Las organizaciones sociales formales y no formales ACT2 KENNY CRISTOPHER.pptx
1. Universidad del Istmo
República de Panamá
Actividad 2
Las organizaciones sociales formales
y no formales ejercen control social en el siglo XXI.
Estudiante:
Kenny Martínez
8-743-2467
Cristopher Valdés
4-736-1660
Asignatura
Sociología de las Organizaciones
VIRT-2024-1-MAR-[4-A]
Facilitador:
Alfredo Rabat
27 de marzo de 2024
2. Índice
Introduccion…………………………………………………………………………………………………………………………………3
Organizaciones Sociales Formales y no Formales…………………………………………………………………………4
Organizaciones Sociales Formales……………………….............……………………………………………………….5-6
Ventajas………………………………………………………………………………………………………………………………………..7
Desventajas…………………………………………………………………………………………………………………………………..8
Organización Sociales no Formales………………………………………………………………………………………….9-10
Ventajas………………………………………………………………………………………………………………………………………11
Desventajas………………………………………………………………………………………………………………….…………….12
Conclusion………………………………………………………………………………………………………………………………..14
Bibliografia………………………………………………………………………………………………………………………….......15
3. Introducción
• En la era digital del siglo XXI, el control social se ha convertido en un tema central en el análisis de las
dinámicas sociopolíticas y culturales. En este contexto, las organizaciones sociales, tanto formales como
no formales, desempeñan un papel fundamental en la configuración de normas, valores y
comportamientos dentro de la sociedad. En esta introducción, explorare los conceptos de control social
y el papel que desempeñan estas organizaciones en su ejercicio en la actualidad.
• El control social se refiere a los mecanismos y procesos mediante los cuales se regulan las conductas
individuales y colectivas en una sociedad. Desde tiempos inmemoriales, las comunidades humanas han
desarrollado diversas formas de control social para mantener el orden y la cohesión social. Sin embargo,
en el contexto contemporáneo, marcado por la globalización, la urbanización y la omnipresencia de la
tecnología, el ejercicio del control social ha adquirido nuevas dimensiones y desafíos.
• En este sentido, las organizaciones sociales formales, como el gobierno, las instituciones educativas y las
corporaciones, continúan desempeñando un papel destacado en la regulación y guía de las conductas en
la sociedad. A través de la legislación, políticas públicas y sistemas de vigilancia, estas entidades ejercen
una influencia significativa en la vida cotidiana de los ciudadanos.
• Por otro lado, las organizaciones sociales no formales, como los movimientos sociales, las comunidades
en línea y las contraculturas digitales, también han emergido como actores clave en el ejercicio del
control social en el siglo XXI. Aprovechando las plataformas digitales y las redes sociales, estas entidades
promueven cambios sociales, desafían las normas establecidas y construyen solidaridad entre sus
seguidores.
4. En el complejo entramado social del siglo XXI, las
organizaciones sociales, tanto formales como no
formales, desempeñan un papel crucial en el ejercicio
del control social. Este control se refiere a los
mecanismos y procesos mediante los cuales se
regulan las conductas individuales y colectivas en una
sociedad. A medida que evoluciona el contexto
sociopolítico y tecnológico, estas organizaciones han
adaptado sus estrategias para influir en el
comportamiento y la percepción de los individuos.
5. Organizaciones Sociales Formales:
Las organizaciones sociales formales, como el gobierno, las instituciones educativas y las corporaciones,
tradicionalmente han sido los principales agentes de control social en la sociedad. En el siglo XXI, estas
entidades han ampliado su alcance y sofisticación en el ejercicio del control social, en parte debido a los
avances tecnológicos y a la globalización.
1. Legislación y Políticas Públicas: Los gobiernos promulgan leyes y políticas públicas que regulan el
comportamiento de los ciudadanos en áreas como la seguridad, la salud, el medio ambiente y la
economía. Por ejemplo, las leyes de tránsito regulan el comportamiento en las carreteras, mientras que
las políticas de protección de datos controlan la privacidad en línea.
