1. AUTOR ALEXANDER PIKLER
A U T O R E S :
• R I S C O TAVA R A D I A N A
• R O S I L L O E S P I N O Z A R A I Z A
• K A R O L PA N TA R E AT E G U I
• B R E N D A F L O R E S C R U Z
D E L G A D O S O S A N O E L I A
2. SUS EXPERIENCIAS COMO PEDIATRA
• Observó que no era necesario engañar ni distraer, que era necesario crear un
vínculo basado en la confianza. Para ello los doctores explicaban al niño/a qué
iban a hacer y esperaban a que el niño o la niña aceptara.
3. Sus experiencias como pediatra
• Pikler nació en Viena a principios del s.XX pero vivió gran parte de su vida en Budapest. Hay varios
hechos de su vida que pudieron influir en su forma de ver a los niños/as y en su espíritu
transformador:
Uno de los hechos que pudieron influir en gran medida en su teoría fue su trabajo con el Dr.
Pirquet durante sus prácticas en el Hospital Universitario de Viena. En este centro descubrió cómo
los pediatras trataban de cuidar y curar a los niños/as con gran delicadeza para evitar que lloraran.
Otros hechos que podrían haber influido en su espíritu de lucha podrían ser su origen judío en un
país con leyes antisemitas o su posible vinculación con el movimiento comunista húngaro. Se casó
además con György Pikler, pedagogo progresista cuyas ideas también contribuyeron a su trayectoria
profesional.
• Comenzó sus investigaciones en el campo de la pediatría trabajando directamente con familias.
Visitaba a sus pacientes en sus casas y hacía un seguimiento del desarrollo de los niños/as. No
solamente en casos de enfermedad, sino también en su día a día, ya que creía que la salud física
depende de las condiciones y el entorno de los niños/as.
4. APORTES PEDAGOGICOS
• Uno de los principales aportes de Emmi Pikler y que considero la base de todas sus teorías, fue
la transformación de la mirada de los adultos hacia los niños/as y bebés. dejó de verlos como
futuros ciudadanos en crecimiento para considerarlos desde ya personas con pensamiento
autónomo e iniciativa propia. Esto significa que desde que nacen los bebés son personas activas
con interés e iniciativa para aprender.
5. El movimiento libre
• La primera forma de relación con el mundo que tenemos las personas es nuestro cuerpo. A
través de él nos relacionamos, tocamos y sentimos.Pikler se dio cuenta de cómo los adultos
ponemos todos nuestros esfuerzos hacia el objetivo de que los niños y niñas caminen y cuánto
antes mejor.Sin embrago, gracias a sus observaciones del desarrollo de los niños/as demostró
como los bebés desde su nacimiento realizaban ejercicios y posturas naturales preparándose
para este desplazamiento erguido (de pie). Este desplazamiento es el más complejo de todos
(piensa que para llegar a él hicieron falta siglos de evolución) y por lo tanto necesita su propio
tiempo y práctica para establecerse por completo. Empezar por respetar estas
posturas es el primer paso para llegar a respetar todo lo que
vendrá después: sus tiempos para aprender la tabla de
multiplicar, para leer, para hacer amigos o para andar
en bicicleta.
6. La relación estable
• Además de respetar ese movimiento innato, Pikler consideró indispensable generar un vínculo
estable con un adulto. Como seres sociales que somos (y por el hecho de nacer antes de estar
completamente maduros) necesitamos crear un primer vínculo que nos dé esa seguridad física,
psíquica y emocional fundamental para seguir desarrollándonos. En un centro donde era mayor
el número de adultos por niño/a y dónde podría haber cambios de personal, tuvieron que
crearse varias estrategias para preservar esta seguridad afectiva. Se intentaba dar la estabilidad
familiar de la que carecían a través de la estabilidad exterior.
