éstas se integran y reelaboran en las
grandes aglomeraciones urbanas, como resultado de los movimientos
migratorios; ni como, dentro de nuestra realidad concreta, la integración de
ambos sistemas, pueda permitirnos la construcción de un modelo o una
estrategia intermedia entre una tradicionalidad y una medicalización
extremas a ultranza.
Es evidente, decíamos en aquella oportunidad, como parte de la
justificación de tres proyectos que presentamos a INMETRA23
,24
, que la
comprensión cabal del papel que juega la Medicina Tradicional, en el mundo
actual, depende de un conocimiento más exacto de la evolución por la que
han atravesado los trabajos de investigación en esta materia. Ello, debido a
que, a pesar de la explosión bibliográfica surgida a partir de la década de
los 70, aún hay algunos vacíos importantes que es necesario superar. Este
intento, consecuentemente, además de permitirnos ampliar el conocimiento
sobre el saber popular en cuanto a prácticas médicas tradicionales, debe
permitirnos conocer entre otros aspectos: quiénes y dónde, con qué alcance
22
Valdizán, Hermilio y Maldonado, Ángel. La Medicina Popular Peruana. Contribución al folklore médico del Perú. Lima,
Torres Aguirre, 1922. 3 Tomos.
23
[1] Primer Inventario Nacional de Investigaciones Puras y Aplicadas sobre Medicina Tradicional. [2] Estudio
Comparativo de Etnomedicina Latinoamericana. [3] Compilación y difusión de material bibliográfico sobre Medicina
Tradicional. Octubre 1998.
24
El Instituto Nacional de Medicina Tradicional – INMETRA se crea como Organismo Público Descentralizado del
Ministerio de Salud, mediante el Decreto Legislativo No. 584, Ley de Organización y Funciones del Ministerio de Salud
y el Decreto Supremo No. 002-92 SA, Reglamento de Organización y Funciones del Ministerio de Salud.
18. Hugo E. Delgado Súmar
y profundidad, y con qué motivaciones y tendencias, han participado o
participan en lo que podríamos llamar, esta “tarea de rescate”.
Para mejor sustentar dichos proyectos, que nunca recibieron financiamiento
oficial y que lamentablemente nunca fueron concluidos, tomamos de
Pedersen25
las siguientes afirmaciones, respecto al estado de las
investigaciones sobre Medicina Tradicional en América Latina y El Caribe:
1. Un número significativamente alto (más del 50%), son autores
norteamericanos y, entre los autores latinoamericanos, los más
significativos en orden de producción, destacan mexicanos y peruanos.
2. La distribución de los estudios por países y áreas es muy asimétrica, y
en ella, el Perú aparece con apenas del 10 – 15% de las
investigaciones realizadas en el continente.
3. Un número elevado de los trabajos de investigación, tienen
fundamentalmente un enfoque botánico-farmacológico que ha
permitido ampliar la farmacopea moderna a expensas de las plantas
medicinales, el consiguiente enriquecimiento de la industria y el
comercio farmacéutico y el debilitamiento de las prácticas médicas
tradicionales.
4. Los estudios son mayormente descriptivos y con enfoque cientifista,
desde una perspectiva externa y a partir de la “concepción positivista
de una ciencia universal, empírica, atemporal y libre de valores”26
, y al
margen de la validez que la medicina tradicional tiene para sus propios
actores.
5. El enfoque culturalista, ha dado como resultado excelentes trabajos
etnográficos, con tendencia en el estudio de los shamanes y grandes
curanderos, restando atención a otro tipo de curanderos y prácticas,
existentes en el continente.
6. No existen trabajos de medición objetiva de los resultados de las
terapias, y se enfatiza sistemáticamente las dimensiones místicas,
simbólicas y cosmológicas de la medicina tradicional, provocando el
surgimiento de “un modelo antitético o de oposición con la
interpretación biomédica convencional sobre la salud y la enfermedad”.
6. Finalmente, entre otras muchas consideraciones más, se señala la casi
inexistencia de estudios comparativos; y consecuentemente, la
escasez de información sobre el comportamiento de la población con
25
Pedersen, D. [1] Salud y Culturas Médicas Tradicionales en la América Latina y El Caribe, 1983. [2] Salud y Culturas
Tradicionales en América Latina y el Caribe. Ponencia del 7o. Seminario-Taller "Sistemas Tradicionales de Salud en el
Perú", Lima, 1984.
26
García, Juan César, ´´Medicina y Sociedad: las corrientes del pensamiento en el campo de la salud´´. Educación
Médica y Salud, Vol. 17, Nº 4, 1983.
19. Hugo E. Delgado Súmar
respecto a la conservación y recuperación de la salud, entre distintos
grupos, con relación a distintos sistemas médicos. Etc.
Casi 18 años después, la realidad no ha cambiado sustantivamente:
Hay más Escuelas de Antropología en la Universidad Peruana y muchas
de ellas ya han comenzado a incorporar dentro de sus programas las
asignaturas de Antropología Médica o Antropología de la Salud;
Hay un número significativo de cursos de pre y postgrado de medicina
tradicional, etnomedicina, antropología de la salud y antropología de la
salud reproductiva transversalizando los programas de estudios de las
distintas profesiones médicas y paramédicas.
Hay una mayor “apertura” de las instituciones públicas relacionadas
con la salud, respecto de la Medicina Tradicional y las llamadas
Medicinas Complementarias y Alternativas.
Hay cada vez más ONG dedicadas a la salud, con una perspectiva
intercultural.
I como en la década de los 70, hay una nueva explosión bibliográfica
sobre estos temas.
Sin embargo, creo no equivocarme:
Las medicinas tradicionales, siguen teniendo un carácter marginal, en
los programas de estudio y en los programas de trabajo de las
instituciones, debido fundamentalmente a que el personal a cargo, en
la mayoría de los casos, no son especialistas en esta área, no cuentan
con apoyo o no disponen de recursos presupuestales.
Los estudiantes –de todos los niveles- también las asumen con
carácter marginal debido al peso específico que tiene el discurso de la
medicina hegemónica en el proceso de formación profesional.
Los estudios de especialidad o postgrado, en la mayoría de los casos,
tiene una fuerte motivación administrativa y no académica debido a las
exigencias legales para el ejercicio de la docencia o el ejercicio de un
cargo burocrático, lo que de por sí, también los convierte en
marginales.
No menos del 80% de la bibliografía que circula en nuestro medio,
está constituido por tesis, libros y artículos que en esencia sólo son
“revisiones”, y no producto de investigaciones de cara a la realidad.
Muchas de estas publicaciones, tienen como característica esencial la
generalización, con el consiguiente reduccionismo del conocimiento.
