El documento describe y compara a los dos grandes educadores de la Roma antigua, Quintiliano y Séneca. Quintiliano escribió las Instituciones Oratorias, una obra de 12 libros sobre la educación y la técnica de la retórica. Séneca criticaba a los teóricos retóricos de su tiempo por enseñar solo a disputar, en lugar de enseñar a vivir y descubrir la verdad. Consideraba que había que enseñar a los estudiantes para la vida real mediante la sobriedad, la templanza y la austeridad