7. La comunicación verbal y Corporal
• Los gestos y las palabras del adulto mostraban un total respeto y escucha de las necesidades de
los niños/as. Por ejemplo, en el cambio de ropa o en el momento de la comida, esperaban a que
el niño/a indicara con sus gestos, su mirada o sus verbalizaciones que estaba de acuerdo con lo
que se le pedía. Aunque los bebés no hablen saben expresarse con el cuerpo y comprenden lo
que sucede incluso a nivel emocional y afectivo. Por eso no es de extrañar que lloren al ver llorar
a otros o se tensen si el adulto que les acompaña está tenso.
8. El Juego Autónomo
• Además de observar el movimiento y la relación Pikler también observó el juego de los niños/as,
su interacción con los materiales y con los compañeros/as. Defendió que aprendizaje está en la
acción y por eso es importante dejar que el niño construya su propio juego.
• Esta nueva visión del aprendizaje también coloca al adulto detrás del niño e invita al adulto a
jugar menos y observar más. Estamos tan acostumbrados a incentivar a los niños/as a jugar
pensando que lo pasan bien que nos podemos olvidar de nuestro rol cómo
educadores/as: buscar la mejor forma de que los niños/as aprendan desde su propia acción.
9. Las Atenciones
• Algo tan rutinario como cambiar un pañal, comer o peinarse fueron sucesos mirados por el ojo
científico de Emmi Pikler. No podía ser que el niño o la niña sólo aprendieran durante el
momento de juego porque no sabe separar su vida en momentos de juego o de atención
corporal.Por eso consideró estos momentos de cuidado de los niños/as como momentos de
aprendizaje mutuo, dónde conocerse y reconocerse como personas. Por eso se aprovechaban
estos momentos tan cercanos para poner en práctica todas sus teorías sobre el movimiento
libre, la escucha, la narración o el juego. El adulto busca respetar los movimientos del niño/a y
darle el tiempo y presencia necesarias para generar una relación placentera. A través de
acciones lentas y agradables, de miradas de conformidad y comprensión, se genera una
complicidad e intimidad únicas.
10. El Rol Del Adulto
• Cómo adultos tenemos la sabiduría de la experiencia pero también la ingenuidad de la
apariencia. Al aparentar que sabemos más que los demás y que todos nos deben un respeto, se
nos olvida que los demás, en especial los más pequeños, también nos enseñan y que para que
nos respeten es necesario que el respeto sea mutuo.
• Al agachar la cabeza y aceptar a los bebés y niños/as como personas con sus propios
tiempos estaremos en condiciones de escuchar qué es lo que necesitan para desarrollarse en
cada momento. Así tanto el profesional como el familiar pasa a guiar al niño/a desde atrás
siguiendo sus propios intereses y ritmos. Confía en la capacidad innata de comprender y
aprender. Percibe desde la comunicación no verbal las reacciones del niño/a y se amolda a sus
movimientos. No fuerza, sino que se observa.
11. El Entorno
• Además de la comunicación verbal y no verbal, la manera de acompañar al niño/a en su desarrollo y
darle seguridad es a través del entorno. Los espacios se preparan de tal forma que respondan a las
siguientes características:
ADECUADOS A LA SEGURIDAD FÍSICA: Entornos preparados para cada momento, sin peligros (el de
juego, de comer, de baño, etc.). También se busca el espacio exterior para mantener la salud física
(incluso en invierno).
ADECUADOS A SUS INTERESES: Espacios con materiales adaptados a los intereses de los niños, a su
edad y a la cantidad de niños/as.
ADECUADOS A SUS MOVIMIENTOS: Un espacio libre donde moverse con estructuras que favorezcan
el desarrollo de nuevas posturas y desplazamientos. Se piensa en una vestimenta cómoda o incluso
sin ropa cuando la temperatura lo permita.
ADECUADOS A SU SEGURIDAD AFECTIVA: Dónde el adulto de referencia esté cerca o visible. Por eso
puedes ver en los videos del Instituo Lóczy barrotes entre las zonas de juego y las de cuidado.
