BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, JOEL, PARTE 23 DE 47
1. OSEAS 14 712
. 2
Vuelve, Israel, junto a Yavé, tu Dios,
pues tus faltas te hicieron trcp ezar.
3 Preparen sus palabras
y vuelvan a Yavé para decirle:
,,¡Quita el pecqdo y acepta lo bueno,
qqe esta confesión nu'estra reemplace cualquier
' Asiria no nos salvará , .
ni confiaremos más en Ios caballos,
ni a la estatua que hicieron nuestras manos
volveremos a decirle Dios nuestro;
en ti sólo encuentra compasión el huérfano-»
5 Yo sanaré su infidelidad,
los amaré con todo el cora zón
pues ya no estov enoiado con ellos.
6
Yo séré para Israel iomo el rocío;
florecerá como una azucena
y extenderá sus raíces como el árbol del Líbano.
7
Sus retoños brot arán por todas partes,
ten drá como e[ olivo muchq prestancia
y será su perfume como el dél Líbano.
I Volverán a sentarse baio mi sombra;
serán vigorosos como ef trigo,
y les bro-tarán flores como á tá víd;
serán tan renombrados como los vinos del Líbano.
],Efraím., ¿qué tiene.s ya que ver con los ídolos?
Yo te mrro y aguardo t_u rgspuesta,
y.o,.que sQy
Somg un.ciprés siempfe verCe: :
si tienes frutos, esto te viene de rnl
'o Si alguien es sabio,
que compr-enda estas palabras,
v si es inteliqente, que las entienda
Pues los cañinos aál Senor son derechos
y por ellos caminan los buenos ,
mientras que los malos en ellos tropiezdo.
ofrenda !
.. 14.2 El libro de Oseas termina con estas
palabr.as alentadoras. DespUés de la,prueba,
lsrael buscará a Yavé. el cúal se deiara encon-
trar. La reconciliación de los ho'mbres con
Dios será un verdadero matrimonio , e irá a la
par con una reconciliación de la
con la naturale.za. Esto va se diio
y se desa-rrollará en el Cantar, él
a usar alqunas comparaciones
Oseas. J . '
humanidad
en 2,L7 -22
cual volverá
sacadas de
Los profetas de la Biblia sabían que todo es provisorio en el mundo actual. En
cada acontecimiento que amenazaba la vida de su pueblo, reconocían la venida
de Yavé, que juzga al mundo presente para instaurar lo definitivo.
Joel habla con ocasión de una invasión de langostas. La gente contempla sus
campos devastados y las cosechas perdidas. Joel ve más allá: Yavé hac.e oír su
voz, ¿quién podrá soportar su venida? Y también Dios, al prometer Ia liberación
de dicha plaga, anuncia el tiempo feliz en que no habrá ya ni dolor ni temor. Se
anuncia el día en que Dios dará a todos sus hijos el Espíritu de los profetas. Para
la lglesia, Joel es el profeta que anunció el día de Pentecostés (ver He 2, I 7).
ñ ' Palabra de Yaué que fue dirigida a
U Joel, h,jo de Petuel.
La invasión de las langostas
2
iOiqan esto, ancianos!, escuchen todos
los ha5¡tantes del país:- ¿Ha sucedido algo
semejante _en sus tiempos, eq tiempos de
sus Padres / .
- 3 Cuéntenselo a sus hijos y a sus nietos
v a las qeneraciones veníderás.
' oLo que deió el qusano, lo devoró la lan-
oosta; [o que'dejó-1a langosta, lo devoró el
glil¿:";
lo que dejo el pülsón, lo devoró el
''i'ó"rpierten, borrachos, y lloren; giman
todos los bebedores de vino Porque'se nos
ouitó de la boca el vino nuevo.
' 6 Una nación poderosa e innumerable ha
invadido mi país; sus dientes son como dien-
tes de león, y tienen cqlmillos de leona.
' En ruinas-ha deiado mi viña v ha des-
ffozado mis higueras, les sacó toáa la cor-
teza, la's dejo peladas y con las ramas
biancas..
s
¡Laméntate como la joven que, recién
casáda, llora por su esposo!
'.No hav fruto que ofrecer en Ia Casa de
Yavé, de áuelo están los sacerdotes al ser-
vicio de Yavé.
