El documento describe el acoso escolar, indicando que implica una desproporción de poder y fuerza entre el agresor y la víctima, ya sea por diferencias físicas o de estatus social. Explica que los acosadores a menudo tienen dificultades para cumplir las normas y menos sensibilidad hacia el dolor de los demás, mientras que los acosados suelen tener pocos amigos y carecer de habilidades sociales para enfrentar la agresión.