Este documento discute la importancia de una buena organización del aula para lograr aprendizajes efectivos. Señala que la disposición de los materiales y el tipo de interacciones que se fomentan entre estudiantes y maestros influyen en el clima de aprendizaje. También destaca que el maestro debe mantener una buena comunicación con los estudiantes y contar con material didáctico adecuado, además de estar atento a cualquier imperfección para mantener el orden y control en el aula.