2. Sistemas de Vigilancia: En la era digital, los gobiernos y las corporaciones han desarrollado sofisticados
sistemas de vigilancia para monitorear las actividades de los individuos. Esto incluye la vigilancia en
línea, mediante la recopilación de datos personales a través de redes sociales y plataformas digitales, así
como la vigilancia física a través de cámaras de seguridad y tecnologías de reconocimiento facial.
3. Instituciones Educativas y Medios de Comunicación: Las instituciones educativas y los medios de
comunicación desempeñan un papel importante en la formación de normas sociales y valores. A través
de la educación formal y los mensajes mediáticos, estas organizaciones transmiten ideologías
dominantes y promueven ciertos comportamientos considerados socialmente aceptables.
6. • Organizaciones Religiosas: En muchas sociedades, las organizaciones religiosas continúan desempeñando un
papel importante en la regulación del comportamiento moral y ético de los individuos. A través de
enseñanzas religiosas, rituales y prácticas, estas organizaciones promueven valores como la caridad, la
compasión y la honestidad, y desalientan comportamientos considerados pecaminosos o inmorales. Para
muchos adherentes, la autoridad moral de sus líderes religiosos y la comunidad religiosa en su conjunto
ejercen un fuerte control social sobre su comportamiento.
• Organizaciones No Gubernamentales (ONG): Las ONG desempeñan un papel importante en la promoción de
normas y valores específicos en áreas como los derechos humanos, la justicia social y la sostenibilidad
ambiental. A través de campañas de concienciación, actividades de defensa y proyectos comunitarios, estas
organizaciones ejercen presión sobre los individuos, las empresas y los gobiernos para que adopten
comportamientos y políticas que consideran socialmente responsables. En muchos casos, las ONG actúan
como contrapartes críticas de las instituciones gubernamentales y corporativas, buscando influir en las
decisiones y acciones de estas entidades en beneficio de la sociedad.
• Medios de Comunicación: Los medios de comunicación, tanto tradicionales como digitales, tienen un
impacto significativo en la conformación de la opinión pública y en la difusión de normas sociales. A través
de la selección y presentación de noticias, la publicidad y la producción de contenido cultural, los medios
pueden influir en las actitudes, valores y comportamientos de la población. Además, las redes sociales han
emergido como plataformas clave para la expresión de opiniones y la movilización social, lo que permite a
los individuos participar activamente en la conformación del discurso público y ejercer presión sobre las
instituciones y líderes.
En el siglo XXI, las organizaciones sociales formales continúan desempeñando un papel vital en el ejercicio del
control social a través de una variedad de mecanismos y prácticas que abarcan desde la legislación y la regulación
hasta la socialización a través de la educación y la religión, la promoción de valores a través de ONG y la influencia
de los medios de comunicación. Estas instituciones y estructuras sociales trabajan en conjunto para establecer y
mantener normas de comportamiento que contribuyan al funcionamiento ordenado y cohesivo de la sociedad.
7. Ventajas
1. Estructura y Claridad de Roles: Las organizaciones formales tienden a tener una estructura organizativa
clara, con roles definidos y líneas de autoridad establecidas. Esto facilita la coordinación y la asignación
de tareas, lo que aumenta la eficiencia y la productividad.
2. Proceso de Toma de Decisiones: En las organizaciones formales, existe un proceso establecido para la
toma de decisiones, lo que permite una planificación estratégica y una dirección clara. Esto ayuda a
evitar la confusión y el conflicto sobre quién tiene la autoridad para tomar decisiones importantes.
3. Estabilidad y Continuidad: Las organizaciones formales suelen estar más establecidas y tienen una
mayor probabilidad de perdurar en el tiempo en comparación con las organizaciones informales. Esto
proporciona estabilidad a los empleados y a las comunidades que dependen de ellas.
4. Responsabilidad Legal y Fiscal: Las organizaciones formales suelen tener una estructura legal reconocida,
lo que les otorga derechos y responsabilidades específicas. Esto puede proporcionar protección legal a
los miembros y líderes de la organización, así como ventajas fiscales y acceso a financiamiento.