20. Hugo E. Delgado Súmar
Los sílabos de las asignaturas, en la mayoría de los casos privilegian
las llamadas medicinas complementarias y alternativas, en desmedro
de las medicinas tradicionales; privilegian algunas pocas terapias
orientales en desmedro del rico acervo que sobre los mismo tópicos
tienen las medicinas andino-amazónicas; y entre muchos otros
aspectos, independiente del nombre, naturaleza, alcance, nivel y
orientación de las asignaturas, la mayoría de ellas usan la misma
bibliografía “copiada en forma de plantilla”.
Los trabajos prácticos y las investigaciones que forman parte de las
exigencias de las asignaturas, en el 90% de los casos constituyen
“copia fiel del original”.
Los hechos que es necesario reconocer:27
Para resolver los problemas de salud en el país, antes de proceder a la
construcción un nuevo modelo, se hace necesario, en primera instancia,
reconocer:
1. Que todas las previsiones en materia de crecimiento poblacional,
orientadas a convertir al año 2000 en “una divisoria natural, a partir de
la cual las adiciones de población irían disminuyendo substantivamente
hasta estabilizarse en el año 3000, cuando las diferentes regiones del
mundo logren disminuir sus índices de fecundidad a un nivel de
reemplazo”, han fracaso. (Hecho éste reconocido en la Conferencia
Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD) celebrada en El
Cairo en 1994).
2. Que el acelerado proceso de urbanización que vivimos ha provocado
que más de la mitad de la población actual viva en ciudades, y que en
casos como el de América Latina, este porcentaje abarca a más del
70% de la población. Que la población restante, de carácter rural,
altamente dispersa, se caracteriza por la pobreza, la marginación, la
aculturación, el analfabetismo, el desempleo, las carencias de tierras y
territorio.
3. Que ningún país, incluyendo los llamados Industrializados, ha sido
capaz de resolver los problemas de cobertura de sus servicios de salud
y los problemas de accesibilidad (económica, física y cultural) de sus
poblaciones a dichos servicios.
4. Que ningún sistema médico, incluyendo la Medicina Académica, ha
sido capaz de resolver por sí solo, todos los problemas de salud de la
población.
También se hace necesario reconocer:
27
“La Reivindicación de la Medicina Tradicional”. Conferencia dictada en el Seminario “Las Otras Medicinas y la Salud
Ambiental”. Colegio Médico del Perú, INAPMAS, EsSalud. Lima. 28-30.05.2001.
21. Hugo E. Delgado Súmar
5. Que la llamada Medicina Tradicional constituye un Sistema Médico
como cualquier otro.
6. Que en 1996 la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que de
65 a 80% de la población mundial utiliza productos de la medicina
tradicional para cuidar su salud.
7. Que el informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS),
emitido al término de la Tercera Evaluación de la Estrategia SPT2000,
de manera muy elocuente reconoce, entre otros muchos aspectos,
que:
Los avances han sido dirigidos a mejorar las coberturas, pero
continúan las necesidades de acceso a la población debido a
limitaciones de diversa índole. ...
Las necesidades de financiamiento y de otros recursos han sido
vistos como una limitante para expandir y mantener los
programas de salud.
Muchos países tienen la expectativa en que la descentralización y
un mayor involucramiento de la comunidad a niveles locales
podrían contribuir a la sostenibilidad de las actividades. ...
Hay un aumento en la importancia de las enfermedades crónicas
y las discapacidades. Enfermedades como la tuberculosis, el
dengue o la malaria, siguen manteniendo o incrementando su
peso en la Región. Aunque algunos indicadores han mejorado,
todavía persisten grandes brechas entre los países y entre
comunidades o grupos sociales y dentro de cada uno de ellos,...".
Igualmente, se hace necesario recordar:
8. Que, en la Consulta Internacional sobre antropología médica y
sistemas de curación alternativos, celebrada en Suraj Kund, cerca de
Nueva Delhi, en febrero de 1996, se coincidió en señalar que "Los
sistemas tradicionales de medicina, marginados en la carrera hacia la
secularización y la modernización, están recuperando lentamente el
lugar central que ocupaban antes de que se los hiciera desaparecer sin
miramientos", y que, "durante el período en que estuvieron
amenazados, los sistemas tradicionales nunca sucumbieron. Se
mantuvieron simplemente fuera del dominio público, sin dejar de ser
accesibles para quienes buscaban formas de medicina tradicionales.
Ahora no se trata ya de permitir simplemente el regreso de la medicina
tradicional; se está procurando que vuelva a ocupar su lugar en el
ámbito público".
Finalmente, hay que recordar:
9. Que en países como el nuestro:
22. Hugo E. Delgado Súmar
Enfrentamos una explosión demográfica que desborda nuestras
capacidades de subsistencia y que consecuentemente hace
colapsar los servicios básicos indispensables para la reproducción
social de nuestro pueblo.
El sistema oficial de salud, costoso en su implementación y su
funcionamiento, de estructura eminentemente urbana, de
carácter fundamentalmente reparativo, impersonal y
despersonalizador, ha fracasado, en términos de cobertura y de
accesibilidad, condenando a la marginalidad con respecto a los
servicios oficiales a más del 40% de la población.
Como en la casi totalidad de culturas del mundo, los sistemas
tradicionales han resistido, terca y tenazmente, los procesos de
dominación "sin dejar de ser accesibles" para los sectores
mayoritarios de la población; y sin por ello dejar de ser sensibles
a la introducción de elementos de la medicina académica, por los
procesos de mercantilización económica, movilidad social y
"mestizaje" cultural.
Finalmente, como en cualquier otra realidad, la medicina
tradicional constituye un sistema del que forman parte muchas y
numerosas tradiciones, en permanente interacción e integración,
provocando como resultado de ello, un permanente proceso de
reelaboración de "medicinas alternativas" acordes con cada
realidad local.
En este marco, hablar de las Medicinas Tradicionales, su reivindicación y
consecuente articulación, exige hablar de reivindicación de la cultura
andina; pues, el sistema médico tradicional forma parte indesligable de un
complejo mayor, que responde a la percepción holística que hombre andino
tiene de su realidad.
Reivindicar el Sistema Médico Tradicional en nuestro país, y en todos los
países tercermundistas implica, a mi criterio, tres aspectos básicos:
El Primero, sobre la base del reconocimiento de que somos un país
multicultural, plurilingüe y multiétnico, que ninguna acción de desarrollo
humano que emprendamos puede ser ni eficaz ni eficiente si no la
desarrollamos en el marco de la Interculturalidad.
El Segundo, implica pasar de las declaraciones líricas, de los compromisos
políticos y de los acuerdos internacionales a los hechos concretos, tangibles,
que hagan posible que de manera definitiva la salud sea un derecho
universal, utilizando para ello todos los recursos de los que dispone el
sector. Esto implica, como ya se señaló en múltiples oportunidades, una
política y un accionar intercultural.