¡o El campo ha sido desolado, de duelo
está la tierra porque la cosecha del trigo
está perdida; nos falta el vino y el aceite se
nos ha terminado.
r¡ Avergüéncense, labradores; giman, v.i-, .
ñadores,Éo[ el trigo y la cebada,"porqüe la
cosecna oe los camPos esta Peroloa
'2 La viña se ha secado y la higuera langui-
dece; el granado, la palníera y"el rnanzano,
todos los árboles del campo están secos, y
se nos fue la Elegría como avergonzada.
¡3 Pónqanse su cinturón, sacerdotes, y
laménteñse, Lloren, ministros del Señbí.
Vengan a pasar la noche cubiertos de sa-
co, ministios de mi Dios. Ya no se ven
ofrendas ni vino en la casa de su Dios.
t4 Proclamen un ayuno y. una asamblea
santa, conqrequen a los ancianos y a toda
la qente de] cámpo en ta Casa de Yavé, su
Diós, y clamen a'é1.
'5 iAv. oué día! Se acerca el día de Yavé!a J' ¡
Es como úna devastación mandada por el
Todopoderoso.-
'u Ya no vemos con qué mantenernos y
toda aleoría ha huido de'la casa de nuestró
Dios. ''
'' La semilla se secó debaio de los-[erro-
les, Ios. gra.neros están vacíos y las gran-
jas arruiña4ut po.rqug qo hay gruno.-¡Có-
mo muoen los antmales!
¡8 Laí manadas de bueyes andan locas
porque no tienen pasto, y perecen los re-
baños.
'e Oh Yavé, a ti clamo, porque el fuggo
ha consumiáo los árbót'es del campo.
20
Hasta las bestias del campo se vuelüen
a ti ávidas porque se han secado los arrovos
y el fuego ha devorado los prados del llaho.
f|l ' ¡Toquen la trompeta en Sión! Den la
lA al'arm'a eñ mi mohte santo. iTiernblen
todos los habitanteg del país, porque está
cerca el día de Yavé:.¡Ahí viene!
2. JOEL 2
2
¡Día de tinieblas y de oscuridad, día de
nubes y de espesa niebla! Ahí viene un
pueblo -numero§o
v íuerte. como iamás hu-
bo otro ni lo habrá después de é1, avanza y
se extiende como una sombra sobre lo-s
cerros.
3 EI fuego devora delante de é1, detrás
de él la ll"ama abrasa. Delante de é1, un
jardín de delicias; detrás de él queda un
desierto. No hay hada que se püeda sal-
var. '
o
Son semeiantes a poderosos caballos v
se lanzan coíno cabállerías, saltando po'r
Ios cerros. 5 Es como el estruendo de ca-
rros, como el sonido de la llama de'fuego
que devora la paia seca. Son como un
e'jército podercisó en orden de batalla.
6 Ante él se estremecen los pueblos, to-
' 7 Corren como valientes; como
'asaltan-
tes suben las murallas; cada uno va delan-
te sin equivocarse de camino.
I Nadie tropieza con su vecino, cada cual
va por su cainino. Atacan €n rTtedio de las
flechas, sin romper las filas.
e Se arrojan sobre la ciudad, corren
sobre la múralla, suben hasta las casas,
y por las ventanas entran como ladro-
nes
'o iAI veilos tiembla la tierra, se estreme:
cen los cielos. el sol v la luna se oscurecen
y las estrellas'pierderí su brilló!
".Yavé hace. oír su trueno, ál frente de su
eiército: numerosos son sus soldados- oo-
derosos los que cumplen sus órdenes.'Por-
que qrande V temible es el día de Yavé'.
¿Quián podrá sopbrtarlo? :
Vuelvan a mÍ con llantos
. o tz Dice Yavé- *Vuelvan al mí' aon
todo corazón, con ayuno, con Ilantos
y con lamentos:, -
13
Rasguen su cora zón, V' DO SUS
vestidos;y vuelvan a Yavé'su Dios,
Porque él es !,ondqdoso y compasi-
vo.; Ie.cuesta enol,ar:e, y g¡an4e és su
misericordia; envía la desgracia,, pero
IueqoDerdona. - : :
lr iduién sabe si volverá atrás y nos
perdónará y hará producir de nuévo a
huestros cárnpos, üe los,cuales sacare-
15
Toquen la'trompeta en S¡ón,
714
promulguen un ayuno sagrado y lta-
men a conceJo
r6 Congreguen al pueblo, reúnan
? los ancianos y que todos se puri-
fiquen. Traigan t?¡nbién a lop pe-
queños y a 'los niños,de pecho, y
que los recién casados dejen sú
cama.
