Este documento discute cómo mejorar la evaluación en el aula a través de un aprendizaje más profundo. Explica que la evaluación debe involucrar procesos cognitivos más complejos como comprender, aplicar, analizar y crear, en lugar de solo recordar hechos. También destaca la importancia de que los estudiantes aprendan de manera significativa en lugar de superficial para aprobar exámenes.