En la presente investigación se establece información relevante de la actual innovación de las impresoras 3D, sus características, sus beneficios y propuestas que las cuales pueden interferir en la actual educación.
1. Hoy en día la importancia de la inclusión de la impresión 3D en grados profesionales y en los
colegios es ya un hecho. Ya que la formación es esencial para la aplicación e implementación de la
tecnología 3D profesional, especialmente para la industria es una necesidad profesional.
Los estudiantes se pueden beneficiar del uso de la impresión 3D de dos maneras diferentes:
Primero, porque adquieren conocimientos sobre nuevas tecnologías. Esto es importante, ya que la
impresión en 3D tendrá cada vez más importancia en el futuro y conllevará profundos cambios
económicos y sociales a través de la tecnología, sin duda se habla que abrirá un campo laboral. Por
otro lado, gracias a la impresión 3D en la educación, teorías complejas pueden simplificarse. Por lo
tanto, los estudiantes se benefician especialmente en las llamadas materias MINT, en donde las
tecnología 3D ayudan a su comprensión. Pero también para el uso en arte, tecnología, geografía,
aquí la impresión 3D puede ser una ventaja.
IMPLEMENTACIÓN DE
LA IMPRESIÓN 3D EN
LA EDUCACIÓN.
2. Los beneficios de la impresión 3D en la educación
Cada vez está más presente la tecnología en las aulas, las impresoras 3D son unas de las grandes
apuestas para los próximos años para el sector educación como apoyo en determinadas
asignaturas gracias a la posibilidad de materialización de un concepto estudiado en un objeto real.
1. Fomentan la creatividad y la capacidad de resolver problemas: La principal aportación
de las impresoras 3D es su capacidad
para materializar las ideas en objetos
reales. Esta funcionalidad provoca un
cambio de mentalidad en el alumno que
debe solventar los posibles obstáculos
que surjan en el mundo físico aplicando
la creatividad e innovando hasta obtener
el objetivo deseado. La adquisición de
estas aptitudes prepara mejor a los
estudiantes para el futuro mundo laboral.
2. Generan más participación: Las impresoras 3D convierten la experiencia del aprendizaje
en un proceso mucho más lúdico y participativo. Algunos centros escolares crean espacios
comunes para utilizarlas en los que los estudiantes pueden explorar de manera conjunta. El
papel del profesor para dinamizar su uso es muy importante.
3. Captan el interés de los estudiantes: La posibilidad de aprender a través de la práctica y
de ver el resultado real de sus diseños hace que los alumnos muestren más interés y se
sientan más motivados. Esto es especialmente interesante en el caso de los estudiantes con
problemas de atención que logran mejorar su capacidad de concentración. En definitiva,
pasar de las clases teóricas a la creación propia puede ser un gran incentivo en el proceso
de aprendizaje.
4. Facilitan la tarea del docente: Las
asignaturas de ciencias, tecnología, ingenierías
y matemáticas tienen en las impresoras 3D unas
grandes aliadas, ya que permiten trasladar a un
escenario real conceptos que, en ocasiones, son
difíciles de explicar. No obstante, y a pesar de
que su uso está generalmente asociado a estas
materias, las impresoras 3D también pueden
utilizarse en áreas como geografía o historia
para recrear mapas topográficos o lugares y
personajes, a modo de ejemplo.
5. Promueven la colaboración entre diferentes materias y departamentos: Diversas
experiencias han demostrado que el uso de impresoras 3D en el ámbito educativo fomenta
la colaboración entre diferentes materias y especialidades y promueve el trabajo en equipo.
3. Propuestas de uso educativo de la impresión 3D
La irrupción de la tecnología de impresión
3D presenta el reto de conocer cómo estos
medios tecnológicos pueden dar soporte a
actividades de enseñanza-aprendizaje,
utilizados como vía para adquirir
conocimiento y desarrollar capacidades
organizativas y de creación, así como el de
la cultura “maker”, en la que se potencia
que los individuos creen artefactos
adaptados a sus necesidades o mejore los
ya existentes, utilizando la tecnología.
El objetivo que se persigue es analizar el uso educativo de las impresoras 3D en la educación,
conociendo el proceso de impresión 3D, desde el diseño hasta la producción, así como la
participación activa del alumnado en el proceso. Esta nueva forma de imprimir y dar forma material
a nuestras ideas ya se implementa en diversos campos como la medicina, arquitectura y artesanías,
previendo un gran futuro en educación, donde esta tecnología está haciendo incursiones dando su
huella y brindando la posibilidad de modelar objetos en el aula.
Este tipo de tecnología permite transformar
un diseño digital en un objeto físico a través
de diferentes metodologías, cada una en
función de la forma y el tipo de material
utilizado para crear las piezas. De esta
manera, es posible tener en pocas horas,
por ejemplo, herramientas, utensilios de
laboratorio, maquetas o prototipos
realizados por los propios alumnos.
Una impresora 3D es una máquina capaz de realizar réplicas de diseños en 3 dimensiones, creando
piezas o maquetas volumétricas a partir de un diseño hecho por ordenador, descargado de internet
o recogido a partir de un escáner 3D. Las posibilidades que nos ofrece son enormes, ya que nos
permite imprimir diversos objetos o utensilios necesarios en las distintas áreas o materias
educativas. Por ejemplo, un docente de educación física, para un evento deportivo que finalice con
la entrega de medallas, podría buscar en cualquiera de los repositorios modelos de medallas,
descargarlas e imprimirlas.
Ana Karen Nolasco Nolasco.
María Soledad Rivera López.