23. Hugo E. Delgado Súmar
En este aspecto, la relación de convenciones, acuerdos, declaraciones y
recomendaciones de nivel multilateral en las que ha participado el país,
como parte interesada es extensa. Una breve revisión de ellos nos mostrará
la magnitud de nuestra inacción como país. (Ver anexo)
El Tercero, implica reconocer:
Que una política y un accionar intercultural no se puede realizar sin
interlocutores válidos.
Que dichos interlocutores son por su propia naturaleza
fundamentalmente los especialistas de ambos sistemas: el personal
médico y paramédico de la llamada medicina académica y los
curanderos de la llamada medicina tradicional.
Que dichos interlocutores para hacer válida una relación intercultural
deben conocer las potencialidades y limitaciones de sus propios
sistemas y de los sistemas con los cuales están interactuando.
Que, consecuentemente, los interlocutores del sistema académico,
para poder actuar interculturalmente, requieren urgente y
perentoriamente, conocer los sistemas médicos tradicionales, su
substrato cultural y la cosmovisión en la que se asientan.
Sólo a partir de un profundo conocimiento de la cultura de la que forma
parte una tradición médica, de la manera como la gente de esa cultura
concibe su cuerpo, la enfermedad y la salud, los procesos y los recursos
curativos, será posible ensayar un proceso de intercambio de conocimiento
y experiencias que haga, en la práctica, la creación de un modelo médico
acorde con nuestra realidad.
Para ello, se hace necesario, urgentemente necesario, la incorporación de
tópicos en la formación profesional de los estudiantes de Ciencias de la
Salud, que les otorgue la suficiente comprensión de la realidad plural en la
que van a trabajar. De igual modo, se hace igualmente necesario, la
implementación de programas de capacitación de los especialistas
tradicionales para acercarlos a esta “modernidad” de la que queremos
formen parte. Ambas cosas, en el marco de un indiscutido respeto por la
cultura de los individuos.
"la realidad nos muestra, pues, que el hombre tanto no
adquiere todo lo nuevo que se le ofrece o desecha o conserva
todo lo viejo de su patrimonio, como no perpetúa, inmoviliza o
torna inmutable lo nuevo que ha adquirido, o lo viejo que ha
conservado. El Proceso de desarrollo humano resulta así,
también, una perpetua tarea de selección, de transformación"
(Morote Best28
)
28
Sobre Folklore. Discurso inaugural pronunciado en el VII Congreso Nacional de Folklore, Cusco 1984.
37. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 1
LAS PLANTAS MAESTRO
Delgado Súmar, Hugo E. Tratado de Etnomedicina Peruana. 4 vol. Edición Digital. Lima,
2013.
1. Las Plantas Sagradas
La Coca
Coca, íípi, ipadú, jubiro,
kkoka, motelo caspi, murcu
varilla, puca llaja, puetsatpan,
shatona, urdu ingaina
Erythroxylum coca
Erythroxylum bolivianum
Erythroxylum chilpei
Otorga capacidad
adivinatoria. Constituye el
símbolo de comunicación con
el mundo de las divinidades
andinas.
2. Las Plantas Maestras
La Ayahuasca
Ayahuasca, amarron huasca,
añushi huasca, ayahuasca
amarillo, ayahuasca blanco,
ayahuasca negro,
ayahuascam, ayawasca,
bejuco bravo, cayapi, cielo
ayahuasca, daten, ijona, inde
huasca, kamalampi, kayapi,
lluasca, mado, mado bidada,
napi, natema, natemoni,
nepe, nishi, nucñu huasca,
oni, punga huasca, rambi,
rami, rami wetsem, shillinto,
shimbaya huasca, shuri, shuri
fisopa, shuri oshinipa, undi,
yagé.
Banisteriopsis caapi
Banisteria caapi
Banisteria inebrians
Banisteria quitensis
Banisteriopsis inebrians
Banisteriopsis quitensis
Limpia el “cuerpo-mente”.
Permite el acceso
transpersonal.
Ayahuasca, yagé. Banisteriopsis elegans
Banisteria elegans
Ayahuasca, yagé. Banisteriopsis longialata
Banisteria longialata
Ayahuasca, chacruna, huayra
mucro.
Banisteriopsis rubsyana
Chali panga huasca,
ayahuasca, chacruna,
chagropanga, huayra mucro,
oco yagé, yaco ayahuasca,
yageúco, yagé.
Diplopterys cabrerana
Banisteriopsis cabrerana
Banisteriopsis rusbyana
[a] hojas asociadas a la
ayahuasca y [b] tallos y hojas
asociadas a la ayahuasca y la
chacruna (Psychotria viridis)
para lograr mejor visión y
llegar a conocer el causante
de la enfermedad y la manera
de curar, y para conocer el
lugar propicio para la cacería
y la pesca.
38. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 2
El Sanpedro
Achuma, huachuma,
sanpedro, wachuma
Trichocereus Pachanoi
Echinopsis pachanoi
Limpia el “cuerpo-mente”.
Permite el acceso
transpersonal.
La Willka
Curupa, cohoba, jatax,
kurupa, hatax, niopa, pashco
colorado, sebil, tessi, yaco
pashaco, yop, yopa, yupa.
Anadenanthera colubrina var.
cebil;
Acacia cebil;
Anadenanthera macrocarpa;
Piptadenia cebil;
Piptadenia hassleriana;
Piptadenia hassleriana var.
fruticosa;
Piptadenia macrocarpa;
Piptadenia macrocarpa fo.
microcarpa; Piptadenia
macrocarpa fo. puberula;
Piptadenia macrocarpa fo.
rupestris;
Piptadenia macrocarpa var.
cebil;
Piptadenia macrocarpa var.
genuina;
Piptadenia macrocarpa var.
plurifoliata; Piptadenia
macrocarpa var. vestita;
Piptadenia microphylla.
Provocan que los
pensamientos y las visiones
se suceden a gran velocidad;
permitiendo la transportación
instantánea hacia otro
universo en un viaje sin
tiempo. Se utilizan, en la
preparación del Yopo,
sustancia alucinógena que es
absorbida por la mucosa
nasal para producir estado de
trance, durante los rituales de
curación: semillas tostadas de
Adenanthera mezcladas con
corteza y semillas de
Buchenavia parvifolia,
Pinzona coriaceae,
Astrocaryum sp. y
Banisteropsis caapi.
Piptadenia cuzcoensis.
Piptadenia excelsa.
Piptadenia flava; Acacia flava;
Pityrocarpa flava.
Piptadenia foliolosa.
Piptadenia gonoacantha
Acacia gonoacantha
Piptadenia communis
Pityrocarpa gonoacantha.
