La pintura flamenca se desarrolló en paralelo al Renacimiento italiano en el siglo XV. Flandes se convirtió en un importante centro artístico debido a su prosperidad económica. La pintura flamenca se caracterizó por el uso de la técnica del óleo y temas realistas, aunque con un enfoque espiritual más que en la antigüedad clásica. Los pintores flamencos crearon retratos psicológicos detallados que influyeron en el arte español.