El documento describe los pilares y objetivos del Acuerdo de Capital de Basilea II. Introduce un enfoque más sofisticado para el cálculo de requerimientos de capital basado en modelos internos que miden el riesgo de crédito, mercado y operacional. También fomenta una supervisión más rigurosa y mayor transparencia informativa de los bancos. La implementación de Basilea II representa tanto oportunidades como retos para bancos, reguladores y supervisores.