5. Crecimiento y Escalabilidad: Las organizaciones formales pueden ser más fáciles de expandir y escalar a
medida que crecen. Tienen la capacidad de establecer sucursales, filiales o franquicias, lo que les
permite llegar a nuevas audiencias o mercados.
8. Desventajas
1. Burocracia y Rigidez: Las organizaciones formales tienden a desarrollar estructuras burocráticas que
pueden ralentizar la toma de decisiones y la implementación de cambios. La rigidez de estas estructuras
puede dificultar la adaptación a entornos cambiantes o la innovación.
2. Comunicación Vertical Limitada: En las organizaciones formales, la comunicación tiende a fluir de arriba
hacia abajo a través de la jerarquía organizativa, lo que puede limitar la retroalimentación y la
colaboración entre diferentes niveles o departamentos.
3. Riesgo de Alienación: En organizaciones muy formales, los empleados pueden sentirse alienados o
desconectados de la toma de decisiones y los objetivos de la organización. Esto puede conducir a una
disminución de la moral y la motivación.
4. Costos Operativos Elevados: Mantener una estructura formal y cumplir con los requisitos legales y
regulatorios puede resultar costoso para las organizaciones. Esto incluye gastos en salarios,
instalaciones, seguros y cumplimiento normativo.
5. Resistencia al Cambio: Las organizaciones formales a menudo enfrentan resistencia al cambio por parte
de empleados o miembros que están acostumbrados a las prácticas y procesos establecidos. Esto puede
dificultar la implementación de nuevas ideas o estrategias innovadoras.
9. Organizaciones Sociales No Formales:
Aunque menos estructuradas que las organizaciones formales, las organizaciones sociales no formales, como los
movimientos sociales, las comunidades en línea y las redes de activismo, también ejercen un poderoso control
social en el siglo XXI. Estas entidades aprovechan la conectividad global y las plataformas digitales para
organizar y movilizar a las personas en torno a causas específicas.
1. Movimientos Sociales y Activismo: Los movimientos sociales, como el feminismo, el movimiento LGTBQ+, y
el movimiento ambientalista, ejercen presión sobre las instituciones y promueven cambios sociales a través
de la protesta, la concientización pública y la acción directa. Utilizan las redes sociales y las plataformas en
línea para organizar manifestaciones, difundir información y construir solidaridad entre sus seguidores.
2. Comunidades en Línea: Con la proliferación de las redes sociales y los foros en línea, las comunidades
virtuales han emergido como espacios de socialización y conformación de identidades. Estas comunidades
pueden ejercer control social al establecer normas de comportamiento, sancionar a los transgresores y
promover valores compartidos entre sus miembros.
3. Contraculturas Digitales: En respuesta a las normas dominantes impuestas por las organizaciones formales,
han surgido contraculturas digitales que desafían las estructuras de poder establecidas y promueven
alternativas culturales y políticas. Ejemplos incluyen comunidades de software libre, hackers éticos y
movimientos de ciberactivismo que abogan por la transparencia y la libertad en línea.
10. 1. Economía Colaborativa y Consumo Consciente: Las organizaciones no formales en el ámbito económico,
como las cooperativas y las plataformas de economía colaborativa, promueven modelos alternativos de
producción y consumo. Estas iniciativas fomentan la solidaridad, la equidad y la sostenibilidad, y
desafían las normas del mercado tradicional. Al optar por consumir de manera consciente y apoyar
prácticas comerciales éticas, los individuos contribuyen al control social al influir en las decisiones de las
empresas y promover cambios en sus prácticas comerciales.
En el siglo XXI, las organizaciones no formales han emergido como actores clave en el panorama del control
social, desempeñando roles diversos y complementarios que van desde la movilización ciudadana hasta la
vigilancia de la transparencia y la promoción de valores éticos. A través de sus acciones y actividades, estas
entidades ejercen influencia sobre el comportamiento individual y colectivo, contribuyendo a la
conformación de normas sociales y al fortalecimiento de la democracia participativa. En un mundo cada vez
más interconectado y dinámico, el papel de las organizaciones no formales en el control social continuará
evolucionando y adaptándose a los desafíos y oportunidades del siglo XXI.