12. 5 principios De La Pedagogía Pikler En La Educación De Los Niños
• Para Pikler, el bebé es un ser capaz de desarrollarse de manera autónoma. Es
• decir, un cambio de rol en la relación de los padres y los educadores frente al niño donde los adultos estén en un lugar
de igualdad y respeto hacia los pequeños. Principios que rigen esta manera de ver a los niños regulan en detalle todos los
aspectos cotidianos en la vida de los pequeños. Hay cinco principios que para Pikler son de igual importancia y que
cobran valor en el sistema educativo cuando se ponen en práctica y en el que serán respetados de manera simultánea y
constante.
• Es decir, si uno de ellos se descuida el equilibrio que se ofrece al niño se romperá. Estos son:
• 1.Autonomía de los niños. Emmi Pikler demostró que el niño es capaz de aprender a aprender por sí mismo.
• 2- Necesidad de favorecer al niño en la toma de conciencia de sí mismo y de su entorno. El adulto tiene que dar una
seguridad emocional al niño que satisfaga su necesidad afectiva para que así el pequeño pueda centrarse en el
movimiento de su cuerpo y en descubrir los objetos del entorno, jugar y moverse de forma libre.
• 3- Relación afectiva privilegiada. Dar una mirada particular a cada niño. Los padres han de dar una seguridad en sus
cuidados de tal forma que el niño pueda predecir lo que va a pasar y respetando sus ritmos de desarrollo.
• 4- Importancia de la salud física.
• 5- Motricidad libre. El niño se moverá por exclusiva iniciativa. El niño se sentirá competente. Esta motricidad libre
constituye uno de los elementos determinantes en la relación niño-adulto ya que favorecen el respeto mutuo. Para Pikler
este principio es el “alma” de su visión y el principio que atraviesa a todos.
13. • El Papel Del Adulto A La Hora De Desarrollar La Pedagogía Pikler
• Desde el enfoque de Emmi Pikler en la educación de los niños, es el niño quien protagoniza su propio
desarrollo con plena conciencia de sí mismo y de su entorno, al tiempo que integra las vivencias que
nutrirán su autonomía y su autoestima. Para ello, el papel del adulto es fundamental. Gracias a la manera
que el adulto se ofrece al niño para acompañarle en su desarrollo, definirá la calidad con la que pequeño lo
haga.
• Para poder satisfacer las necesidades en las que Emmi Pikler fundamenta todo su trabajo: el apego y la
autonomía, los adultos deben actuar de forma diferente a lo tradicional:
• Durante los cuidados como son el cambio de pañal, dar de comer, bañarle, etc. El adulto debe realizarlos de
manera suave, poniendo en palabras lo que se va haciendo y dando tiempo al niño para que escuche,
centrado en lo que se hace, y prestando atención al niño. Así, poco a poco se irá respetando su autonomía y
sus preferencias.
• Cuando el niño está jugando, el adulto es un mero observador y el pequeño el protagonista. El adulto está
presente pero no interviene y no le sugiere al niño lo que tiene que hacer ni cómo tiene que hacerlo.
• Se debe respetar el movimiento libre del niño por lo que no se debe enseñar a sentarse al niño, a andar,
etc. El niño lo hará cuando se sienta preparado. Por tanto los adultos no deben intervenir y sí proporcionar
al niño un espacio adecuado para moverse y una ropa adecuada para que pueda realizar movimientos
libremente. Gracias a ello, el niño va descubriendo por sí mismo su cuerpo y sus movimientos, lo que
motiva su deseo de movimiento y exploración que fomenta el desarrollo emocional, intelectual y psíquico.
14. • Conclusiones
• Como Grupo hemos llegado a la conclusión de decir que el trabajo realizado por la pediatra Emmi
Pikler ha sido muy internaste y arriesgado para las épocas que corrían cuando su formación. Bien es
cierto que en la actualidad, son diferentes los métodos alternativos de educación, En el territorio
español aún se está en proceso de desarrollo si lo comparamos con la práctica del método en otros
países europeos como Alemania o Hungría o como algunos países de Latinoamérica. Desconocía la
existencia de este método, pero después de un estudio intenso del mismo, he de decir que nos ha
parecido interesante y enriquecedor. Son muchas las ideas que se pueden extraer del mismo para
llevar a la práctica.