Las medidas higiénicas personales, con los animales, los alimentos y el medio ambiente son importantes para prevenir enfermedades. Cuando un animal se enferma, es necesario aislarlo y llamar a un veterinario para que lo trate. Se debe seguir las instrucciones del veterinario y comunicar su muerte para exámenes. Es crucial controlar la entrada de animales, vehículos y personas a la propiedad para prevenir la propagación de enfermedades.