Las cajas negras son dispositivos que registran la actividad de los instrumentos y conversaciones en aeronaves y otros vehículos. Almacenan datos que permiten analizar los accidentes. Se empezaron a usar a finales de los 1950 y graban datos clave para investigaciones sobre accidentes. Están diseñadas para sobrevivir a impactos violentos y soportar altas presiones y temperaturas para proteger la información.