Las estrategias de evaluación para niños preescolares requieren que los educadores conozcan el desarrollo infantil, sus intereses, pensamientos, sentimientos y perspectiva del mundo, así como sus fortalezas y debilidades individuales. La evaluación debe basarse en múltiples observaciones, apoyar el aprendizaje infantil y considerar tanto el proceso como los resultados, además de permitir que los niños tengan un papel en la evaluación de su propio aprendizaje y desarrollo.