Este documento discute la importancia de la comunicación en la educación. Indica que los educadores son seres de comunicación y que la clave de un proceso educativo exitoso depende en gran medida de la capacidad de comunicación del educador. También describe varios tipos de comunicación que pueden utilizar los docentes y señala que se aprende mejor en un ambiente rico en comunicación e interacciones entre estudiantes y educadores.

1. “Comprender la Comunicación en la Educación”
Nombre y Apellido: Maira Esquivel
Comunicación en la educación, decir “en la educación” nos sitúa en el espacio de toda la
educación sin pretender a lo comunicacional.
“Los educadores somos seres de comunicación”; aludimos a la comunicación como: ejercicio de la
calidad de ser humano, expresión, interacción, goce, proyección, afirmación del propio ser, sentirse
y sentir a los demás, abrirse al mundo, apropiarse de uno mismo.
Trama de comunicación: influyen en ella las variaciones del contexto, la vida cotidiana, las
actitudes a la defensiva productos de encuentros con quienes aparecen como capaces de
dañarnos, la esgrima verbal para enfrentarse a un contrincante que viene a herirnos con palabras,
las miradas, los gestos. Todo lo que nos sucede en la diarias relaciones va a dar a esa delicada
trama de lo comunicacional.
La clave de un proceso educativo esta en gran medida en la capacidad de comunicación del
educador. El alcance de la capacidad de personalizar es un recurso para lograr la comunicabilidad.
Cuando uno puede comunicarse en distintas líneas (con palabras, con el cuerpo, con los sonidos,
con las imágenes) a la vez se apropia de sus posibilidades, de sus capacidades.
Toda experiencia educativa destinada a construir la utopía, esta siempre acechada desde fuera y
desde dentro. Desde fuera porque las sociedades no suelen marchar lineal. La clave es siempre un
acto de fe, de confianza; no se puede aprender de alguien en quien no se cree.
Alumnos y educadores se construyen en y por la comunicación. Cuando como educador, aporto a
que otros se construyan, me voy logrando, también me voy construyendo. Pero también existen
situaciones donde la comunicación pasa a ligarse con el sufrimiento. Esto es uno de los peores
cruces que le puede tocar a alguien “estar ente los demás deseando con toda el alma no estarlo”.
La comunicación es el cemento de toda la arquitectura del acto educativo.
Tipos de comunicación de un docente:
 En función de ataque y defensa
 La relación definida en función de traspaso de contenidos
 El populismo pedagógico
 El showman, el hombre-docente espectáculo
 El docente de personalidad panóptica, el que ve de todos lados
 La tecnología salvadora
 Comunicación en función del aprendizaje
Se aprende mejor en un ambiente rico en comunicación, en interacciones, en la relación con
materiales bien mediados pedagógicamente, en la práctica de la expresión, en el encuentro
cotidiano.

2. La comunicabilidad es el ideal de todo acto educativo. Cuando existe es directamente perceptible,
está a la vista con tanta claridad como los libros, los edificios y las personas; como así también su
ausencia. La entropía (perdida de energía) acecha siempre y a menudo cunde sin que nos demos
cuenta en la vida del ser humano, en un sistema, una institución.
Cuando baja la comunicabilidad estamos frente a uno de los síntomas del sinsentido en la
educación. Sentido y sinsentido son comunicados siempre. Y lo que se comunica es captado por
alguien.
La comunicabilidad permite un mejor acompañamiento y una mejor promoción del aprendizaje. Es
necesario aclarar que no confiamos todo a ella, y a la vez es preciso reconocer sus posibilidades
se resisten por causas internas a la institución, por causas contextuales y por causas personales.