El documento describe el perfil de un formador exitoso. Un buen formador debe tener conocimientos sólidos sobre su materia, la capacidad de manejar un grupo de estudiantes, y mostrar empatía y generosidad hacia los estudiantes. También debe poseer competencias en técnicas de formación, planificación, y habilidades de comunicación para establecer buenas relaciones con los estudiantes. La motivación de los estudiantes, el uso del humor, y crear suspenso son características esenciales para una formación eficaz.