El documento proporciona varias estrategias para atraer la atención del alumnado, incluyendo mostrar decepción por su comportamiento, involucrarlos directamente pidiéndoles explicar algo en el idioma extranjero, establecer límites de tiempo con temporizadores e involucrar a los estudiantes en el control del tiempo, y situar a los estudiantes más habladores en ubicaciones estratégicas dentro del aula.

1. ¿CÓMO CONSEGUIR ATRAER LA ATENCIÓN DE NUESTRO ALUMNADO?
?
• Callarse y mostrar decepción.
• Acercarse al estudiante que está hablando y pedirle que te cuente lo que
está diciendo en la lengua extranjera.
• Hablar muy alto o muy bajo.
• Si están hablando, mandarles ponerse de pie el resto de la clase.
• Escribir una palabra en el encerado (como, por ejemplo, RESPETO) e ir
borrando letras si hablan o no atienden. Si al acabar la clase o la semana o
el tiempo marcado no queda ninguna letra, hay una consecuencia negativa.
• Imitar al profesor o profesora. Se hace algo y quien primero se dé cuenta
imita este comportamiento hasta que el resto de la clase atiende. Algunos
ejemplos pueden ser: “Time out” – Quedarse callado y “congelado”;
morderse la lengua; levantar una mano; cantar una canción; contar hacia
atrás en voz alta o con la mano; ponerse de pie; dar palmadas; repetir
partes del cuerpo, de la cara, colores…
• Marcar límites de tiempo para hacer actividades con la ayuda de un
temporizador de cocina, por ejemplo, e involucrar a algún estudiante para
que controle el tiempo.
• Situar al alumnado más charlatán en sitios estratégicos del aula: rodeado de
alumnado más callado, por ejemplo.
• Encender o apagar la luz o hacer algún sonido (golpe, silbar…)
• Enfrentarse a quien habla directamente: ponerse delante, mirarle y
preguntarle si ya ha acabado.
• Utilizar un cronómetro para marcar el tiempo de clase y pararlo cuando
haya interrupciones. Al acabar la clase, se mira el tiempo que falta y se
recupera en otro momento (recreo, a última hora…)
• Poner un cuadrado en el encerado con el tiempo que se añadirá al acabar la
clase e ir aumentando a medida que hablan más o no atienden o al contrario.
• Cada estudiante tiene 3 cartas sobre la mesa al empezar la clase. Se les
van quitando si hablan o no atienden y si al finalizar no tienen ninguna hay
una consecuencia negativa. De esta forma no se interrumpe la clase, no hay
humillación pública ni foco de atención y sólo una conversación privada al
terminar.
• Sacarles tarjetas de fútbol o tarjetas con los colores del semáforo y poner
una consecuencia con las rojas.