Para que un cambio organizacional sea exitoso, deben estar presentes ciertos componentes clave como la visión, los valores, la estrategia, los recursos, la capacidad, la motivación y la retroalimentación. El cambio se acepta más fácilmente cuando es comprendido y no representa una amenaza, cuando los empleados participan en su introducción, y cuando muestra resultados positivos. Los líderes deben explicar las razones y beneficios del cambio para facilitar su adopción.