Piptadenia killipii
Piptadenia peruviana
Piptadenia adiantoides var.
peruviana.
Piptadenia pteroclada
Piptadenia opacifolia
Piptadenia pteroclada var.
klugii
Pityrocarpa pteroclada.
Piptadenia viridiflora
Acacia viridiflora
Pityrocarpa viridiflora.
Willka, huillca, pashaco,
pashaquillo, yopo.
Piptadenia peregrina
Acacia angustiloba
Acacia peregrina
Anadenanthera peregrina
Mezclada con el Sanpedro:
alteración pronunciada del
campo visual.
39. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 3
Mimosa peregrina
Niopa peregrina
Willka, huilca, Huillca, Angico,
Huayo
Piptademia colubrina Mejora la visión del cazador y
ayuda a descubrir secretos.
Pashaco colorado, yacu
pashaco, cohoba, curupa,
hatax
Piptademia spp. Usos similares a los
anteriores.
La Cracruna
Chacruna, cawa, rami eppe,
rumicaspi, sameruca,
tupamaqui, ucumi micuna,
yagé
Psychotria carthaginensis
Mapouria alba
Psychotria alba
Psychotria foveolata
Uragoga alba
Uragoga foveolata
Como aditivo de la
ayahuasca, colorea las
visiones.
Papáinch, tupamaqui, Psychotria horizontalis
Sananguillo, yagé Psychotria marginata
Yagé, rumo sacha Psychotria stenostachya
Chacruna, cawa, paujil
chaqui, rami eppe,
tupamaqui, yagé
Psychotria viridis
Palicourea viridis
Como alucinógeno, en
decocción, [a] asociada a la
Ayahuasca; [b] asociada a la
Ayahuasca, flores de
floripondio (Brugmansia
arbórea) y hojas de tabaco
(Nicotiana tabacum); y [c]
asociada a la ayahuasca y
hojas de chali panga huasca
(Diplopterys cabreana) para
lograr mejor visión y llegar a
conocer el causante de la
enfermedad y la manera de
curar, y para conocer el lugar
propicio para la cacería y la
pesca.
Yagé, rumo sacha. Psychotria stenostachya Asociado a la Ayahuasca.
3. Aditivos de la Ayahuasca
Aicoro Porophyllum ruderale
Kleinia ruderalis
Tagetes integrifolia
Se usa para adquirir
conocimientos espirituales y
ahuyentar a los espíritus
malignos (Shipibo-Conibo).
Porophyllum ellipticum
Porophyllum
ruderale var. ellipticum
Aguaje, ajuage guacamayo,
áchu, achua, actual, aguachi,
aguashi, ahuaque, binón
(vinón), buritisol, kinema,
maro, mariti, moriche, miriti
Mauritia flexuosa
Mauritia setigera
Mauritia vinifera
40. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 4
Ajosacha, ajo sacha macho,
ajos del monte, be’o-ho, be’o-
ja pusanga, boens, niaboens,
posatalu, sacha ajo,
shansque boains.
Mansoa alliacea
Adenocalymma pachypus
Anemopaegma pachypus
Bignonia alliacea
Pseudocalymma alliaceum
Pseudocalymma pachypus
Limpia el cuerpo. Proporciona
seguridad, energía y
protección. Mantiene alerta al
cazador.
Ajo sacha, sacha ajo, vova Mansoa hymenaea
Bignonia hymenaea
Ajo sacha, ajo macho Mansoa standleyi
Pseudocalymma standleyi
Amanga, capinurí, chacruna,
pichico, pichico runtu, raya
caspi, sanango de bajo.
Rudgea retifolia
Rudgea cephalantha
Como aditivo de la
Ayahuasca.
Azucar huayo Hymenaea sp. Da la fuerza y ayuda a recibir
los icaros.
Aya uma, Ayahuma,
Inoashtan, Inticaspi
Couroupita amazónica
Couroupita subsessilis
Hace soñar.
Aya uma, Ayahuma, Couroupita guianensis Baños rituales.
Barbasco, barbasco de
monte, barbasco legitimo,
barbasco ordinario, barbasco
silvestre, barbasco amarillo,
capeten huarahuasco, conapi,
coñapi, cube, cube barbasco,
cube de almidon, cube rumi
barbasco, cube rumu, haxa,
huasca barbasco, kumu,
kkupe, mats, muujcúrriwa,
olla vieja, pacai, sacha
barbasco, timbó, timbó
legítimo, xata.
Lonchocarpus Nicou
Derris nicou
Robinia nicou
Su consumo ritual permite al
shaman adquirir
conocimientos espirituales.
Bobinsana, quinilla blanca,
capazo, buhsiglla
Calliandra angustifolia Para mantenerse centrado en
el nivel espiritual.
Cacao, cacahua, cacahua
caspi, cacahuillo, cacao
arisco, cacao común, uchpa
cacao, ccahua.
Theobroma cacao Es considerada planta
maestro y se usa como aditivo
del tabaco. El humo de las
semillas quemadas para
ahuyentar a los malos
espíritus.
Cacao, cacahuillo, ceniza,
cumala, mapanaha,
Theobroma subincanum Alucinógeno. Se usa como
aditivo del tabaco.
Camori huaste Cyperus sp. Para adquirir, el curandero,
fuerzas psicológicas y
espirituales.
41. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 5
Catahua, catahua amarilla,
catahua blanca, aná, arceira,
asacú, caman, caraja, josho
ana
Hura crepitans
Hura brasiliensis
Hura senegalensis
Asociado a la Ayahuasca.
Cetico, amaiba, amiwa,
bocon, bacum, cariche,
covaaya, choyo, huarocaha,
mamiiro, mañiiro, oncana,
pungara, satiica, satik, setico,
setico de hoyada, tacuna,
umbooba, xancon, yoclu.
Cecropia distachya Huber Entre los Ocainas [Ríos
Yaguasyacu, Ampiyacu,
Putumayo y Algodón (Perú) y
Apaporis, Caquetá y
Putumayo (Colmbia)], en las
sesiones chamánicas, se usa
como alucinógeno una mezcla
de ceniza de cetico y coca
molida.
Cecropia engleriana Snethl.;
Cecropia yarinensis Cuatrec.
Cecropia ficifolia
Cecropia ferreyrae
Cecropia standleyi
Cecropia herthae
Cecropia latiloba
Cecropia litoralis
Cecropia membranacea
Cecropia setico
Cecropia tessmannii
Cecropia polystachya Trécul;
Cecropia flagellifera Trécul;
Cecropia klotzschiana Miq.;
Cecropia leucophaea Miq.;
Cecropia nivea Klotzsch;
Cecropia pinnatiloba Klotzsch;
Cecropia ruiziana
Klotzsch; Cecropia scabra
Klotzsch
Cecropia putumayonis
Cuatrec.