t7 En el patio del santuario iloren
los sacerdotes ministros de Yavé v
digan: *¡Yavé, perdona a tu pueblo, y
no lo entregues al desprecio y a lá
burla de lashaciones! ¿Acaso permi-
tirg¡ qus.lol paganos-digán: dónde
esta SU UIOS/»
rB Yavé se mostró lleno de celo por su
tierra y tuvo piedad de su pueblo.
re Entonces Yavé .respondió y dijo a su
pue.plg:,*Miren que [es envío !rigo,-vino y
aceite; de suerte qug puedan sacíarse, y nó
li¿:.*ndré
más a los insultos de lás nácio-
.
20
Al que viene del norte se lo quitaré
de encima y lo arrojaré a una tieria ári-
da y desierta, su vanguardia hacia el
mar oriental,.su retagyurdia hacia el
mar occidental, y subirá su pestilencia
y hediondez, porque yo obro maravi-
f la s.,
2r No temgs,. tierra;. alégrate y regocíjate,
porque'=Yavé obra
'grande5
cosás.- 22 No temañ, an-imales del campo, por:
que los prados del desierto han reverdeci-
do, los árboles hán'dado su fruto, [a higué-
ra y la vid, su§ riquezas. :
23
Y ustedgs, hijos de §ioll, dlégrense en
Yavé, su Dios; ,perque él ies da-la lluvlá,
de otoño para la fertilidad y hace caer
aguq_ en otoño y primavera como antes.
2o-Las'eras se ll-enarán de trigo purg, loq
lagares desbotdgrán de vino ! abeite'virl,
25 Yo los compensaré por los años gue
les devoró la Jangosta-y el pulgón, el grillo
y lp opqq, mi grán ejéicito, qué con¡rá usi
tedes habla mandado. )
2t Comerán y se saciarán, alabarán el
Nombre de su Dios, que ha obrado con:
ustedes de modo maiavilloso, mi püe,
blo no será ya iamás confundido.'21 v
sabrán ustedés que yo estov €n medió
de Isr-qgl, yo Yaüé,
-su.,
Diop_, y .no hay
otro. Mi púeblo no será ya iamás con--
c l.LZ Vuelwn a mí.con todo corazón ,lnüta.-
ción a [a penitencia. En tiempos de prueba se orde- ,
naban ayirnos públicos en Israel. I l'ger.rte; se vestÍa
de duelo-, o zushtuía sus roDas Dor saéos. no se oei-
naba el cabello y se echaba ceá¡a en la can. J¿sús .
715
Yo derramaré mi EspÍritu
: I nEsto es lo que ha de suceder
después:
Yo derrarnaré mi Espíritu sobre
cualquier mortal.-
Tus hijos y tus hijas prgfetizarán,
los ancianos tendran sueños
y los jóvenes verán visiones.
2 Hasta sobre los siervos y las sir-
vienta s
derrarnaré mi Espíritu en aquellos
días-
3 Daré a ver señales en el cielo,
y en lu ,tierra habrá sangre, fuego y
nUDeS Oe numo
o El sol se cambi ará en tinieblas
v la luna en sangre
áuando se acerque el día de Yavé,
día grande y terrible.
5 Entonces serán salvados
todos aquellos que invoquen el
Nombre de Yavé.
Pues unos se salvarán en el cerro
Síón,"'iá'Urá sobrevivientes en Jerusalén,
corno lo ha dicho Yavé;
allí estarán los que llame Yavé.
El último combate y la salvación
ñ' ' En aquellos días cambiaré Ia suerte
EJ de Judá y de Jerusalén. 2 Reuniré to-
das las naciones y las haré descender al
valle de Josafat. Allí discutiré con ellas la
causa de mi pueblo y de mi heredad, Is-
JOEL 4
rael, a quien han dispersado entre las na-
ciones, mientras se repartían mi tierra. ' Se
jugaron a los dados a' mi pueblo; cambia-
roñ al niño por la prostitufa y a la niña la
vendieron por vino para ernborracharse.
