Este documento describe la herramienta del "Plato del Bien Comer", que ayuda a llevar una dieta balanceada clasificando los alimentos en tres grupos: verduras y frutas, cereales, y leguminosas y alimentos de origen animal. Recomienda comer cinco porciones de verduras y frutas al día, consumir cereales integrales, y limitar los alimentos de origen animal a una cuarta parte del plato.
El plato del bien comer: guía para una dieta balanceada
1. EL PLATO DEL BIEN COMER
Es una herramienta útil que te puede ayudar a llevar una buena
alimentación, úsalo y lograrás llevar una dieta balanceada.
Esta herramienta tiene como fin brindar orientación y ofrecer opciones
prácticas para integrar una dieta correcta, adecuada a cada cultura, a
las costumbres, las necesidades y posibilidades de cada individuo, para
aprender a balancear sus alimentos de una manera práctica y sencilla.
Es una muestra gráfica de las porciones que deben existir en cada comida.
Nos proporciona una fácil identificación de los grupos de alimentos para la
creación de menús saludables.
Y ninguno de los grupos se privilegia sobre otro.
2. Clasifica a los alimentos en tres grupos:
Verduras y frutas: aportan vitaminas, minerales y fibra, así como color y
textura a la dieta. Como ejemplo de este grupo tenemos la naranja, el
plátano, la papaya, el brócoli, las zanahorias y la calabaza, entre otros.
Recuerda que es importante incluir en la dieta diaria cinco porciones de
verduras o frutas al día, de preferencia crudas y de la estación.
Cereales: Son la principal fuente de la energía que el organismo utiliza
para realizar sus actividades diarias por lo que su consumo es fundamental
para el buen funcionamiento orgánico. Este grupo incluye el maíz, arroz,
trigo y avena. Es preferible consumir los cereales integrales por su aporte en
fibra.
3. Leguminosas y los alimentos de origen animal: es el grupo que aporta
proteínas.
Entre las leguminosas encontraras: frijoles, lentejas y habas. Su consumo es
recomendable de una a dos veces por semana.
Los alimentos de origen animal aportan también grasa saturada
(colesterol), por lo que su consumo deberá limitarse a una cuarta parte de
tu plato.