El documento resume la Revolución Mexicana de 1910, cuando el 85% de la tierra mexicana pertenecía al 1% más rico de la población, llevando a conflictos obreros. Aunque Porfirio Díaz cambió de opinión y se reeligió en 1907, el deseo de cambio era imparable, liderado por Francisco I. Madero, quien vino de una familia rica pero quería elecciones libres.