4 Y ustedes, ¿qué son ustedes para mí.
Tiro_ y Sidón y IcJdos los distritos 'de Filis-
tea?
-¿Tomaran
acaso represalias contra
mí? S'i las quieren tomdr, bien pronto vol-
veré estas represalias sobre su'propia ca-
beza.
5
Ustedes que robaron mi plata y mi oro y
se llevaron mis más hermosas ioyas a sus
templos 5 y vendieron los hiioí de Judá v
los hijo.r dé Israel a los griegós, alejándoloi
de su tierra, ' sepan qué yo los voi/ a des-
pertar del lugar ilondé usledes los'vendie-
ion y haré cáer las represalias de ustedes
sobré sus cabezas. E Venderé a los hiios e
hijas de ustedes por medio de los hijós de
Júdá, que los venderán a los §abeos, ñd-
ción lejána. Yavé lo ha dicho.
e Publiguen esto entre las naciones. Dro-
clamen uha guerra santa, despierten'a los
valientes, avancen y suban todos los hom-
bres de querra. 't Conviertan sus azadones
qn espadas y sus hoces en lanzas, eue el
débil üiga: *Soy un valiente.,
".Deñse.prisa y lleguen pronto, todas las
naciones de alrededor, reúnanse allí. iHaz
baiar, Yavé, a tus valientes! t2 Que desóier-
ten y suban las naciones al valle de Josa-
fat, porque alli me sentaré para juzgar a to-
das las ñaciones de alrededor.
¿ '
'3 Metan la hoz, pues los sembrados es-
tán maduros, vengan y pisen, porque el la-
qar está lleno v las cubas desborilan. itan
lrande es su níaldad! 'o Multitudes y áulti-
íudes en el Valle de la Decisión, porgue es-
tá cerca el día de Yavé en el Valle de Ia
Decisión.
It El sol y la luna se oscurecieron y las
estrellas retÍraron su resplandor. 'u Yavé ru-
ge desde Sión y desde'Jerusalén hace oír
: 3.1 Joel anuncia el día de Yaué (4), tármino
que indiga a la vez: venida de Dios, juicio y salva-
ción de los eleqidos.
Der-ramaré- mi Espíritu sobre cualquíer
mortal. Ya en los tiemóos del Antiquo Testámen-
to Dios comunicaba su'Espiritu a lós profetas v a
los sah.adores (ver Is 11,1'y Jue 11,1)- Pero aquí
se da como un siqno decisivo el que el Espíritu be
comunique a los cleyentes de,toda'condición. Ten-
drán sub¡ios y uísiónes. En aquellgs tiempos leja-
nos, éstos erán medios . comuries de Ia ccimuniéa-
cíón profética. Con estas palabras. Joel anuncia lo
mismb que Isaías cuando ilice: "Todos tus hiios se,
án enséñados por Dios" 0s 54.13 v Jer 31.31).
Daré a uer §eñales en'el cielo (3). La ola d-e
profetismo acompañará señales de toda clage in-
üicando una crisü qrave en el mundo. La fiqura
del sol cambiado en" tinieblas expresa a la veí de-
sorden en .la.naturaleza y. situaóiones imposibles
en la vida de la humanidad-
Entonces seran soluados (5). Este será un mo.
mento en que los hombres no podrán sustraerse
a una opción decisiva: aferrarse a su anterior mo-
do de úivir o invocar el Nombre de Yavé, que
geuivale a entregarle s.u.üda y.esperanzas, con-
Iranoo en su Dooerosa lntervencron.
Estos tres'elementos parece que estuvieron
reunidos p.ara el pueblg j"dio _en los año§ que si-
guieron a Iq resurrección de Jesús. antes de que
luera destruida su nación. Por eso Pedro cita eite
texto el día de Pentecostés (He 2,171. En este fin
del siglo XI, Io m§rno po{ria estarse verificando
una vez mas a escala. muRoral-
Para Pedro, en Pentecostés, el Nombre del Se-
lSrJ!1fl:l "r
el de ,Yavé Dios), no es otro que el
. 4. 1 El-. cornentario de Zacarías lz-t|'vale
para este capítulo; eu€ muv posiblemente se aña-
ilió mucho rñás tard'e en el-libro de Joel. El profe-
t? aprovecha una crisis en que los judíos'fueron
dura'mente oprimidos, para iecalcaí que Dios es
Señor de la historia.