El documento describe las cinco caras de la opresión de las mujeres identificadas por Iris Marion Young: 1) la división sexual del trabajo que impone una doble o triple jornada laboral a las mujeres, 2) la marginación de las mujeres en la participación social y toma de decisiones políticas y económicas, 3) la carencia de poder y falta de reconocimiento de la autoridad de las mujeres, 4) el imperialismo cultural que impone significados dominantes sobre las definiciones de género, y 5) la violencia contra las mujeres como un fenómeno social sistemático motivado