Cecropia sciadophylla
C.Mart.; Cecropia inchuensis
Cuatrec.
Clavo caspi, casha caspi,
espina(o), espuela casha,
tacón chimapo,
Randia armata Asociado a la Ayahuasca
Cumala Blanca Virola calophylla
Myristica calophylla
Alucinógena. Corteza interna
en polvo, como aditivo de
otras plantas (Boras del río
Ampuyaco.
Virola sebifera
Virola elongata. Alucinógena. Corteza interna
en polvo, como aditivo de
otras plantas.
Virola pavoni.
Virola suranimensis.
Virola theiodora Rapé con theobroma con
parte interna de la corteza.
Boras y witotos pasta sola.
Chagropanga, yágr. Diplopteris cabrerana Asociado a la Ayahuasca para
mejorar la visión.
42. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 6
Chamico Datura inoxia
Datura meteloides
Enloquece a las personas.
Chamico, chamico relleno Datura metel
Datura alba
Datura fastuosa
Datura fastuosa var. alba
Chamico, cojón del diablo,
quilla sacha, tonco tonco
Datura stramonium
Chiric sanango Brunfelsia australis
Brunfelsia bonodora
Como aditivo de la ayahuasca
y el Sanpedro, permite la
conexión con el yo interior.
Chiric sanango, chiricaspi Brunfelsia chiricaspi
Chiric sanango, chiricaspi,
borrachero, chacruco,
chuchuwasa, moca pari
Brunfelsia grandiflora
Chiric sanango, moca pari,
potsutsuru.
Brunfelsia latifolia
Chonta quiro Diplotropis spp. Da fuerza.
Chuchuhuasi, tonipulmón Maytenus guyanensis Refuerza el cuerpo.
Chuchuhuasi, chuchuhuasa,
chuchuhuasca
Maytenus krukovit
Chuchuhuasi, chuchuhuasa Maytenus laevis
Chullachaki caspi Brysonima christianeae Da fuerza.
Floripondio, baikúa,
borrachera, campacho,
saharu, toe
Brugmansia arbórea
Datura arbórea
Permite ver el futuro y da
sabiduría para poder curar.
Floripondio, almizclillo,
campanilla, campachu
Brugmansia cándida
Datura cándida
Floripondio, Floripondio
blanco
Brugmansia cornigera
Datura cornigera
Floripondio colorado,
floripondio rojo,
Campanchu, guar guar, puca
campachu, puca campanilla
Brugmansia sanguínea
Datura sanguínea
Floripondio rosado, aiiapa,
borrachera, chochopana,
chuchupanda, haiiapa,
maikoa, maricahua, toe, xupú,
wahashupa
Datura suaveolens
Brugmansia suaveolens
Floripondio, Toe, Tsuak. Datura insignis
Brugmansia X insignis
Brugmansia insignis
El espíritu del TSUAK habla y
canta por medio del enfermo,
dando el diagnóstico y
curándose él mismo
(Aguaruna).
43. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 7
Hoja del fantasma, planra
del fantasma.
Schefflera Sprucei
Schefflera klugii
Sciodaphyllum sprucei
Se ingiere para provocar
mediante el vómito la
expulsión de los "fantasmas"
del cuerpo, antes de proceder
a la toma del "yaje"
(Banisteriopsis caapi).
Huacapú, huacapo, guacopú,
machimango blanco hoja
grande.
Eschweilera gigantea
Chytroma gigantea
Chytroma mexiana
Eschweilera mexiana
Lecythis gigantea
Se utiliza para llevar a cabo
purgas antes de la curación
chamánica, mediante la
ingesta de la corteza cruda
machacada mezclada en
agua.
Huairoro, huairuro, huayruro,
sshepossh
Ormosia coccinea
Ormosia subsimplex
Robinia coccinea
Limpia el cuerpo.
Huayusa, huayusa de la
altura, guayusa.
Ilex guayusa Las hojas se añaden a la
decocción de Ayahuasca
(Banisteriopsis caapi) para
clarificar las visiones.
Icoja, bari rao, cara huasca,
icoje, sampamashato, tortuga
caspi amarillo, yana vara.
Guatteria spp. Para los Shipibo-Conibo la
BARI RAO o Medicina del Sol
es considerada planta
MAESTRA porque permite a
los curanderos "ver", "saber" y
"poder".
Lupuna, lupuna blanca,
casha lupuna, ceiba, huimba,
lupina, fuma, huaqui, toxapu,
xono
Ceiba pentandra
Ceiba anfractuosa
Ceiba casearia
Ceiba caribaca
Ceiba guineense
Permite el contacto con los
espíritus de los ancestros.
Lupuna roja, puca lupuna,
aton (shp), embirana, pretino
Cavanillesia hylogeiton
Mucura, mucura hembra,
mucura macho, bana boains,
chanviro, dahuata, micuna,
mocosa, niwis, sacha ajo
Petiveria alliacea Mejora la memoria, enseña a
curar y da protección.
Miya Phrygilanthus eugeniodes
Picuro sacha, picurullun
quina, picurullun sisa, písijuk
Alternanthera mexicana
Alternanthera lanceolada
Alternanthera lehmannii
Asociado a la ayahuasca
Marosa Alternantheraglauca
Pfaffia irisinoides
44. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 8
Matapalo, benenoi. Clusia sp. Adquirir fuerzas psíquicas y
espirituales.
Pijuayo, banin, birijari matto,
chonta, chontaduro, chonta
ruru, huanin, juani, meéme,
panni, pejibaye, pifaya,
pifayo, pifuanyo, pish guayo,
poporr, puca pijuaio,
pupunha, sara pifuayo, uyái.
Bactris Gasipaes
Bactris ciliata
Guilielma ciliata
Guilielma gasipaes
Guilielma microcarpa
Guilielma speciosa
Martinezia ciliata
Los Shipibo-Conibo la
consideran planta MAESTRA
por sus poderes mágicos.
Renaquillo, renaquilla, nishi
shona.
Ficus caballina Standl. Adquirir la técnica de Huesero
(Shipibo-Conibo).
Sacha caspi, dupi, ihuain,
sacharuna caspi, palo del
diablo, supai caspi, supay
chacra, sumai quinilla
Duroia hirsuta Aditivo del Ayahuasca.
Sacharuna -- Aumenta el nivel de energía y
el poder de curar.
Sananguillo, yagé. Psychotria marginata Se usa como aditivo de la
Ayahuasca y sirve para
colorear las visiones.
Shihuahuaco Dipteryx alata Acelera la “mareación”;
permite viajar “a todo sitio”;
protege el cuerpo del
curandero de la brujería.