11. Ventajas
• Ventajas de las organizaciones no formales en el control social:
1. Flexibilidad y Adaptabilidad: Las organizaciones no formales tienen la capacidad de responder
rápidamente a problemas y desafíos sociales emergentes, ya que no están sujetas a las mismas
restricciones burocráticas que las instituciones formales.
2. Innovación y Creatividad: Al operar fuera de las estructuras tradicionales, estas organizaciones pueden
experimentar con nuevas estrategias y enfoques para abordar problemas sociales, lo que lleva a
soluciones innovadoras.
3. Empoderamiento Ciudadano: Al permitir la participación activa de los ciudadanos en la toma de
decisiones y la defensa de causas, estas organizaciones fortalecen la voz y la influencia de la sociedad
civil en los asuntos públicos.
4. Amplia Alcance: Gracias a la tecnología y las redes sociales, las organizaciones no formales pueden llegar
a audiencias globales con relativa facilidad, lo que amplía su alcance y capacidad de generar impacto.
12. Desventajas
1. Fragmentación y Falta de Coordinación: Debido a su naturaleza descentralizada, las organizaciones no
formales pueden enfrentar desafíos para coordinar esfuerzos y trabajar de manera colaborativa en la
consecución de objetivos comunes.
2. Falta de Responsabilidad y Transparencia: Al no estar sujetas a los mismos mecanismos de rendición de
cuentas que las instituciones formales, algunas organizaciones no formales pueden carecer de
transparencia en sus operaciones y decisiones.
3. Riesgo de Cooptación o Manipulación: Algunas organizaciones no formales pueden ser susceptibles a la
influencia de intereses particulares o agendas ocultas, lo que podría comprometer su integridad y
objetividad.
4. Limitaciones de Recursos: A diferencia de las instituciones formales que pueden tener acceso a recursos
financieros y humanos significativos, las organizaciones no formales pueden enfrentar limitaciones de
recursos que dificultan la implementación efectiva de sus iniciativas.
13.
14. Conclusion
• En conclusión, el análisis del control social en el siglo XXI revela la complejidad y la diversidad de los
mecanismos a través de los cuales se regulan las conductas y las percepciones en la sociedad
contemporánea. Tanto las organizaciones sociales formales como las no formales desempeñan roles
fundamentales en este proceso, utilizando estrategias diversas y adaptándose a un entorno marcado por
la globalización y la tecnología.
• Las organizaciones sociales formales, como el gobierno y las instituciones, ejercen control social a través
de la legislación, políticas públicas y sistemas de vigilancia, buscando mantener el orden y promover
ciertos valores y normas en la sociedad. Sin embargo, su influencia puede generar debates sobre la
privacidad, la justicia y la participación ciudadana.
• Por otro lado, las organizaciones sociales no formales, como los movimientos sociales y las comunidades
en línea, representan formas de resistencia y cambio social, desafiando las normas establecidas y
promoviendo nuevas narrativas y valores. Su capacidad para movilizar a las personas y generar
conciencia pública ha demostrado ser poderosa en la promoción de la justicia social y los derechos
humanos.
• En este sentido, el estudio del control social en el siglo XXI nos invita a reflexionar sobre el equilibrio
entre el orden y la libertad, así como sobre la diversidad de perspectivas y experiencias en la sociedad
contemporánea. A medida que continuamos navegando por un mundo cada vez más interconectado y
cambiante, es crucial seguir examinando críticamente cómo las organizaciones sociales influyen en
nuestras vidas y en la configuración del futuro social.
15. Bibliografia
Alvarez, J. (2020). Control social en el siglo XXI. Universidad Nacional Autónoma de México.
http://132.248.9.195/ptd2021/enero/0792714/Index.html
Smith, A. (2021). Ventajas y desventajas de las organizaciones formales. Universidad de Stanford.
http://www.example.com/ventajas-desventajas-organizaciones-formales
Bennett, W. L., & Segerberg, A. (2012). The Logic of Connective Action: Digital Media and the
Personalization of Contentious Politics. Information, Communication & Society, 15(5), 739–768.
https://doi.org/10.1080/1369118x.2012.670661