La falta de lectura tiene varias consecuencias negativas como deficiencias en ortografía, vocabulario y comprensión lectora, lo que lleva a un bajo rendimiento académico. Los jóvenes leen principalmente secciones de periódicos como deportes y farándula, y la lectura de libros es muy baja. Se recomienda que padres, maestros y bibliotecas motiven la lectura desde una edad temprana presentándola como una actividad placentera.