Yarinilla, shoca, dsuii-teit-
seperi, rabo de mono, shino
gina, shoka.
Lomariopsis japurensis
Acrostichum japurense
Stenochlaena japurensis
Aditivo del Ayahuasca.
Shilinto, shilento, supay
huasca
Mascagnia glandulifera En algunas comunidades
campa y shipibo-conibo
(Perú), záparos (Ecuador) y
tucanos (Colombia) se utiliza
como aditivo de la Ayahuasca
en presencia o no de
Psychotria viridis, para hacer
el viaje por la Vía Láctea.
Mascagnia psilophylla
Mascagnia psilophylla var.
antifebrilis
Mascagnia psilophylla fo.
peruviana
Callaeum antifebrile
Tabaco, sairi Nicotiana tabacum Regula la energía, protege y
da sabiduría para poder curar.
45. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 9
Tahuarì Tabebuia heteropoda Da protección y enseña
ícaros.
Tamamuri, huayra caspi
(wayra caspi), imparinaqui,
joshin jihue, mishochaqui,
palisangre,
Brosimum guianense
Brosimun aubletii
Brosimun Tessmannii
Piratinera guianensis
Sola o asociada con tabaco,
para adquirir conocimiento
como vegetalista.
Moruré (mururé), congona,
manichi, mercurio vegetal,
tamamuri.
Brosimum acutifoliun subsp.
obovatum
Aditivo de la Ayahuasca, para
adquirir conocimiento como
vegetalista.
Toe, baikoa, dona, salvea,
shingore, tal, ulape.
Cornutia odorata
Hosta odorata
Se emplea para obtener la
visión del AJUTAP: Espíritu
de los antepasados o para
llegar a ser BIKUT: hombre
que ha alcanzado el grado
superior del conocimiento.
(Aguaruna).
Toe negro. Teliostachya lanceolata
Lepidagathis lanceolata
Aditivo de la Ayahuasca para
purgas.
Trompetero sacha, parapra. Rinorea Víridiflora Aditivo de la Ayahuasca para
hacer las visiones más
duraderas.
Tuna, chai-pei, higo chumbo,
pupa, tuna warako, winka.
Opuntia ficus-indica
Cactus ficus-indica
Entre los Shipibo-Conibo es
considerada una planta
MAESTRA por poseer
poderes mágicos.
Uchu sanango, chiric
sanango, jaen sanango,
kúnakip, lagarto micunan,
lagarto sanango, lobo
sanango, sanango, sanango
macho, sananguillo,
tahuampa, tsiikay, xacu
sanango, yacu sanango
Tabernaemontana sananho;
Bonafousia sananho
Es considerada planta
MAESTRA que otorga poder
físico y psíquico. Está
considerada una planta
MECHATI RAO y RAYATI
RAO, en el primer caso es
utilizada para ser un buen
pescador o cazador, y en el
segundo, para intensificar el
trabajo agrícola de los
hombres.
Uchu sanango, uchpa
sanango, nane repoti,
sanango
Tabernaemontana undulata
Bonafousia undulata
Ushpawasha sanando - Abre la memoria afectiva.
Velo de la novia (orchidaceae) Asociado con Toe y
Ayahuasca atrae con su canto
a las mujeres. Da fragancia.
46. Hugo E. Delgado Súmar
Pág. 10
Yana huarango; cumala
amarilla, cumala colorada,
cumala negra, hiboucouhu,
jabón huasa, mamo, pucuna,
tomoro jidsadsa, yimona.
Virola spp. Como aditivo de la
Ayahuasca.
Yutubanco, shanin beshpe Heisteria duckei Se bebe para adquirir
conocimientos espirituales
(Shipibo Conibo)
47. Hugo E. Delgado Súmar
ACUERDOS Y DECLARACIONES INTERNACIONALES
1. CONVENCIÓN DE PATZCUARO. MÉXICO, 1940.
Creación del Sistema Indigenista Interamericano, como instrumento
eficaz de colaboración para dilucidar y resolver el problema
indígena, estimulando y coordinando la política indigenista y las
acciones para mejorar de manera integral las condiciones de vida de
la población indígena en toda América.
2. PACTO SOBRE DERECHOS CIVILES Y POLÍTICOS. 1966
“En los estados en que existan minorías étnicas, religiosas o
lingüísticas, no se negará a las personas que pertenezcan a dichas
minorías el derecho que les corresponde, en común con los demás
miembros de su grupo a tener su propia vida cultural, a profesar y
practicar su propia religión y su propio idioma”.
3. CONVENIO 107 DE LA ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DEL
TRABAJO (OIT). 1957
“Las poblaciones indígenas tienen derecho a la igualdad con todos
los ciudadanos del país”. Adicionalmente reconoce de manera
específica: el derecho colectivo a la tierra, el derecho a la educación
en lengua materna y el derecho de las comunidades a resolver sus
conflictos de acuerdo a la tradición y a la costumbre.
4. CONVENIO 169 DE LA ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DEL
TRABAJO (OIT) SOBRE PUEBLOS INDÍGENAS Y TRIBALES EN
PAÍSES INDEPENDIENTES. 1969.
Recoge la noción de pueblo asumida colectivamente cuyo principal
derecho colectivo constituye el territorio, entendido como el
conjunto de recursos naturales, geográficos, culturales, míticos y
religiosos, que hacen su cosmovisión y aseguran su supervivencia.
Parte V: seguridad social y salud:
Los gobiernos deberán velar porque se pongan a disposición de los
pueblos interesados servicios de salud adecuados o proporcionar a
dichos pueblos los medios que les permitan organizar y prestar tales
servicios bajo su propia responsabilidad y control, a fin de que
puedan gozar del máximo nivel posible de salud física y mental.
5. TRATADO DE COOPERACIÓN AMAZÓNICA – TCA. 1978.
Realizar esfuerzos conjuntos entre los países contratantes para
promover el desarrollo armónico de sus respectivos territorios
amazónicos, de manera que las acciones conjuntas produzcan
resultados equitativos y mutuamente provechosos, así como para la
48. Hugo E. Delgado Súmar
preservación del medio ambiente y la conservación y uso razonable
de esos territorios.
6. CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE ATENCIÓN PRIMARIA DE LA
SALUD. ALMA-ATA. 1978.
En el marco de la Atención Primaria de la Salud, estrategia definida
como objetivo del proyecto “Salud para todos en el año 2000”,
sobre la base del reconocimiento de su importancia y de su
contribución al mantenimiento de la salud de los pueblos, la
Medicina Tradicional es incorporada como un nivel primario
(comunal) de los sistemas oficiales de salud.
7. LA CARTA DE OTTAWA. 1986.
Define la Promoción de la salud como “el proceso de habilitar a la
gente para aumentar su control sobre la salud y para mejorarla...
