El plexo braquial se origina de los nervios espinales C5 a T1 en el cuello y pasa por el hueco axilar para inervar los músculos del brazo. Su desarrollo embrionario involucra las prolongaciones de los somitas cervicales y dorsales. La exploración de reflejos incluye el bicipital, supinador largo y tricipital. Lesiones pueden causar parálisis de Erb-Duchenne, daño al nervio radial, mediano o cubital con síntomas motores y sensitivos específicos.