El documento describe las funciones de la pareja en dos espacios: el espacio del bienestar y el espacio del conflicto. El espacio del bienestar incluye aspectos placenteros como intimidad y afecto, mientras que el espacio del conflicto es donde surgen las diferencias entre la pareja y donde ocurre el crecimiento emocional a través de la resolución de conflictos. Una pareja sana usa el espacio del conflicto para madurar, mientras que una disfuncional lo usa para destruirse.