Para alcanzar un estado de bienestar físico, mental y social un
individuo o un grupo debe ser capaz de identificar y realizar sus
aspiraciones, se satisfacer sus necesidades y de cambiar o
adaptarse al medio ambiente”. Así pues, la promoción no debería
limitarse a fomentar estilos de vida saludables, sino llegar hasta lo
que son las condiciones fundamentales y los recursos para la salud
“la paz, el albergue, la educación, el alimento, el ingreso, un
ecosistema estable, recursos sostenibles, la justicia social y la
equidad”.
8. LA CUMBRE DE LA INFANCIA. NEW YORK, 1990.
Sobre la base del nuevo concepto generado en Ottawa, coloca como
prioridad la atención a la salud infantil.
9. CUMBRE DE LA TIERRA. 1992.
Los estados admitieron la necesidad de reconocer que las
poblaciones indígenas tienen valores, territorios, conocimientos
tradicionales y derecho a la subsistencia; admitieron sus
conocimientos ecológicos y agrícolas como vitales para la promoción
del desarrollo sostenible.
10. CONVENIO CONSTITUTIVO DEL FONDO PARA EL DESARROLLO DE
LOS PUEBLOS INDÍGENAS DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE. 1992.
Objetivo general:
Apoyar los procesos de autodesarrollo de los pueblos, comunidades
y organizaciones indígenas de América Latina y el Caribe y orientar
acciones, estrategias, formas propias y autónomas de organización
de los pueblos indígenas en todos sus niveles.
49. Hugo E. Delgado Súmar
11. CONVENIO DE LA BIODIVERSIDAD BIOLOGICA. 1992.
Art. 8:
Con arreglo a su legislación nacional, respetará, preservará y
mantendrá los conocimientos, las innovaciones y las prácticas de las
comunidades indígenas y locales que entrañen estilos tradicionales
de vida pertinentes para la conservación y la utilización sostenible
de la diversidad biológica y promoverá su aplicación más amplia,
con la aprobación y la participación de quienes poseen esos
conocimientos, innovaciones y prácticas, y fomentará que los
beneficios derivados de la utilización de esos conocimientos,
innovaciones y prácticas se compartan equitativamente.
12. DECENIO INTERNACIONAL DE LAS POBLACIONES INDÍGENAS DEL
MUNDO, 1994–2004.
1993: La Asamblea General de las NN.UU. Proclamo el año 1993
como “Año Internacional de las Poblaciones Indígenas del
Mundo”.
1994: La Conferencia de las NN.UU. sobre Derechos Humanos,
recomendó la conversión del Año Internacional en
“Decenio Internacional de las Poblaciones Indígenas del
Mundo”.
13. CUMBRE DE LAS AMÉRICAS. 1994.
Plan de Acción sobre Erradicación de la Pobreza y la Discriminación
en nuestro hemisferio.
= Acceso equitativo a servicios básicos de salud.
14. CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE LA POBLACIÓN Y EL
DESARROLLO. 1994.
Se reconoció que existe un derecho a la salud, que lleva a los
gobiernos a proporcionar atención a la población de sus países, a
través de programas integrales, en la misma forma que provee de
oportunidades para la educación.
Se afirmo que los derechos reproductivos requieren el respeto de las
condiciones éticas, culturales y religiosas de los estados.
15. REUNIÓN ESPECIAL SOBRE REFORMA DEL SECTOR SALUD. 1995.
Permitió comprobar que se han iniciado procesos de reforma del
sector salud en numerosos países con el objetivo declarado de
proporcionar servicios de salud eficientes y de buena calidad a todos
los habitantes, en respuesta a las necesidades acumuladas y
emergentes de la población en búsqueda de mayor equidad.
50. Hugo E. Delgado Súmar
16. CUARTA CONFERENCIA MUNDIAL SOBRE LA MUJER. 1995.
Numeral 18 de la Declaración de Beijín: Intensificar los esfuerzos
para garantizar el disfrute en condiciones de igualdad de todos los
derechos humanos y libertades fundamentales a todas las mujeres y
niñas que enfrenten múltiples barreras para lograr su potenciación y
su adelanto por factores como la raza, la edad, el idioma, el origen
étnico, la cultura, la religión o la discapacidad, o por pertenecer a la
población indígena.
17. CUMBRE SOCIAL. COPENHAGUE, 1995.
Se reconoce que la pobreza, el desempleo y la desintegración social
son los hechos dominantes del mundo de hoy.
18. RESOLUCIÓN INTERPARLAMENTARIA ENTRE EL PARLAMENTO
ANDINO, PARLAMENTO INDÍGENA Y PARLAMENTO AMAZÓNICO.
1996.
Parte I, numeral 3:
Resalta la necesidad de promocionar la complementación del
conocimiento occidental e indígena en el establecimiento de los
servicios de salud y capacitación de recursos humanos en la
interculturalidad.
Parte II, numeral 9:
Insta a la conformación de un programa conjunto para los
parlamentarios para que en el marco de la reforma del sector salud,
se identifiquen los mecanismos para asegurar la accesibilidad de los
pueblos indígenas a los sistemas de salud.
19. DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS.
1997.
Articulo XII:
Salud y Bienestar, numeral 4: Los estados proveerán los medios
necesarios para que los pueblos indígenas logren eliminar las
condiciones de salud que existan en sus comunidades y que sean
deficitarias respecto a estándares aceptados por la población
general.
20. CUMBRE DE LOS PRESIDENTES. SANTIAGO DE CHILE. 1998.
Capítulo IV del Plan de Acción: Erradicación de la Pobreza y la
Discriminación:
Que con el objeto de promover una mayor participación de la
población indígena en la sociedad mediante el acceso apropiado a la
51. Hugo E. Delgado Súmar
educación, atención de salud, capacitación ocupacional y así mejorar
su estándar de vida, entre otros puntos, los gobiernos:
Ø respaldarán las actividades en el campo de la educación,
procurando el fortalecimiento de la identidad de las poblaciones
indígenas y promoviendo una coexistencia respetuosa entre los
diferentes grupos sociales de las comunidades y estados
Ø promoverán la ampliación de los servicios de educación básica y
media con orientación vocacional, principalmente en las regiones
con alto porcentaje de población indígena.
21. DECLARACIÓN DE LA XII CUMBRE DE JEFES DE ESTADO Y DE
GOBIERNO DEL GRUPO DE RIÓ. 1998.
Numeral 4:
Expresamos nuestra convicción de que los estrechos vínculos
políticos y económicos existentes entre los países de la región;
nuestra profunda identidad histórica y cultural, así como la
cooperación y solidaridad que nos unen, constituyen un importante
patrimonio común que nos permitirá avanzar hacia la consolidación
de una comunidad latinoamericana de naciones”.
53. Hugo E. Delgado Súmar
ACUERDOS Y RESOLUCIONES DE LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE
LA SALUD - OMS
Tomados teniendo en cuenta:
Ø Que la atención primaria de salud no ha alcanzado a la mayor parte
de la población de los países en desarrollo;
Ø Que los sistemas médicos tradicionales constituyen un patrimonio de
la comunidad y desempeñan un papel importante en la prevención,
la promoción y el restablecimiento de la salud;
Ø Que las plantas medicinales utilizadas en los sistemas médicos
tradicionales, encierran un potencial considerable, aunque en gran
parte inexplorado, para la preparación de nuevos fármacos contra
importantes enfermedades que no tienen tratamiento eficaz; y
Ø Que es necesario aprovechar “todos” los recursos disponibles en el
sector salud.
1. RESOLUCION WHA29.72 (MAYO DE 1976). 29a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD:
Por primera vez, llama la atención sobre la importante contribución
que la Medicina Tradicional hace a la salud pública de la comunidad
y la importancia de los Agentes de Salud de la Medicina Tradicional
para el aumento de la cobertura de los servicios de salud oficial.
2. RESOLUCION WHA30.49 (MAYO DE 1977). 30a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD:
2) “Insta a los gobiernos interesados a que otorguen una
importancia adecuada al empleo de sus sistemas médicos
tradicionales en conjunción con la medicina moderna;
3) Pide al Director General que ayude a los Estados Miembros a
organizar actividades de enseñanza e investigación y a
conceder becas para formar personal en materias de técnicas
de investigación, estudiar los sistemas de asistencia sanitaria e
investigar los procedimientos tecnológicos relativos a los
sistemas médicos tradicionales e indígenas".
3. RESOLUCIÓN WHA31.33 (MAYO DE 1978). 31a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD:
“Pide al Director General:
54. Hugo E. Delgado Súmar
1) que prepare un inventario de las plantas medicinales utilizadas
en los distintos países, con la nomenclatura botánica
normalizada de las que tengan uso más difundido;
2) que disponga la compilación y actualización periódica de una
clasificación terapéutica de las plantas medicinales, relacionada
con la clasificación terapéutica general de todos los
medicamentos;
3) que se examine los datos científicos de que se disponga acerca
de la eficacia de las plantas medicinales en el tratamiento de
afecciones y enfermedades específicas, y dé a conocer, en
forma resumida, los resultados de ese examen; ...
6) que designe centros regionales de investigación y enseñanza
para el estudio de plantas medicinales".
4. RESOLUCIÓN WHA40.33 (MAYO DE 1987). 40a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD.
Insta a los Estados Miembros:
1) a que utilicen en la mayor medida posible prácticos de sus
sistemas médicos tradicionales en los programas de atención
primaria de la salud, siempre y cuando sea hacedero y
apropiado;
2) a que emprendan amplios programas de identificación,
evaluación, elaboración, cultivo y conservación de plantas
medicinales utilizadas en medicina tradicional;...
4) a que apoyen las investigaciones sobre métodos tradicionales
de tratar dolencias y de promover la salud de la familia, la
nutrición y el bienestar;
5) a que se intensifique la cooperación y el intercambio de
expertos, técnicas y métodos de adiestramiento en materia de
sistemas médicos tradicionales y sectores afines,
particularmente entre países de características culturales
semejantes.
5. RESOLUCIÓN WHA41.19 (MAYO DE 1988). 41a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD.
"Insta a los Estados Miembros:
1) que estudien la situación en lo referente a las plantas
medicinales que crecen en sus respectivos territorios;
55. Hugo E. Delgado Súmar
2) que adopten medidas eficaces para garantizar la conservación
de esas plantas y fomentar su utilización a largo plazo".
6. RESOLUCIÓN WHA42.43 (MAYO DE 1989). LA 42a ASAMBLEA
MUNDIAL DE LA SALUD
"Insta a los Estados Miembros:
1) a efectuar una evaluación completa de sus sistemas de
medicina tradicionales;
2) a hacer sistemáticamente un inventario y un estudio (preclínico
y clínico) de las plantas medicinales que utilizan los prácticos
de medicina tradicional y la población;...
3) a determinar las plantas medicinales o los remedios de ellas
derivados que tengan una relación eficacia/efecto secundario
satisfactoria y deban incluirse en el formulario de la
farmacopea nacional;
4) a estudiar posibilidades de aprovechamiento de las prácticas de
medicina tradicional para la ampliación de la cobertura
mediante atención primaria de la salud;
5) a promover la colaboración entre universidades, servicios de
salud, centros de adiestramiento y organizaciones
internacionales pertinentes en el estudio científico de las
formas tradicionales de tratamiento médico y de su empleo,
cuando esté indicado, en la asistencia sanitaria moderna".
7. RESOLUCIÓN WHA44.34 (MAYO DE 1991). 44a ASAMBLEA MUNDIAL
DE LA SALUD
“Insta a los estados miembros:
1) a que intensifiquen las actividades encaminadas a la
cooperación entre quienes practican la medicina tradicional y
quienes dispensan una asistencia sanitaria moderna,
especialmente en lo tocante al empleo de remedios
tradicionales inocuos, eficaces y científicamente válidos para
reducir los gastos nacionales en medicamentos".
57. Hugo E. Delgado Súmar
ACUERDOS Y RESOLUCIONES DE LA ORGANIZACIÓN
PANAMERICANA DE LA SALUD
1. RESOLUCIÓN V – CD37.R5 “SALUD DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS”.
XXXVII REUNIÓN. 1993.
2. RESOLUCIÓN VI – CD40.R6 “SALUD DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS”.
XL REUNIÓN. 1997.
Ø Fortalecer la capacidad técnica, administrativa y gerencial de
las instituciones nacionales y locales responsables de la salud
de las poblaciones indígenas, a fin de superar progresivamente
la falta de información en ese campo y asegurar mayor acceso
a los servicios de salud y atención de calidad, contribuyendo
así a mejores niveles de equidad.
Ø Promover la transformación de los sistemas de salud y apoyar
el desarrollo de modelos alternativos de atención de la
población indígena, incluyendo la medicina tradicional y la
investigación sobre su calidad y seguridad.
Ø Promover la participación de los indígenas y sus comunidades
en todos los aspectos de trabajo de la organización sobre salud
de los pueblos indígenas.
En ambas resoluciones se adoptan los principios establecidos en
Winnipeg, Manitoba, Canadá (1993):
Necesidad de un enfoque integral de la salud.
Derecho a la autodeterminación.
Respeto y revitalización de las culturas.
Reciprocidad en las relaciones.
Derecho a la participación sistemática.